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Para JiMin, YoonGi es alguien amable sin una pizca de maldad, él único que le brindó una mano.
Para YoonGi, JiMin es un simple humano.
Pero... ¿Por qué un simplemente...
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Yoongi cerró la puerta lentamente, camino hasta las escaleras para bajarlas en completo silencio pues Alec y Jimin dormían plácidamente y no quería despertarlos.
Su teléfono vibró una vez estuvo en la sala.
Su entrecejo se arrugó cuando vio el identificador de llamadas.
Genial, y él que pensaba tener una noche tranquila.
El reloj marcaba las diez de la noche, Jimin y Alec se acababan de dormir, a su mente viene el recuerdo de Alec llorando porque Taehyung no había venido por él.
Sonríe al recordar lo que Jimin tuvo que hacer para calmar al menor, sin duda Jimin tiene manera para los niños.
De seguro Taehyung estaba teniendo una buena noche con su pasante Jeon, sonríe cínicamente porque sabe que aunque este casado, tanto Hoseok como Taehyung no volvieron a intimar, su matrimonio era más de apariencia que otra cosa.
No había amor de por medio, sólo el compromiso de tener sano y salvo al hijo de ambos.
Nuevamente su teléfono vibró, al parecer no iba a dejar de hacerlo hasta que contestara la dichosa llamada.
Pero, qué era exactamente lo que quería? Se supone que ya no tiene contacto con esa gente, entonces por qué estaba llamando su madre?
Soltando un suspiro, desliza su dedo y se lleva el móvil hasta su oído, preparado para escuchar la típica platica de su madre.
— Yoongi cariño, donde estás? Hoy es un día importante para la familia no lo recuerdas? —Es lo primero que aquella voz femenina dice cuando Yoongi atendió la llamada.
Yoongi arruga su entrecejo ante aquello. Día importante? Él no lo recuerda.
— Ummmm —No respondió nada más.
Un bufido se escucho al otro lado del móvil, no tenía que ser adivino para saber qué su madre estaba frunciendo su entrecejo ante su falta de habla.
— Es el cumpleaños de tu abuela, no piensas venir y desearle un feliz cumpleaños, la abuela se pondrá triste si no vienes cariño~ —Su madre debía de estar rodeada de gente para que actuará tan melosa, cuando era todo lo contrario una vez el telón se cerraba.
— No me interesa, dile a Yue que pase un buen cumpleaños, yo tengo cosas que hacer —Contesto tajante el pelinegro.
Un bufido se escucho al otro lado de la línea.
— Es más importante ese mocoso que duerme en la habitación con el pequeño Alec que tu propia familia? —La mandíbula de Yoongi se tensó.
— Como es que... —Una carcajada se escucho al otro lado de la línea.
— Cariño, quien crees que soy, yo lo sé todo, así que si no quieres que nada malo pase, ven a la fiesta de tu abuela y convive con nosotros, al menos por unas pocas horas —Yoongi cerro sus ojos, sintiendo ya la vena palpitar al lado izquierdo de su ojo.
