MARIONETAS DEL DESTINO

Capítulo 35

Alexa se fue furiosa. Se monto en la moto y se fue, se pasó dos semáforos en rojo, llego a la cafetería echando chispas.

—Madre, Yo no quiero que Alejandro vuelva a esta casa. Dijo Alexa llorando. Cogió el casco y lo tiro contra el suelo. Cogió a patadas una de las sillas.

—Hija cálmate, él es el papa de mi nieto. No podemos hacer nada, yo no voy a dejar un hijo sin padre, te pido que por favor no te metas. Todos quieren acabar con ese matrimonio.

—¡Mierda! Mi hermana es una tonta. Madre Alejo está traicionando a mi hermana. Dijo Alexa levantando las manos, se tomo la cabeza con las manos.

—Estas seguras. Roberto no estará detrás de todo esto. Me dejo de llamar Azucena si no es así. Lo dijo tomando a Alexa por las manos — Hija cálmate te va a dar un ataque. Cálmate por Dios. Virgencita de Guadalupe calma esta niña.

—Madre, ni las once mil vírgenes pueden calmar mi ira si ese idiota esta traicionando a mi hermana, yo lo mato... lo mato.

Alexa se le fue bajando el enojo. Tenia el orgullo herido. Las redes sociales anunciaban que Bruno Santo coloma aparecía en varias fotos con la prestigiosa modelo Verónica del Rio. Alexa no tardo en que sus enemigas le mandaran las fotos a su Whatsapp de la nueva conquista de Bruno.

Alexa se sentía contrariada, sentía que estaban invadiendo su terreno, la relación que tenia con bruno era demasiado informal para reclamarle.

—Mierda Bruno, no se porque me dueles tanto. Tu no eres nadie, no me importas. Vete al infierno, púdrete allí. Lo dijo eliminándolo de su celular.

Se acostó en la cama, reviso los mensajes. Dentro al Facebook de bruno. Su estado decía comprometido. Decidido bloquearlo. A los dos minutos ya estaba arrepentida, creo un perfil falso, se quedo asombrada, bruno no acepto su amistad.

—Mierda, no es tan mujeriego como pensé. Decidido seguirlo con su perfil falso.

En la pastelería Ingrid tenía unos clientes que le agradaban coquetear con ella. Había dos ingenieros que le gustaban pasar el tiempo allí. Alexa los observo y decidido entablar una conversación con ellos.

—Como les ha ido.

—Bien, tú eres la administradora de este local.

—Si. algo así, y la chica que tiene un bebe es tu hermana.

—Si Ingrid sonrió se habían tomado el trabajo de investigar.

—Muy bonita tu hermana. A mi amigo le pareces encantadora tu.

—Que bien y tu amigo no habla español.

—Claro que hablo español. Mucho gusto Carlos.

—Mucho gusto mi nombre es Eduardo

—Que bueno conocerlo mi nombre es Alexa y mi hermana se llama Ingrid. Él bebe Alejandro.

—Nosotros somos nuevos en esta ciudad, necesitamos una guía para que nos enseñe la ciudad.

—Bien, yo podría ayudarles.

—Y tu hermana, será que no se anima a salir con nosotros.

—Claro que se anima. Que les parece si salimos este fin de semana. Regálenme sus números de celular. Y nos ponemos de acuerdo.

Alexa comprometido a Ingrid. Lo difícil fue convencerla de salir con ellos.

—Ingrid solo vamos a salir con ellos, el parche en moto es muy chévere.

—Alejandro se da cuenta y me mata.

—Cual Alejandro, ese que te pone los cuernos con su asistente Pamela. Bravo hermanita lo dijo aplaudiendo. —Eres muy generosa te gusta compartir. Dio dos vueltas y aplaudiendo canto "Compartir, compartir con alegría, porque el mundo se olvidó de compartir".

—Alexa deja de molestar. Bien esta bien si eso te hace feliz vamos con ellos, pero solo a comer una hamburguesa, ya se me olvido a que sabe una hamburguesa.

Alexa se puso de acuerdo con los dos amigos. Alexa se fue en la moto de Luis con Carlos. Y Eduardo llevo a Ingrid en la moto suya de parrillera. Dieron varias vueltas por la ciudad. Se detuvieron a comer hamburguesa.

—A mi me encanta el parche en moto dijo Alexa.

—A mi me encanta es comer hamburguesa dijo Ingrid.

—Bien qué bueno que estén tan contentas. Que tal si vamos a un barcito a tomarnos unos tragos.

—Encantada dijo Alexa.

—No. yo creo que no los puedo acompañar. Dijo Alexa.

—Vamos solo un par de cervezas Ingrid no seas aguafiestas.

Ingrid veía a Alexa contenta decidido acompañarla. Ella hacia rato no salía. Pensó que era buena idea.

Enci Silva.