Cuando se Ponga el Sol (YoonMin)

Capítulo 16

Jimin tenía un ligero problema, tenía aproximadamente una hora despierto, pero no podía moverse, tenía la mitad derecho de su cuervo acalambrado, mientras la otra mitad estaba entumida, por lo que le era imposible moverse, el hecho de tener unas ganas inmensas de ir al baño no lo ayudaba mucho, pero eso no era lo peor, lo pero era que prácticamente la mitad de su cuerpo estaba encima de Yoongi, no sabía cómo habían acabado en esa posición, pero temía lastimarlo, la piel de Yoongi se había puesto demasiado sensible con sus tratamientos, así como los dolores eran constantes, supuso que al estar profundamente dormido el pelinegro no sentía mucho, pero al despertar sentiría demasiada incomodidad, muy probablemente dolor también, por eso tenía la urgente necesidad de moverse.

Eran esa clase de momentos que lo llenaban de impotencia y coraje hacia el mismo, cuando recordaba lo grave de su situación, que esto no mejoraría, simplemente se haría peor, que necesitaría ayuda, que tal vez, más pronto de lo que pensaba lo perdería todo, entonces es cuando el intenso dolor de la añoranza de algo que no podría tener de nuevo se hacía presente, recordándole una vez más, que sus sueños, deseos y metas, hace mucho tiempo habían quedado atrás, que el Jimin que disfrutaba de la vida ya no existía, nunca volvería a ser lo mismo.

No sabe cuánto tiempo estuvo llorando ni lamentándose de sí mismo, pero pronto sintió el cuerpo de Yoongi moverse, lo que le indico que muy pronto despertaría, pero lamentablemente él no podía moverse, ni limpiar sus lágrimas, pronto su humillación no podría ser peor.

—Estas llorando chismoso—. La pregunta llego antes de lo que se esperaba, se mantuvo en silencio, no quería sentirse más avergonzado—. ¿Qué paso?, ¿Te duele algo?

Pero Jimin no respondió, se sentía tan humillado en ese momento, que decidió quedarse callado, tal vez así Yoongi no volvería a preguntar, pero estaba muy equivocado.

—Jimin mírame, ¿Qué pasa? —. Insistió, al mismo tiempo que empezaba a moverse, lentamente, pues si debía admitirlo, el peso de Jimin le estaba resultando aplastante—. ¿Puedes moverte?, realmente no puedo respirar muy bien, me duele hasta la punta de mi dedo chico del pie.

—Ese es el problema Hyung—. Admitió en un susurro, ruborizándose al instante, debido a la penosa situación—. No puedo moverme, estoy entumido, es uno de esos días malos al parecer, pero si pudieras empujare hacia un lado, te lo agradecería.

—No te voy a empujar cuando te sientes mal, ¿Acaso crees que no tengo corazón? —. Pegunto con diversión, robándole unas ligeras carcajadas a Jimin, aligerando el ambiente.

—La verdad no sé, tendría que comprobarlo—. Respondió, siguiéndole el juego a Yoongi—. Pero hablo muy enserio cuando digo que tienes que empujarme, no me voy a poder mover hasta que se me pase, debo tomar mis medicamentos y si quiero que se me pase, necesito que me ayuden a hacer mis ejercicios, por lo que tendré que llamar a alguien, lo siento por las molestias Yoongi.

—Rubio, no eres una molestia, solo tus condiciones de vida han cambiado, para las personas que te aprecian brindarte ayuda no es una molestia—. Yoongi trataba de hacer sentir mejor a Jimin, porque entendía que sentirte imposibilitado para hacer cosas normales, era muy difícil, si él se sentía mal, imaginaba como podría llegar a sentirse Jimin—. Pero es enserio, no puedo empujarte, no lo voy a hacer.

—Yoongi, tienes que hacerlo, no nos podremos mover si no lo haces, tengo que llamar a Tae que me ayude, no podemos estar todo el día aquí—. Declaro Jimin.

—Rubio, admite que te encanta estar así en la cama conmigo, no todos tienen el privilegio—. Yoongi bromeaba, pero algo, muy en el fondo de su mente, le decía que parte de sus palabras eran muy ciertas—. Así que deberías aprovechar.