Hasta que tú nos separes |Superfamily, Omegaverse|

XXXIV

Los años pasaban muy rápido, Peter ya había terminado su carrera Universitaria y ahora estaba ejerciendo su conocimiento a la par que intentaba de sacar un doctorado. Me encontraba muy orgulloso de lo que había logrado, el mundo de la ciencia y tecnología era completamente para él. Y más si tenía un cerebro como el mío. Por otro lado Johnny tenía quince años él, a diferencia de Peter, había dado como resultado un Alfa, y aunque ellos se mostraban más expresivos y dominante, Johnny no se mostró así.

Él siempre buscaba estar lo más acercado a mi, parecía depender mucho de mi presencia, es cierto que para ciertas cosas era un alocado, pero muy raras veces me hacía enfadar.

Con el pasar del tiempo, el cuerpo de Johnny había cambiado, comenzaba a cambiar su musculatura, el sonido de su voz y su infantil rostro paso a ser el de un adolescente Alfa.

Sus gustos no presentaron mayor inconveniente, aún seguía teniendo un amor peculiar por la música clásica, tanto así que ya sabe tocar la guitarra clásica, el violín, el bajo, piano, saxofón y arpa. También contemplo un gusto por lo más moderno, a lo que le llevo a aprender a tocar la guitarra eléctrica, batería y violín eléctrico (que últimamente es el que más le impresiona).

- Ma, ¿has visto mi uñeta?, no la encuentro en el bolsillo de la funda.- Dijo algo acalorado, eso debía ser por el largo tiempo en que la llevaba buscando.

- Hum, ¿Buscaste en el estante?, en cajón del medio.- Dije con tranquilidad y espere unos segundos, recibí un grito de afirmación.

Unos minutos después escuchó sus pasos por la escalera.

- Mamá, me iré a ensayar a la escuela, ¿está bien si llego a las seis de la tarde?- Menciono con entusiasmo, en unos cuantos días tenía tenía una presentación como guitarrista y canto. Seria la primera oficialmente por lo que se entusiasmaba con ensayar y que todo le salga bien.

Aunque aún no sabía la verdadera razón del por qué me llamaba así. Peter nunca lo hizo y se que con Johnny la experiencia de Padre había cambiado, pero aún así era extraño.

- Esta bien, solo no olvides que hoy viene a cenar Peter y su repugnante novio.

- Si, pero ya deberías de comenzar a aceptarlo...escuche por ahí que Wade le pedirá matrimonio.

- ¡¿Que?!- Y antes de seguir reprochando, Johnny había salido por la puerta dejándome con las palabras en la boca.

Dioses santos, estos niños me dejaran con canas verdes.

☘️

Siendo las siete de la tarde la cena ya estaba preparada. Johnny había llegado a la hora acorde y me ayudo a dejar la mesa ordenada. Con algo de ayuda de Youtube, en esta ocasión había preparado una tarta de manzana, té suave y algo de galletas, hechas especialmente para mi bebé mayor.

- ¿A que hora dijo que iba a llegar?- Pregunto algo aburrido mientras miraba algún canal educativo.

- Dijo temprano, pero a este paso nosotros cenaríamos en la cama.

- ¿Y Papá?

- Creo que aún sigue en su evento. No tardará en venir.- Dije con calma.

Los minutos pasaban con lentitud hasta escuchar la puerta abrirse, gire mi cuello para ver quién era. Era Stephen.

- Hola, bienvenido.- Me acerqué a saludarlo, me pare en puntas y alcance los suaves labios del Alfa.- ¿Como estuvo el evento?

- Nada fuera de lo normal, recibí muchas ofertas de otras Clínicas, pero sinceramente dudo que me cambie de establecimiento, también fui nominado al premio del mejor neurocirujano.- Soltó con simpleza.

- Oh, Dioses. ¿Dime que estas bromeando?- El negó con una sonrisa en la cara. No paso mucho para lanzarme a sus brazos.- ¡No lo puedo creer! Te mereces el premio, por supuesto que si.

- El evento es el próximo mes, en Los Ángeles. Cae en la semana de las vacaciones de Johnny, y podíamos aprovechar esos días extras como una luna de miel adelantado.- Lo ultimo lo susurro coqueta mente en mi oído mientras tomaba firmemente mis caderas.

Para quien no sabe, Stephen me había pedido matrimonio hace unos cuantos meses, teníamos visto el día de nuestra celebración para la primera semana de Diciembre. Obviamente no sería algo muy excesivo, pero si queríamos algo simbólico.

- ¿Peter aun no llega?

- No, le marcare para saber donde viene y de paso le limpiare su antigua pieza, no quiero que salga de casa muy tarde, Wade puede ser una bestia manejando de noche.

- Es Wade, cariño. No se le puede confiar cuando bebe unos cuantos tragos. 

- Aun no creo que Peter sea pareja de ese asalta cunas.- Murmure con enojo. Ahora solo restaba esperar y aguardar que las manos de ese depravado estén alejadas del virgen trasero de mi bebé mayor.