Tú eres la mujer de mi vida.

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Capítulo 43
Por fin creo que el destino alineo perfectamente todos los planetas para que tú y yo estemos juntas.

Elliot Durcet.

Kim invita a Stella, Ari y Darla a cenar, para que por fin logren una convivencia sana y olviden todos esos rencores añejos, eligió un restaurante que estaba cerca del salón Casanova.

El restaurante era japonés, todo se veía muy delicioso y la decoración extraordinaria, ellas ordenaron sushi, takoyaki y tomaron Soju menos Darla, ella pidió té verde con tapioca.
Al principio el ambiente se sintió un poco incómodo pero después de dos horas comenzaron a platicar como si fuesen amigas de toda la vida.

Kim: Jamás me hubiera imaginado que Ari encontraría a Darla.
Ari: Yo tampoco me lo imagine.
Stella: Muchas gracias por avisarme.
Ari: Realmente lamento todo el daño que cause ojala pronto lleguemos a ser amigas o al menos si nos llegamos a cruzar por la calle espero que no se sientan incomodas.
Stella: Es tiempo de olvidar los rencores, pero si vuelves a meter la pata (refiriéndose que no vuelva a equivocarse), no te lo vuelvo a perdonar.
Darla: Mejor hablemos de cosas interesantes, dinos Ari:
¿Qué tal te va en el amor?
Ari: Pues, hay una chica que desde hace tiempo está detrás de mí,
pero no me he acercado tanto a ella.
Darla: Deberías intentarlo.
Stella: Tal vez esa chica sea la indicada para ti.
Ari: Puede ser, la verdad es que me centrado mucho en mi trabajo ya que mantener el rating no es tan sencillo como parece.
Darla: Ahora que eres famosa, deberías invitarnos a tus eventos.
Ari: Claro con gusto.
Stella: Y a ti Kim...
¿Qué tal te va en el amor?
Kim: Pues estoy enamorada de alguien que quiere a alguien más, pero como ya me estoy cansando, creo que cortare lazos con ella.
Darla: Pues ella se está perdiendo a una mujer increíble.
Kim: Después de esta gira he decidido irme a un pequeño viaje por Europa y conseguir nuevos talentos para mi canal de radio.

*Ari volteo a ver con mucha tristeza a Kim*

Stella: Creo que tienes muy buen ojo para encontrar excelentes locutores.
Ari: Así es, Kim es muy buena.
Darla: ¿Y qué tal se llevan?
Seguramente Kim te jala mucho las orejas Ari je, je. –entre risas-
Kim: Pues a veces me saca canas verdes (refiriéndose a que la hace enojar) pero en general trabaja bien y respeta a sus compañeros de trabajo.
Ari: Kim es muy paciente conmigo, sin ella no podría estar hasta donde estoy ahora.

Darla se da cuenta de que Ari mira de una forma coqueta a Kim, así que sonríe.

Kim: Y ustedes ¿Cuándo piensan casarse?
Darla: Aún no tenemos fecha de boda pero queremos disfrutar cada momento de nuestra relación.
Stella: Así es, aún quiero continuar enamorando a esta hermosa mujer para que nunca más tenga dudas de mi amor.
Ari: El verlas tan felices, me hace ver que el amor que sentía era muy egoísta, era toxico, espero que algún día yo pueda llegar a amar de esa forma tan pura.
Darla: Sí, fuiste muy tonta pero yo creo que puedes llegar a ser una persona increíble y que el amor está más cerca de lo que imaginas.

*Darla voltea a ver a Kim*

Ari: Muchas gracias por intentar animarme.
Stella: Fuera de todo lo tóxico eres una chica buena, solo debes aprender a autorregularte.
Ari: Intentare hacerlo.
Kim: Chicas ya se hizo muy noche, creo que las dejare tengo que empacar mis cosas, mañana me voy de viaje.
Ari: Yo también, me retiro.
Stella: ¡Gracias por la cena!
Darla: Espero que sigamos en contacto.
Kim: Así será, por cierto toma esto Darla.

*Kim saca de su bolsa de mano una pequeña sonaja*
Darla en cuanto la mira comienza a sonreír.

Darla: Esta preciosa, muchas gracias. – emocionada-
Stella: Pero que bonita, muchas gracias Kim.

Ari y Kim se retiran del restaurante, mientras que Stella y Darla comienzan a platicar.

Darla: ¿Te diste cuenta?
Stella: ¿Qué paso?
Darla: Ari está enamorada de Kim
Stella: ¿En serio?
No lo note, pues yo no he dejado de mirarte.
Darla: Ya amor, me voy a desgastar de tanto que me miras.
Stella: Tú tienes la culpa eres muy hermosa.

Stella comienza a besar a Darla de una manera tierna, después la mira fijamente.

Stella: No quiero que vuelvas a dudar lo mucho que te amo y que me gustas demasiado.
Darla: No tengo dudas, eres la mujer de mi vida.
Aunque tú y yo tenemos un asunto pendiente.

Darla mira a Stella con una mirada de deseo, mientras muerde su labio.

Stella: Amor como que ya me dieron ganas de irme al departamento.
Darla: A mí también amor.

Mientras que Stella y Darla se dirigen al departamento en el algún hotel de Querétaro Ari y Kim están platicando.

Ari: Sé que he sido muy tonta, pero por favor no te vayas.
¡Realmente me encanta trabajar contigo!
Kim: Es que tú no lo entiendes, tú me gustas desde aquella vez que te encontré en el metro.
Todo este tiempo he sido muy paciente he intentado de mil formas controlarme pero cada día me gustas más, ahora me es difícil trabajar contigo.
Ari: Tú también me gustas.
Kim: No mientas, sé que dices eso porque ya no quieres estar sola.
No soy plato de segunda mesa al cual puedes venir cuando te sientas sola o te sientas rechazada.
Ari: La antigua yo, seguramente te hubiera usado como una segunda opción pero realmente quiero cambiar, quiero hacer que te enamores de mí. ¿Podrías darme una oportunidad?
Kim: Ya compre mis boletos para irme.
Ari: Sí tienes muchas ganas de ir, con todo el dolor de mi corazón te diré que vayas, en verdad quiero poner en primer estancia los sentimientos de la persona que me gusta antes que los míos ya no quiero ser egoísta.
Solo por favor, todos los días quiero que escuches la radio.
Kim: Wow, jamás pensé escuchar eso de ti.
Realmente quieres cambiar.
Ari: Quiero convertirme en aquella persona que valga la pena amar. –entre lágrimas-

Darla y Stella llegaron a su departamento, terminaron el asunto que tenían pendiente, lo hicieron con mucha pasión y amor.

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Amarte solo a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora