Capítulo 40: Athena

172 20 7
                                    

*Midas*

Después del estallido del Nexus todo se tornó blanco a mis ojos y perdí el conocimiento por unos instantes. De un momento empecé a despertar estaba acostado en el suelo, me levanté lentamente con mi vista borrosa viendo hacia mis lados, veía siluetas de los demás también en el suelo. Me llamó la atención ver a miaus, estaba también ahí pero su pelaje había vuelto a ser el de antes. Los chicos empezaron a reaccionar pero miaus no se movía, me preocupaba que siguiera inmóvil y me acerqué pero sabía que no lo podía tocar. Brutus pasó a mi lado tocando a miaus para revisarlo, estaba boca abajo y en cuanto volteó a miaus vimos que tenía una gran marca en su pecho, esa marca que tanto temía.

- Su pulso es muy débil - brutus tocaba el cuello de miaus

- Necesita un doctor - skye estaba asustada

- Chicos... no creo que haya doctores aquí - tina estaba parada al borde de la montaña dónde habíamos aparecido, me acerqué a ver y era una isla diferente, había un volcán, una isla flotante color morado, una zona desértica y lo que más me llamó la atención es que había una zona donde estaba el Nexus fuera de se dimensión y un meteorito que estaba por impactarse pero no se movía nada es como si el tiempo estuviera paralizado.

Voltie a todas las direcciones buscando a santuario, jey o a drift pero no se veía a nadie.

- ¿A dónde fue drift? Estaba con miaus

- No lo sé, tal vez despertó antes que nosotros - tina también los buscaba

Sentía una preocupación enorme, una angustia incomparable. Miaus estaba muy herido, santuario no se a donde fue y jey... probablemente murió, tal como lo había dicho drift.

*Narradora*

En otra parte de la nueva isla estaba santuario inconsciente junto a jey. El abría sus ojos lentamente confundido por lo que había pasado, se levantó lentamente y vió que había regresado a su antigua isla...Athena. regreso su mirada a dónde estaba anteriormente y vió que Jey aún seguía en el suelo pero ahora su cabello estaba suelto y había vuelto a ser rosa. Se acercó apresurado poniéndose de rodillas para levantarla un poco.

- Jey... Jey despierta - la movía intentando que reaccionara - ¿Jey? - empezaba a angustiarse y puso su oreja en el pecho de ella pero no escuchaba los latidos, no sentía su pulso y no estaba respirando - no...nonono tienes que despertar - sus ojos se cristalizaron - Por favor no me hagas esto despierta, tienes que despertar - lloraba mientras la abrazaba - perdóname ...perdóname por no creerte tal vez te hubiera podido ayudar - lloraba sin parar y miraba al rededor buscando a los demás pero no veía a nadie así que se levantó con ella en brazos - ¡MIDAAS! ... ¡SKYEE! - gritaba los nombres de sus compañeros esperando respuesta o que al menos lo escucharan. Caminó en dirección al centro de la isla con la esperanza de encontrar con los demás - por favor tiene que haber alguien - buscaba desesperadamente ayuda pero no había absolutamente nada, sabía exactamente qué no había habitantes a quien acudir, solo tenía a los chicos pero no los encontraba y tampoco sabía si realmente habían aparecido en la misma isla. Caminó hasta llegar al centro un poco cerca de donde yacia el campo de energía del Nexus. Giraba en todas direcciónes cargando a Jey pero no había nadie, se rindió y se puso de rodillas lentamente dejando a Jey en el suelo sosteniendo su cabeza - Perdóname por no haberte dicho antes lo que sentía por ti - acariciaba su cara y quitaba los cabellos de su rostro - ahora es demaciado tarde pero... Te amo - solo la abrazó fuertemente una vez más cerrando sus ojos y llorando fuertemente soltando un grito de desesperación, frustración...dolor.

Midas-Bajo el frío del OroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora