HILO ROJO 《FARGEXBY》

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• Alex •

Cuenta la leyenda que hay un hilo rojo que tenemos todos, que aunque no podemos ver nos conecta a otro ser. Hagas lo que hagas el destino ya está escrito en oro, por lo que aunque más intentes separarte o evitarlo, el destino decidió que esta persona será tu Alma gemela y de alguna u otra forma, siempre llegarás a ella.

Yo sigo esperando mi compañero de vida, por un momento creí haberlo conocido, era staxx, pero el destino me jugó una mala pasada, ya que el se fue a otro lugar y casi se olvido de mi.

Aunque me a dolido, eh podido superarlo, principalmente por fargan, el estuvo apoyándome desde el minuto cero y ah sabido soportarme y hacerme feliz en cuestión de minutos.

Ahora somos mejores amigos, tanto que tenemos el mismo empleo, ambos somos los policías del pueblo, aunque mi cargo es superior al de el, siempre nos la pasamos bobeando y resolviendo  casos juntos.

Ahora estoy yendo a la comisaría, es bastante temprano por lo que no creo verlo, es bastante dormilón y perezoso. Al llegar saludé a la recepcionista - buenos días Claudia - saludé a mi compañera quien rápidamente me devolvió el saludo. Subi a mi oficina y empecé a revisar las denuncias y casos que había.

Todo lo normal, como siempre, denuncias de vegetta por su puerta, algunas hacia willy culpandolo de minas, pero, esta era nueva, era de luzu, un secuestro hacia su mascota, este dijo que fue la hermandad, aun no sabemos quiénes son, ni cuántos, pero sería un buen caso para por fin atrapar a esas ratas.

A los pocos minutos se escuchó la puerta abrirse como si nada - por favor, si entras a mi oficina toca la puerta - dije algo molesto aún con la vista en los papeles, la verdad es que me jode bastante el que no respeten mi privacidad, y tampoco soy de esos que se quedan callados.

- joder, así tratas a tus compañeros - era fargan, lo note al instante cuando se escuchó su risa, sonreí al verle, me agradaba tanto estar con el, incluso más de lo normal diría yo.

- fargan ¿cómo estás? - salude mientras me levantaba de mi asiento para darle un abrazo - hay un buen caso que podríamos hacer juntos, es de la hermandad oscura - dije separandome para poder agarrar los papeles del caso y entregárselos, el los tomó y empezó a leerlos detenidamente.

- que sucia ratas - susurró, yo reí al escuchar su comentario - lo haremos juntos, tal vez por fin los atrapemos - dijo yendo hacia la cafetera para hacerse un café, yo me senté sin mirarle y para cuando se sentó conmigo tenia dos cafés en sus manos.

- claro que los atraparemos - afirmé completamente seguro de nosotros mismos - igual eh de admitir que son bastante ágiles en lo que hacen, incluso los mejores en esto de lo ilegal, es decir, son los mayores criminales del pueblo - dije dándole un sorbo a mi café.

Fargan me miró como si estuviese ¿complacido? Con lo que decía, no lo sé, solo mostraba su mirada de orgullo - si, esos son bastantes buenos, pero nosotros mejores, confío en ti alesby - dijo con una sonrisa tierna, como le gustaba hacerme sonrojar, el sabe que soy gay y que me pone muy nervioso que me halaguen. Aunque el es hetero, además de que tiene una novia, eh de decir que no me cae para nada bien, a tratado mal a fargan en varias ocasiones, además de que es bastante posesiva con el y no le gusta la buena relación que tenemos.

- ¿y qué tal todo con dulce? Tal vez sea tu hilo rojo - dije levantando una ceja y con una sonrisa, aunque el no sonrió, parecía más bien confuso o tal vez indeciso.