Estúpida mujer ¿La amo?

Capitulo 23:Los dos almirantes.

Drako despertó a las pocas horas de haberse dormido. Había regresado bastante noche a Palacio sin ser detectado, pero ahora mismo parecía haber una enorme agitación. Tal vez habían encontrado a Frieda. Su instinto le hizo saber que ya era muy tarde para seguir fingiendo, así que optó por abandonar la residencia real antes de que se entrometieran otras personas. Salió sin problema alguno del Palacio y echo a andar por las calles de Arabasta. Podía notar las miradas de la gente sobre él, pero nadie se atrevía a abordarle. Sonrío satisfecho, lo más probable era que en esos momentos Nico Robin ya les hubiera revelado la verdad a todos. Debería actuar de inmediato. Luego de un rato de caminar sin rumbo, se topó con un par de soldados que le ordenaron detenerse. Él los ignoro y pasó de largo, mientras la gente alrededor observaba angustiada la escena, un grito de terror escapó de la garganta de los ciudadanos al observar la rapidez con la que Drako se desembarazó de ambos soldados cuando uno tuvo la osadía de tomarlo por el brazo intentando detenerlo. Dejo ambos cuerpos al cuidado de la demás gente, aunque los pobres soldados ya no necesitaban más cuidado que el de un buen sepelio.

Ace comenzó a parpadear y finalmente abrió los ojos. Debido al medicamento de Chopper, sentía resaca (N/A: he oído que también da resaca por eso, no estoy segura ^^). La luz provocó que sintiera pequeñas agujas clavándose en su cabeza, pero no fue nada comparado al efusivo grito de su hermano.

-¡ACE! ¡ESTÁS VIVO!-sin darle tiempo a reprenderle por hablar en voz tan alta, Ace se encontró rodeado por los brazos elásticos de su extravagante hermano menor.

-L-L-Luffy…

-¡LUFFY TE ORDENE CLARAMENTE QUE NO DESPERTARAS A ACE!-vociferó una pelirroja en tono severo mientras entraba seguida por Usopp.

-No más gritos por favor-suplicó Ace mientras sostenía su cabeza entre ambas manos, sin embargo ninguno de los tres le oyó y Usopp comenzó a dar un buen discurso (en voz más que alta) regañando a Luffy por ser tan desconsiderado y no dejar descansar a Ace.

-Pero si él se despertó solo-se defendió el capitán haciendo un puchero.

-Bien, basta de discusiones sin sentido, Luffy, debes descansar, llevas todo la noche aquí. Ve a comer algo y a descansar, ¡yo, el gran capitán Usopp cuidare de Ace!

-Usopp… no es necesario que hables tan fuerte…- se quejó Ace.

-Descuida Ace, te contaré mis aventuras de bravo guerrero de mar y no tendrás oportunidad de aburrirte…-Luffy y Nami dejaron la habitación mientras Ace intentaba analizar su pasado preguntándose en qué momento hizo algo para que el karma lo castigara de tal forma.

-¡Ah, estoy tan feliz de que Ace esté bien! –comentó Luffy con una sonrisa, a la cual Nami respondió con otra igual de radiante. Entonces notó como el labio inferior de su nakama comenzaba a temblar.

-¿Luffy? ¿Estás bi…?

-Nami, ¿todos están bien?

-Etto… sí, salieron a buscar a Frieda en equipos: Zoro fue con Robin y Kohza, y Sanji fue con Chopper y Franky. Vivi está con Pell sobrevolando la ciudad para intentar localizarla y Chaka ha enviado a sus soldados a registrar la ciudad. Cobra ha ordenado que no dejen entrar ni salir de la ciudad a nadie. No escapará, tenlo por seguro- las palabras de Nami tenían la intención de tranquilizarlo, pero no funcionaron, ya que sin poder contenerse Luffy comenzó a llorar.

-Me alegro de que estén todos bien… no importa si Frieda escapa, preferiría no volverla a ver nunca más… pero que estén todos bien… temí que les hubiera hecho algo como a Ace…

-Luffy…-Nami se quedó sin palabras, era la primera vez que veía a Luffy derrumbarse de tal modo. Se veía tan humano, y a la vez tan maduro. No era que Luffy no supiera demostrar su preocupación por sus nakama, pero era la primera vez que Nami lo veía expresarse de una forma tan sensible, tan tierna… -Todo estará bien Luffy, ya verás- comentó mientras lo abrazaba. Sintió como se sonrojaba al sentir el contacto de su capitán, se sentía tan bien poder demostrarle, aunque fuera en un pequeño gesto, todo el cariño y agradecimiento que sentía por él. Era un momento único, así como ella había sido la única a la que Luffy le había confiado su sombrero, era la única que presenciaba en ese momento la debilidad de Luffy.