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Escuchaba cómo Rhodey y Sam comenzaban a discutir.

— el secretario Ross ganó la medalla de honor del congreso, es una más de las que tú tienes. — escuché a Rhodey decirle a Sam.

— supongamos que aceptamos firmar, ¿en cuánto tiempo empezarán a seguirnos el rastro como a un montón de criminales?

— quieren firmar 117 naciones, son 117 pero según tú aquí no pasa nada.

— ¿aún quieres servir a dos partes?

— yo tengo una ecuación. — intervino Visión.

— ah... él nos dirá quién está bien. — le dijo Sam y yo me devolví para darle el biberón a Steve y comenzara a dárselo al bebé.

— ocho años después de que el Sr. Stark revelara ser Iron Man el número de personas alteradas de pronto ha crecido exponencialmente y durante el mismo periodo el número de amenazas de destrucción del mundo creció de igual manera que estos.

— ¿dices que esto es nuestra culpa?

— opino que tal vez haya una causalidad, nuestra fuerza origina el afán de retarnos y ese reto incita al conflicto y el conflicto... produce catástrofes, ser vigilados... es una idea que todos queramos tomar en cuenta.

— boom. — susurró Rhodey.

— Tony... es poco usual que no nos honre con tu hiperverbocidad. — le dijo Nat, él estaba casi acostado con la mano en la cara, pareciendo que estaba estresado.

— ya decidió cómo va a votar.

— me conoces muy bien...— dijo sarcástico  levantándose y yendo hacia la cocina. — en realidad tengo una jaqueca electromagnética, eso es lo que tengo, Cap, simple dolor, incomodidad. — dijo tomando una taza. — ¿quién pone restos de café en el triturador, ¿esto les parece un hotel para pandilleros? — sacó su celular y proyectó un holograma mientras se preparaba un café, era la foto de un chico. — ah... él es Charles Spencer, por cierto, es un gran chico, estudió ingeniería en computación con promedio sobresaliente, tiene un trabajo sencillo, Intel lo aceptó para el otoño pero primero decidió que quería vivir un poco antes de encadenarse a un escritorio, ver el mundo... tal vez servicio comunitario, Charlie no quiso ir a Las Vegas o a Fort Lauderdale, que es lo que yo hubiera hecho, no quiso ir a París o a Amsterdam... algo divertido, decidió pasar todo su verano edificando para los pobres, ¿en dónde creen? Sokovia, tal vez quería ser la diferencia, no lo sabremos, le echamos un edificio encima con un estilo tan heróico. — Steve me miró y lo miré igual. — no necesito tiempo para decidir. — siguió después de tomarse una pastilla para la jaqueca. — necesitamos que nos controlen, sin que haga falta yo en todo eso... si no aceptamos limitaciones no habrá control y seremos iguales que los malos.

— Tony, si muere alguien a tu cargo no te rindes jamás.

— ¿quién se dio por vencido?

— lo hacemos si no nos responsabilizamos de nuestros actos y este documento solo transfiere la culpa.

— perdón Steve pero eso... es peligrosamente arrogante, hablamos de la Organización de las Naciones Unidas, no del Consejo de Seguridad Mundial, ni de SHIELD ni de HYDRA.

— no pero tiene motivaciones personales que en ocasiones se alteran.

— y eso es bueno, eso me trajo aquí cuando entendí que mis armas eran capaces de hacer en manos erróneas, dejé de hacerlas y cerramos la producción.

— Tony, tú fuiste quien eligió hacerlo, firmar esto es conceder nuestro derecho a elegir ¿y si nos envían a un lugar al que no queremos ir o si tenemos que ir a algún lugar y ellos no nos dejan? No somos perfectos pero aún están seguros con nosotros.

— tú sabes que eso ya no es cierto. — dije. — no están seguros con nosotros... dices que nuestro propósito es proteger a las personas, ¿por qué no querrías ir a un lugar para proteger a esas personas? Sólo te contradices, Steve.

— no me refería a eso.

— y además...— intervino Tony. — si decimos que no ahora, nos obligarán a hacerlo después, eso es un hecho y se pondrá feo.

— dices que vendrán por mí. — dijo Wanda.

— podemos protegerte.

— tal vez Tony tenga razón, si... tenemos una mano en el volante aún podemos guiar... si la retiramos...— opinó Nat.

— ¿qué no eres la mujer que le dijo al gobierno que le besara el trasero hace unos años?

— sólo... exploro el terreno, cometimos errores demasiado públicos, hay que recuperar su confianza.

— oye... espera, ¿escuché mal o estás de acuerdo conmigo?

— ay... me quiero retractar. — sonreí.

— no, nada de retractarse, gracias, sin precedentes, okay... caso cerrado, gané. — dijo y Steve me miró después de revisar su celular.

— tenemos que irnos. — me dijo Steve.

— ¿por qué?

— revisa tu celular. — lo revisé, había un mensaje reenviado diciendo "ella se fue mientras dormía".

— los vemos después. — dije levantándome, evitando llorar en frente de ellos y salí junto a Steve y el bebé.

Se detuvo en la escaleras y comenzó a sollozar, me acerqué a él y lo abracé.

— le pediré a Wanda que cuide a Joey, no creo que sea apropiado llevarlo a un funeral. — dije. — antes de venir a la junta con el secretario de Estado... estaba con ella.- me miró con los ojos llorosos. — se veía bien, no creí que una hora después de verla se fuera.

— alcanzaste a despedirte de ella. — asentí. — amor, con lo de los acuerdos...

— dejemos de lado eso, por favor. — asintió y me dio a Joey. — no tardo. — lo besé y subí de nuevo.

— ¿pasó algo? — preguntaron y asentí.

— Steve y yo tenemos que irnos pero no podemos llevar a Joey, ¿podrían cuidarlo?

— yo lo cuido. — me dijo Nat.

— gracias, hay ropa y pañales en mi habitación. — dije dandoselo y me sequé las lágrimas que se me escaparon. — te amo, Joey, los veo luego. — volví con Steve y salimos del complejo.

El funeral de Peggy será en Londres, así que tendremos que viajar hasta allá.

La hija de Loki [Steve Rogers/Capitán América]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora