Capítulo 20

678 85 70
                                    

[2 semanas después]

Pov. Mauro

Jadeé, apoyando mi frente en el hombro de Mati, tratando de recuperar el aire que había perdido.

―Espero que ninguno haya salido y visto el auto... ―susurró Mati a mi oído, e inevitablemente reí.

Estábamos fuera de la casa de Valen, donde ahora teníamos una fiesta. Había venido con Mati, y no nos pudimos contener de hacer una rondita en el auto.

Ahora, ya satisfechos, nos vestimos y arreglamos antes de finalmente salir del auto, al que Mati le puso alarma antes de ir a tocar la puerta de la casa de Valen.

Nos abrió Manu, que tenía prácticamente colgando de él a un Dani bastante tomado. Y claro, el rostro de Vainstein seguía serio.

―Esperaba que nos abra Valu. ―comenté, algo sorprendido.

―Está chapando con Mateo, con suerte se acuerda su nombre ahora. ―comentó divertido.

―Maaaanu... ―lloriqueó Ribba, a lo que el nombrado rodó los ojos.

―¿Y a este que le pasa? ―preguntó Mati con diversión, mientras observábamos al rubio frotar su mejilla contra la de Manu.

―No sé de quién me estás hablando ―respondió, a lo que Dani hizo un puchero―. Pasen nomás.

Miramos a Ribba, pero seguía tratando de llamar la atención de Manu. Volvimos a mirar a Vainstein, que suspiró.

―Me ignoró cuando le dije que dejara de tomar. ―explicó.

―Ah, así que ahora ignoras su existencia. Inteligente jugada, cerebrito Martínez. ―respondí, sacándole una risa a Mati y Manu, y otro lloriqueo a Dani.

Finalmente entramos, tomados de la mano. Fuimos a saludar a los pibes, a Paulo, a Nicki, a Nacho, Mecha, Juli...

Hasta que ubiqué a Valen y Mateo, chapando en una esquina. Se me ocurrió una idea.

―Che, ya vuelvo. ―dije a Mati.

―¿Ahora cuál te vas a mandar? ―preguntó, a lo que fingí indignación.

―¿Qué estás insinuando? Yo soy un hombre respetuoso y honorable, jamás haría alguna maldad a alguien, menos cortarle un chape a dos pibes.

Mati rio, y tras darme un pequeño beso fugaz, fue a buscar bebidas.

Yo, por mi parte, me acerqué a Valen y Teo, tratando de ser silencioso y sigiloso, que no notaran mi presencia. Y cuando estuve a centímetros de ellos, acerqué más mi rostro, teniendo una perfecta imagen de su intercambio de saliva.

―Disculpen, jovencitos, ¿No tendrían ustedes la hora? ―pregunté.

Los dos pegaron un salto, claramente asustados, y fue mi turno de reír al ver sus caras, primero de sorpresa, y después de molestia.

―Gil de mierda. ―se quejó Valen, dándome un golpe.

―¿No tenes que comer que andas interrumpiendo la comida de otros? ―se quejó Teo, lo que me sacó una nueva risa.

―Que comer tengo, ¿No viste al labios de petero ese que tiene alto culo? ―dije, cabeceando ligeramente a donde estaba Mati, charlando y riendo con Ivo y Joaco.

―¿Te referís a Dani o a Matías? Espero que no a Dani o se pudre todo con Manu. ―respondió Valen, lo que nos hizo reír tanto a Teo como a mí.

Seguimos charlando un rato, hasta que llegó Manu, pidiendo ayuda con el tomado de Daniel. Los dos-Valen y Teo- fueron a ayudarlo y yo decidí ir por algo de comida. Entré a la casa y fui a la cocina, donde habían varios snacks en la mesa.

S.L.U.T. [Litcko]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora