Capitulo 20: Bajo la lluvia

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¿Tú piensas detenerme mocoso Lan?

¡Si!- gritaba JingYi furioso.

¿Acaso no sabes quién soy?

Si, lo sé... eres Xue Yang, el asesino... pero dentro de un momento no serás nada. 


Xue Yang, adelanta el paso y de repente, su brazo cercenado es regenerado por una poderosa energía oscura proveniente del núcleo de tigre estigio, pudiendo tomar su famosa espada, por lo que no tarda en atacar a JingYi, pero este detiene el ataque con una velocidad sorprendente, el general fantasma estaba peleando con una de las bestias de león, el escuchar el sonido de las espadas parecían como si el cielo estuviera enviando truenos.

Como si el cielo estuviera enojado por lo que estaba ocurriendo, una intensa lluvia comienza a llenar el lugar y fantasmas empiezan a materializarse, siendo los discípulos caídos de antaño, particularmente aquellos que se enfrentaron a la guerra contra el sol, pues cadáveres feroces emergían de la tierra queriendo detener al joven Lan y al general fantasma. 

Los jades, el patriarca y la discípula Sanren, llegaban a la fantasmagórica escena, viendo como fantasmas y cadáveres se enfrentaban, a lo lejos podían ver al líder de Yunmeng encadenado con la cabeza baja.

¡Jiang Cheng!- gritaba el primer jade, viendo la marca de la peonía en su pecho, por lo que corre a su auxilio, cuando es detenido por un cadaver feroz.

¡Lan Huan!- levantando la cabeza para verlo ligeramente pues un lado de su cara estaba muy herido- ¡Vete!

¿Tanto lo quieres Zewu-Jun?- diciendo como en eco, escuchando también la voz de Jin Guangyao- Dándole un puñetazo en la cara al loto.

¿Jin GuangYao?

Pude eliminar a mis enemigos, pero sólo me faltan los aquí presentes, los presumidos jades, el descontrolado patriarca, el orgulloso loto y la pequeña de la montaña- refiriéndose a Lixue Sanren.

Me temo que nunca tuve el privilegio de conocerte Jin Guangyao- sacando poder espiritual invisible para dirigirlo al loto- ¿Qué fue lo que yo te hice?

Ayudaste al primer jade a escapar... arruinaste mis planes de convertirlo en mi marioneta.



Mientras escuchaba la conversación, el segundo jade ardía en furia, después de lo que le hizo sufrir a su hermano durante años, como se atrevía a siquiera pensar que iba poder ser capaz de controlarlo, escuchando la risa de su amado.

Eres tan ingenuo Jin Guangyao- agitando a Chenqing- ¿Crees que ibas a ser capaz de eso? 

Mmmm...

Por más que lo intentaste con el anterior líder Nie, no te funcionó y no tuviste mas remedio que eliminarlo... no eres tan listo.

¿Crees que no sé lo que haces patriarca?- mirando hacia donde el general fantasma se encontraba, pues estaba muy cerca de donde estaba el líder- Tu marioneta no me va a detener.

¡No es mi marioneta!- cruzándose de brazos- Cuando vas a entender que él tiene conciencia y puede hacer lo que le plazca.

No importa- decía Xue Yang ya sin el eco de Jin Guangyao y tomando por los cabellos la cabeza del líder de Yunmeng, acercando su espada al cuello.



En ese momento Zidian, arde en todo su esplendor, como la furia de un dragón, los maestros ven la escena con sorpresa ya que no se imaginaron que ese joven tuviera tal control sobre el arma espiritual.

El loto entre las nubesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora