Ángel 234(I&II)

Capítulo 26.

                    

Gwen Trainor.

Ha pasado una semana desde que me enteré que la legión de ángeles, verdaderamente existe. Pero debo admitir que dándole vueltas al asunto me sigue pareciendo irreal. Estos ángeles son como toda persona, físicamente se camuflajean entre nosotros y pasan por alto. Siempre los han puesto en un pedestal como seres puros y celestiales. Cuando realmente son todo lo contrario. No son de esos que cumplen deseos y los que pintan en los techos de las iglesias. Son reglas absurdas que se hacen cumplir entre ellos por la vieja era de ángeles en el pasado. La historia dice que castigaron a Los Grigori, llamados Los Vigilantes o Los Ángeles Caídos, por amar a las hijas del hombre y haberse apareado con ellas. Concibiendo así, un ser antinatural, Niphilims. En la historia dice que los Nephilims fueron gigantes que comenzaron a destruir la tierra. Y por eso mandaron a la Legión de Ángeles a destruirlos y como consecuencia desterraron a los Ángeles Caídos por siempre, a todos los 200 Grigori.

Hult me dijo que esta parte de la historia es totalmente falsa en cierta parte. Porque los Nephilims no fueron gigantes, si no mitad humanos y mitad ángeles. Pertenecientes de la tierra, podían vivir aquí como personas normales. Tenían ciertas habilidades. A la legión le pareció algo antinatural, por el hecho de que los ángeles no fueron creados para procrear con humanos. Y por eso es que dicen que comenzaron a destruir la tierra. Porque los Nephilims destruyeron las "reglas de la naturaleza" siendo ellos antinaturales. Sin embargo, estos seres nacían como bebés y crecían en el mismo ciclo que un humano lo hace. Ni siquiera eran inmortales, pero si poseían poder.

Esto desató la ira del jefe de la Legión, y mandó a matarlos, hasta a los que apenas eran unos bebés. De ahí viene el motivo de que los ángeles tenían prohibido sentir amor. No querían que otra tragedia como un Nephilim volviera a existir en el mundo. Sin embargo, dicen que aún hay Nephilims aquí. Que han sido creados y no descubiertos por la legión. Viven en constante peligro y tienen que ocultarse.

Hult no es el único que desobedece las reglas. Porque esos mismos nephilims son hijos de ángeles que se la pasan aquí en la tierra. Solo por el motivo de encontrar alguna mujer y estar con ella. Tener sexo, son como adictos al sexo. Como si fuesen demonios, los demonios no son más que ángeles desterrados por rebelarse. Y es algo que me parece irónico, entre ellos rompen sus mismas reglas. Solo que unos aman y otros solo buscan nada más que sexo.

Los ángeles no eran seres puros. Eran una dinastía.

Los desterrados dejaron de llamarse los caídos. El grupo que fue desterrado junto a Hult, se le llama Los Ángeles Rebeldes.

Hult ha pasado la semana distraído... Luego de que Camille lo llamó se ha notado fuera de sí. El otro tema es que, desde ese día, Camille se ha estado quedando en su casa porque no quiere volver a la suya hasta que las cosas se calmen. Si, si si, tenía que admitir que esos celos crecían ligeramente en mí. No me agradaba en absoluto la idea de Hult y ella en una misma casa y más con el hecho de que luego de clases solo nos vemos menos de dos horas porque luego estará "ocupado". Confío en él, sé que no haría nada malo con ella y que no me lastimaría. Pero, aunque uno sepa eso, siempre queda esa espina en el estómago.

Hoy era viernes. Hoy jugaría el equipo del instituto contra el equipo de la preparatoria Weiston, sería al final de la tarde. Y era uno de los juegos más importantes, porque el que ganara pasaría al último juego. Todo el mundo habló hoy de lo emocionante que iba a ser. Estando en la cafetería con los chicos, de lo único que hablaron fue del partido de hoy y lo emocionados que estaban. Me dijeron que no podía faltar. Quería ir, pero mis ganas se esfumaron porque mi plan era hablar con Hult en la mañana, lo busqué a la hora de comer. Pero él ya se iba. ¿A dónde? No lo sé, solo me dio un beso en la frente y me dijo que me escribiría. ¿Me ha escrito? No, no lo ha hecho. Quería decirle para ir al partido de hoy, juntos. Pero no me dio el tiempo de hacerlo. Y no le escribiría hasta que él lo hiciera.