Los Cooper. La familia perfecta. Novios de preparatoria que se casaron y tuvieron tres bellas hijas. Polly, Dominique y Betty.
Perfección. Algo imposible de alcanzar, pero algo que Alice Cooper les exige a sus dos hijas. Sus mellizas. Dominique y El...
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ℳ𝓇𝓈. ℬ𝓊𝓇𝒷𝓁𝑒
Omnisciente
En la madrugada, todos habían recibido otro VHS. Solo que esta vez, la toma era desde mucho más cerca. Todos estaban asustados por lo que aquel sujeto sin nombre haría después. Sin embargo, los estudiantes, tenían otra cosa de que preocuparse. La universidad. Las universidades finalmente habían empezado a mandar sobres. Eran días muy estresantes para los alumnos de último año. Por eso el director pidió a la consejera de la escuela, la Sra. Burble, que extendiera su horario de oficina.
Nique entró a su casa
—Hola, mamá —dijo al verla sentada en el comedor—. Haré una bebida. ¿Quieres un poco? —dijo mientras se acercaba—. ¿Que tienes? —preguntó al ver el rostro de su madre—. ¿Está todo bien?
—Eras tan dulce de pequeña, Dominique. Tan inocente. Recuerdo cuando recibiste tu primera cámara y le tomabas fotos a todos y a todos...con tu diadema negra —dijo, con nostalgia. Finalmente, se volteó a verla—. ¿Desde cuando mientes?
—¿De que estás hablando? —le preguntó
La mujer sacó una carta
—"Querida Srta. Dominique Cooper, tras revisar curiosamente su solicitud de ingreso, el comité de admisiones lamenta informarle que no podemos ofrecerle un lugar en la universidad de Yale" —después, le pasó la carta
—¿No me admitieron?
—Ni a ti, ni a tu hermana. Pero ya tendré también esta conversación con ella después
—Espera, ¿abriste nuestro correo? —le dijo
—Me puse a pensar: "¿Como es que ni mi Niqui, ni mi Betty fueron admitidas? ¿Que las tiene tan distraídas... que les costó su futuro?" Y revise sus cuartos.
—¿Que hiciste que?
—Y no encontré nada en el cuarto de Betty. Pero, ¿sabes que halle en el fondo falso de tu mesa de noche?
La mujer deslizó las pastillas anticonceptivas hasta Nique
—Ay, por Dios, mamá —dijo
—Deberías estudiar. Deberías enfocarte. En cambio, estás fuera de control.
—Okey, es todo. Esto es el colmo —dijo—. No voy hablar sobre esto —dijo mientras levantaba las pastillas—. No voy a hablar de nada. Y tú y yo no hablaremos más. Has estado invadiendo mi privacidad por años, y se acabó
La chica se dio la vuelta y se fue
(...)
—Sra. Burble, ¿tiene un minuto? —le pregunto Nique a la mujer