𝟬𝟬𝟭 ┊ LYNN ANDERSON ଓᝰ✰︎
𝗠arauders 𝗘ra 💀
En el momento en el que Lynn Anderson se entera que es una bruja, sabe que todo cambiará por completo. Nueva vida, amigos y cosas por aprender. Añadiendo que hay un mago tenebroso ace...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En un par de países se solía festejar la edad de dieciséis años con una gran fiesta, según le había contado su mamá a Lynn, cosa que la dejaba siempre muy asombrada.
Esta vez la rubia también tendría una fiesta, y aunque no sea necesariamente para ella, era una, le alegraba.
Al bajar al Gran Comedor se pudo percatar que ya había mucha gente, y no supo si había demorado mucho bajando o todos curiosamente se habían levantado más temprano de lo usual. En la mesa de Ravenclaw se veía todo muy tranquilo, o mejor dicho, en todas.
Lynn y Dora se acercaron a la mesa, tomando asiento en la esquina más cercana a los profesores como solían hacer desde que ella ya no se sentaba con Samuel. No veía a sus amigas ahí, ni a los merodeadores, cosa que le pareció muy, demasiado, extraña.
Intentó olvidar eso y se dispuso a comer. Platicaba con Dora acerca de cómo quería su vestido para la boda, que seguro era color aqua, y también hablaban sobre a quiénes invitaría a la fiesta. No era muy difícil:
Dora, Mary, Dorcas, Teresa, Amaya, Remus, Sirius, Peter, James y Xenopilius.
—¿Crees que debería invitar a Lily? —le preguntó a su amiga, ella se encogió de hombros.
La pelirroja era amiga de ellas, pero debido a que pasaba mayor tiempo con Snape, ella no le hablaba mucho. Aún le guardaba rencor al Slytherin. Además tenía que decirles que no debían hacer comentarios acerca de dónde estudiaban (cosa que seguramente sería difícil para Snape al siempre tener cara de odiar a todo el mundo), ya que la mayoría de los invitados serían muggles: familia de William, y amigos y amigas del hospital en donde trabajaban ambos. Los únicos mágicos eran la familia de su papá, Lynn y sus amigos.
Mientras seguían conversando acerca de eso, algo la hizo salir de su trance. Empezaron a aparecer fuegos artificiales en el techo falso del Gran Comedor. Dora se empezó a reír al ver el espectáculo.
«¡Feliz cumpleaños, Lynn!», decían los fuegos artificiales. La rubia empezó a reír al igual que su amiga, parecía una idea de los merodeadores, no había duda. «¡De tus mejores amigos del alma, los merodeadores!»
