Hasta que tú nos separes |Superfamily, Omegaverse|

XXXI

Un año después.

- ¡Peter!, ¿has visto el biberón de Johnny?- Pregunte mientras rebuscaba en los estantes, ¿acaso ahora los objetos tienen pies?

- ¡Aquí esta!- Dijo Peter con el objeto en sus manos.- Estaba bajo la cuna de Johnny.

- Muchas gracias, bebé.- Estaba por darme la vuelta, pero escuche de cierto infante un gruñido, podía decir que era algo enojado y con un toque de berrinche. Mire a Johnny, mi bebé celoso, quien estaba haciendo un leve puchero.- No, Johnny, Mami también te ama, eres mi bebé rubio y celoso.- Dije calmado para aminorar su enfado. La verdad me hacía mucha gracia estos momento.

Termine de preparar la leche y una vez que estuvo todo en buen estado, se la dí a Johnny. Él la tomo y lo acosté a lo largo del sillón, le puse el programa de Bob Esponja y le acomode los sillones. Por otro lado, Peter preparaba su mochila para ir al colegio.

- Peter, Happy te está esperando en la puerta.- Antes de que se saliera, le di un bolsito que contenía su almuerzo y una colación, hoy el se tendría que quedar un poco más tarde para los ensayos de su obra. en la tarde no tendría que preocuparme de ir a por él ya que como es día Viernes, Steve era quien ira a buscarlo.

Bueno, me senté junto a Johnny, en mis manos tenia una taza de té y un queque hecho la noche anterior. De vez en cuando le daba de comer los lados suaves, y él sonreía satisfecho. Aunque Johnny tenia un año de edad, este solo se mantenía parado unos cuantos minutos, para después caer sentado hacia atrás.

Estamos practicando en eso.

Sus dientes salían de apoco, aun que ahora mismo tenia las paletas. Era adorable en cierto sentido.

Su cabello ya comenzó a pronunciarse, aunque pensé que este cambiaría a uno castaño, como el mio o el de Peter, Johnny lo tenia de un rubio oscuro, sus ojos eran de azul muy claro. Por otro lado, él ha presentado un gusto bastante peculiar a la música, y no hablo de la que es actualmente, si no mas bien de esas clásicas.

Mozart era un uno de ellos.

En cambio, él no ha querido decir mucho, apenas hace algunos sonidos, ya sea el balbuceo, gruñidos, pequeños gritos de alegría o emoción, y, claro, esos sonidos de un notable enfado. Siendo que es su primer año, debería de ya decir "Papá", o "Mamá". Pero hay momentos en las que te hace conversa a través de raros sonidos. Puede estar unos cuantos minutos "hablando", para después quedar en silencio de un momento a otro.

Y, bueno, a eso se suma que es realmente celoso en cuanto a cariño.

Todo un Stark.

💔

Am, si. En las relaciones siempre hay problemas.

Obviamente no todo puede ser de un color rojo bonito, no, en ellos pueden haber desacuerdos, problemas, celos, desconfianza, y muchas cosas mas que, sinceramente, no tengo ganas de decir.

Bueno, prácticamente solo han sido un intercambio de palabras, pero aun así no deja de ser una pelea.

Todo esto comenzó en la mañana de día Sábado. Yo me levante como comúnmente lo hacía para preparar el desayuno, Stephen aún dormía en la habitación que se le asigno ya que no se sentía con la confianza de dormir conmigo. Más era por respeto a los menores.

Pase a la cocina, pero me encontré la sorpresa de que el Alfa se encontraba ahí. Sus manos aun no estaba del todo curadas, mantenía ese leve temblor al tomar las cosas, por lo que rara vez lo dejaba entrar a la cocina o que simplemente cargara muchas cosas a la vez.

- Ey, ¡¿que estas haciendo?!

- ¿El desayuno?- Dijo con obviedad.

- Sabes que no debes hacer esfuerzo. El doctor te lo dejo muy en claro después de la caída que tuviste hace unos meses.- Intente de apartarlo, pero el muy terco no hizo caso.

- Vamos, Tony, ¿es que acaso me romperé la mano si me preparo unos huevos?, he estado bien por mas de un año, y sabes que siento inútil sin ayudarte a hacer las cosas.

- Sabes que lo hago porque quiero protegerte.- Dije al punto de estar casi gritando.- No quiero que te dañes.

- No necesito que me protegías, se cuidarme solo.- Dijo con el ceño fruncido.- No soy un bebé.

- Pues te estas comportando como uno, ¡¿por que no dejas que yo te ayude?!

- ¡Porque simplemente no lo necesito!, ¿acaso no confías en mi?- Quería replicar, pero el llanto de Johnny se escucho desde el segundo piso.- Mejor ve con él, que a diferencia de mi, apenas y puede tomar un simple  juguete.- A regañadientes fui con mi bebé.

¿Acaso esto fue muy dramático?