𝒱𝑒𝒾𝓃𝓉𝒾𝒸𝓊𝒶𝓉𝓇𝑜

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𝒮𝓊𝑔𝒶𝓇𝓂𝒶𝓃

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𝒮𝓊𝑔𝒶𝓇𝓂𝒶𝓃

Omnisciente

Nique tenía sus aretes de siempre: tres arracadas de plata en cada oreja, acomodadas de la más grande a la más pequeña (multimedia), tenía una sudadera negra, unos pantalones grises, sus tenis y un chongo caído con algunos mechones de cabello en su rostro; Nique entró a Pop's y se sentó en la barra

—Hola, Pop —lo saludó la rubia—. ¿Me das una malteada de chocolate doble?

—Claro, ¿te la llevo a la mesa de Jughead? —le dijo el hombre

Nique frunció levemente el ceño y volteó. Ahí estaba el, comiendo con Toni. El también la estaba viendo. Nique rápidamente regresó su mirada al hombre

—No. Para llevar —le dijo Nique

—¿Pelearon?

—No, terminamos —le dijo Nique

—Es una lástima. Se notaba lo mucho que se amaban. De hecho, de todas las parejas que he visto entrar y salir de aquí, ustedes siempre fueron de mis favoritas

Nique le sonrió al hombre. Después, Pop se fue a hacerle su pedido a Nique. Estuvo esperando por unos minutos, hasta que su celular sonó. La chica dio un respingo, pero se calmó cuando se percató de que era su mamá

—¿Mamá? —dijo cuando contestó—...Okey, voy para allá —dijo cuando su madre terminó de explicarle

Pop le dio su malteada, pago y después salió del lugar para dirigirse a su casa

Cuando entró, ya todos se encontraban ahí. Nique entró a la sala y se sentó en un sillón individual. Se acurruco en el mientras empezaba a tomarse su malteada. No estaba de humor para aparentar. Kevin, Archie, Veronica y Betty vieron a la rubia extrañados

—Alice, gracias por tu ayuda —le dijo la alcaldesa

—De nada, alcaldesa McCoy —le dijo Alice—. Cuando supe lo qué pasó, decidí que debíamos reunirnos para controlar a este grupo de mentirosos, drogadictos y fornicadores —Nique, cuyo sofa se encontraba a un lado de donde su madre se encontraba parada, volteó a verla sin dejar de tomar de su malteada—. Excepto mi Betty y mi Niqui, quienes supieron dejar la fiesta antes de volverse una bacanal...

—Dios. Mamá, por favor, ya —le dijo Betty

—Genial. Aquí vamos —dijo Verónica en un susurro a Archie que era audible solamente para los adolescentes—. Santa Betty y súcubo Veronica —dijo—. Yo use Jingle-Jangle, pero ella tuvo un brote psicótico

—Nique, baja los pies del sillón —le dijo Alice

—No es por ser grosera, mamá. Pero francamente no tengo ganas de verme presentable ni de ser educada después de terminar con mi novio. Así que continúa con lo tuyo —le dijo Nique

𝒟𝑜𝓂𝒾𝓃𝒾𝓆𝓊𝑒//𝒥𝓊𝑔𝒽𝑒𝒶𝒹 𝒥𝑜𝓃𝑒𝓈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora