Capítulo 15: Siempre.

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¿Un beso? ¿Qué de especial podía tener?

Llevaba preguntándome lo mismo una y otra vez, sin darme cuenta porque me había importado tanto lo que estuvo a punto de pasar. Quizá fuera por el hecho de tratarse de un beso... O quizás fuera solo porque se trataba de Jack.

¿Qué importaba ya? No podía hacer nada para cambiarlo.

Me encontraba una vez mas acostada en el sillón de la habitación de Finn, con mis pensamientos dando vueltas al rededor de mi sin dejarme concentrar en nada mas. Había cosas mucho más importantes por las que preocuparse, como por ejemplo, la escuela.

Todo lo que estaba pasando solo lograba distraerme mucho mas de lo habitual, y había comenzado a bajar en calificaciones.

Parecía que habían pasado años desde la última vez que había hablado con Emily, y aunque antes normalmente todos los días estaba de humor para estar con ella, ahora nunca lo estaba. No estaba de humor para mas drama en mi vida. Con el mío era mas que suficiente.

Me levante del sillón y mire por encima de mi hombro. Finn yacía dormido sobre su cama, con el cabello alborotado y la boca ligeramente abierta.

Sonreí pensando en lo mucho que lo extrañaría cuando se fuera, y decidí dejarle una nota dejándole saber que había ido a casa.

Salí del cuarto sin hacer mucho ruido y baje las escaleras para después salir de la casa agradeciendo no haberme topado con Jack. Sin duda necesitaría tiempo hasta poder hablar con el de nuevo sin mirar sus labios fijamente.

**

En el colegio, no había visto a Chris en ninguna clase ni en los recesos, pero a Jack si. Supongo que se siente tan incómodo como yo, ya que a pesar de haber cruzado miradas un par de veces, ninguno de los dos sonrió ni hizo el intento de hablar con el otro.

-¡Señorita desaparecida! Parece una eternidad desde la última vez que hablamos, ¿verdad? ¿Qué ha sido de ti?

Miré a Emily e intenté sonreír, pensando en si debía contarle sobre Jack o no.

-He... estado ocupada con el colegio y todo eso. -Mentira número uno.- Y perdón por no haberte llamado pero mi celular se descompuso. -Mentira número dos.- Ya sabes... se me cayó mientras patinaba. Apenas lo han arreglado.

No podía evitar sentirme mal por Emily, simplemente... había veces en las que necesitaba mi espacio. Como ahora.

-Entiendo... ¿Te apetece un café? Tengo mucho de que hablar contigo.

-Ah.. Te llamaré para confirmarte, ¿está bien? No se que planes tenga ese fin. Pero si, me encantaría.

Probablemente Emily notó mi actitud, ya que se limitó a sonreír y asentir para después desaparecer en el pasillo.

**

El vibrador del móvil me despertó. Llevaba unos ¿20 minutos? dormida en clase de historia.

Me levanté de mi silla y salí al pasillo para contestar la llamada de un número desconocido.

-¿Diga?

-Al, soy yo.

¿Jack? ¿Finn? ¿Qué les costaba decir su nombre? ¡Sus voces eran idénticas!

-¿Finn?

-Esperaba que reconocieras mi voz, Al. Soy Jack.

Tragué saliva. ¿Por qué diablos me hablaba? ¿Y de un número desconocido?

-¿Todo bien, Jack? -fue lo único que atiné a decir.

Una risa inconfundible estalló al otro lado de la línea. Enseguida me di cuenta de lo que estaba sucediendo.

-Te creía un poco mas lista, Allison. ¿Qué es lo que te pasa? ¿Extrañas la dulce voz de mi hermano?

-Directo a lo que llamaste, Finnegan. No estoy de humor.

-Bueno, bueno. -no siguió hasta después de haber terminado de reírse.- No seas tan amargada, era solo una broma. ¿Te esperamos hoy para la comida?

-Esperamos me suena a manada.

-Tranquila enamorada, Jack no estará presente.

Tragué saliva y no contesté.

-No necesito verte para saber que pusiste tus ojos en blanco, Allison. Ya sabes que detesto que hagas eso. ¿Vienes o no?

-No puedo, te busco hasta después, ¿ok? No te metas en problemas hasta entonces, Finn.

-Yo nunca me meto en problemas. Y no te preocupes, no tienes que pedirlo, yo mismo le aviso a mi hermano que le mandas un beso. Hasta al rato, Al.

**

¿Qué le pasaba a mi patineta? Al parecer una llanta estaba atascada y tendría que regresar a casa caminando. Perfecto.

Comenzaba mi trayecto a casa cuando alguien me tomó por los hombros. Me giré y me encontré con una mirada amenazante de parte de Chris.

-Tu mejor amigo ya te dio su versión de la historia, ¿verdad? Déjame decirte que nada de lo que te haya dicho es cierto.

Me limité a mirarlo. ¿Qué esperaba que hiciera?

Sonrió irónicamente y se acercó más a mi hasta quedar a unos centímetros de mi cara. Estaba tan cerca que podía sentir su respiración. Me examinó el rostro en busca de... ¿Miedo? Y al no encontrarlo me miró a los ojos fijamente una vez más.

Tomó mi barbilla con una de sus manos y miró mis labios antes de continuar hablando.

-Lo que quizás no te contaron y deberías saber, Allison, es que yo siempre me quedo con lo que quiero. Siempre.

No podía moverme. En algún momento me había sujetado un brazo con su mano libre, y de cierta forma me había inmovilizado. Además, claro, me sentía intimidada por su cercanía y su forma susurrante de hablar.

-Siempre, Allison.

Justo después levantó mi barbilla moviendo todo mi rostro hacia él e hizo el espacio entre nosotros inexistente al momento de besarme.

Me tomó demasiado por sorpresa y aunque en un principio me quedé inmóvil, un instante después forcejeaba para que me liberara.

Chris sonrió y se separó de mi lo suficiente como para poder hablar. Se mordió el labio casi imperceptiblemente.

-Hazme un favor y recuérdaselos al par de gemelos, ¿si? Me ahorrarías una tarea bastante desagradable.

Finalmente me soltó y caminó unos pasos hacia atrás, todavía mirándome fijamente.

-Nos veremos pronto, Allison. Eso te lo puedo asegurar. Oh, y perdón por lo de tu patineta. Seguro Jack puede ayudarte con ella, ¿no?

**

¡Chicas!
Feliz año nuevo (:
Espero que se la hayan pasado muy bien en estas fiestas, y no quiero desaprovechar la oportunidad para decirles GRACIAS por todo su apoyo.
No tienen una idea de cuanto significa cada voto, cada comentario. Ustedes sin darse cuenta me sacan sonrisas a diario.
Espero que les haya gustado este capítulo (aunque un poco corto), lo escribí con mucho cariño para ustedes.

Les mando un beso enorme, ¡las amo chicas!
P.D: les dejo a Chris Collins en multimedia.

Los hermanos Harries.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora