33. Secretos revelados

2.5K 390 201
                                    

"Aquí les dejo un vídeo para que se den una idea de la estructura de la canción". Pueden reproducirla al terminar su lectura. 🌬



~☆~




Cruzo la puerta del aula de clases correspondiente y una vez más no lo veo sentado en su lugar. Suspirando resignadamente me dirijo al mío.

Quito la mochila de mi espalda y me siento. A mi lado Noah y Keyla están en sus celulares.

- Hola – les saludo.

- Hola, Emi – Keyla me corresponde el saludo mirándome por un solo segundo para después volver a su celular.

Noah no responde.

Esta vez las clases transcurren demasiado lentas, estresantes y sofocantes. Cuando se llega la hora del almuerzo me levanto y voy a nuestro lugar de siempre.

Abro la puerta del salón de música y la cierro.

Está vacío.

Me siento en una esquina y recargo mi cabeza en la pared. Miro los alrededores y recuerdo cada bonito momento que he pasado junto a Joaquín aquí.

Hubo una vez en la que se me ocurrió hacerle una inocente broma manchándolo con su jugo de manzana. Terminó en Joaquín persiguiéndome y dando vueltas alrededor del piano hasta que le dije que no podía correr más y terminé con mi playera igual de mojada.

Vuelvo a la realidad y me doy cuenta de que estoy solo. Él no está conmigo.

Alejando esa sensación de soledad saco una libreta de mi mochila. Es la misma en la que anoté por primera vez algunas de las cosas que lo veía hacer constantemente.

La abro y miro lo que escribí.

Su día culmina a las 3 de la tarde

Siempre ve series los martes

Lo veo tomando café que prepara dentro de su cocina para llevárselo a su habitación

Le gusta dormir

Le gusta escribir

Lo veo con sus audífonos puestos todo el día

Se suponía que hoy Abraham vendría a mi casa a componer una canción conmigo, así que decidí iniciar con algo. Tomé un lápiz y comencé a escribir algunas frases.

Mi hobby es observarte desde mi habitación.

Que difícil es sentir por ti a escondidas.

No duermo hasta que veo que la luz de tu cuarto esté bien apagada.

Nos divide un edificio y aun así me doy cuenta de que nos es suficientemente cerca.

Quiero quedarme contigo a matar tu sillón mientras vemos tus series los martes.

Muero por verte preparando ese famoso café dentro de mi cocina.

Desde mi ventana llegué a conocerte, a saber más de ti que tus cuatro paredes.

Que difícil es correr y no poder alcanzarte.

Me gusta ser el aire que acaricia tu pelo, ser el hombre invisible y cuidarte en secreto.

Quisiera contarte todo lo que siento.

Que difícil es estar sin ti lleno de nada.

Cruza la calle y entra en mi vida.

Bufé y arranqué la hoja. La hice bola y la metí en mi mochila.

Tenía tantas ideas en mi cabeza, pero no podía ordenarlas.

Cúrame [Emiliaco]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora