14

495 70 51
                                    

FARGAN

Alesby cerró la puerta con llave, es decir, hoy duermo en el sofá, pero hay un problema, la rata de Frank aún no se va y tengo clarísimo que conmigo no va a dormir.

- puedes dormir en el piso - dije frío mientras me recostaba en el sofá, no pensaba dormir, al menos no ahora, no puedo sabiendo que alesby se siente mal por mi culpa.

- ¿en serio vas a dejar a alesby solo? Y después dices quererle - se quejó y caminó hacia la habitación para dar unos pocos golpes mientras le llamaba - vete a la mierda - se escuchó desde dentro de la habitación, me reí ya que sabía perfectamente que eso pasaría.

- si le conocieras lo suficiente sabrías cuando hay que hablarle y cuando dejarle solo - ahora quien es el superior aquí - y después dices quererle - repeti la misma frase que había usado conmigo, nunca antes habia disfrutado tanto decir algo. Me miró con odio pero no emitió ninguna palabra.

Me acosté en el sofá y comencé a esperar, dejando pasar la noche. Frank se durmió en un sillón que había por ahí. Como dije antes, le conozco lo suficientemente bien, por eso se que ahora mismo estaría pensando en la habitación, desvelandose en la madrugada. También sabia que luego de un par de horas sería lo ideal para entrar y poder hablar con el. Estaría mas calmado, además de que podríamos estar un rato solos, sin staxx molestando.

Pasaron las horas y decidí levantarme, me acerqué a la puerta y di pequeños golpes, no muy fuertes porque no quería despertar a nadie. A los pocos segundos Alex me abrió. Este me vio sorprendido, supongo que no esperaba que yo estuviera despierto con el.

- sabia que estarías despierto - dije con una gran sonrisa - vengo a disculparme si es que aún hay tiempo, además quería estar contigo - me sonrió por lo bajo y se corrió a un costado dándome el paso dentro de la habitación - ¿cómo sabias que estaría despierto? - me pregunto sin borrar la sonrisa aunque me miraba algo confuso.

- vamos a ver alesby, que te conozco a ti y a tu insomnio - ambos reimos por lo bajo y de pronto sentí el tacto de Alex en mi, se me había lanzado para abrazarme, sin decir nada, solo sonriendo mientras disfrutábamos de ese pequeño momento. Nos separamos y nos sentamos en el borde de la cama y continuamos hablando un largo rato, tanto que no nos habíamos dado cuenta de que el sol había salido.

- ostia, qué es de día, tenemos que ir al trabajo - me levanté rápidamente haciendo que me marease por unos pocos segundos. Agarre mi chaqueta cuando Alex me agarro del brazo - oye ¿que te parece si faltamos? Que no hemos dormido nada - le sonreí, aunque deseaba poder dormir con el no podía - alesby, somos de los mejores policías, sabes que los dos juntos no podemos faltar - me miro con su típica cara de bebé para tratar de convencerme, y a pesar del intento me resistí lo suficiente como para no caer ante su dulzura.

Este se hecho en la cama frustrado dando un gran resopló. Al levantarse se le veía realmente cansado como para ir al trabajo - oye, los dos no podemos faltar, así que quédate tú que yo iré, yo te reemplazo - me miró con una gran sonrisa, si es que eres hermoso nene - ¿qué hice para merecer? - me abrazo y espero a que terminara de cambiarme para acompañarme a la puerta.

- ser tu - le di un beso en la mejilla y me fui a trabajar sin dejarle decir nada. Tampoco esperaba respuesta, de mi parte tiene más que claro que le quiero y me importa muchísimo.

•ALEXBY•

"Ser tu" no puedo quitarme eso de la cabeza, tampoco quiero. Me quedé unos pocos segundos en la puerta sin moverme, con la mano tocando suavemente la mejilla que me había besado. Realmente sigo sin poder creer como pude llegar a tenerle, hasta pienso en como es que no le había conocido antes.

HILO ROJO  《FARGEXBY》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora