𝟬𝟬𝟭 ┊ LYNN ANDERSON ଓᝰ✰︎
𝗠arauders 𝗘ra 💀
En el momento en el que Lynn Anderson se entera que es una bruja, sabe que todo cambiará por completo. Nueva vida, amigos y cosas por aprender. Añadiendo que hay un mago tenebroso ace...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lynn se miró por última vez al espejo, y no podía negar que se miraba hermosa. Hoy es el día, pensó sonriendose a si misma. Su mamá al fin se casaría con William, y Thomas por fin pasaría a ser su hermano; le emocionaba, ya que tendrá una familia de nuevo. Aunque nada se compara con su papá.
Lynn había tenido que enterarse, después de ocho largos años, la verdadera razón por la cual había muerto su padre. Estuvo deprimida un par de semanas, e incluso fue incapaz de contarle a su mamá porque no quería arruinarle su boda, después habría tiempo de eso. Había conseguido gracias a los papás de Kylie que el evento contará con algunos aurores para la seguridad de las brujas y magos ahí presentes, y más porque la situación con Lord Voldemort era de cuidado, por lo tanto, había sido invitada una limitada cantidad de personas: la familia de William, la familia Anderson, pocos amigos de ellos y los de Lynn.
La rubia había quedado enamorada de su vestido y de como se le veía puesto. Agradecía que el maquillaje y peinado iban a ir por cuenta de Dorcas, que se había ofrecido en hacerlo a cambio de doble ración de comida. Dora y Mary también llegarían temprano, más que nada para poner guapa a Lynn, según ellas. No sé dio cuenta en qué momento había llegado Thomas y se había colocado en el marco de la puerta hasta que lo vio por el reflejo al hablar.
—Se que la natural te miras guapa, pero aún así deberías maquillarte un poquito —se rió y sonrió de lado. Lynn puso los ojos en blanco y le lanzó un cojín que tenía cerca, el por suerte lo esquivó.
—Que chistosito —chasqueó la lengua y se sentó en su cama, mirándolo—, ¿entonces si me miro guapa?
—¡Por supuesto! ¿Y yo? —se señaló. La rubia la miró: no iba admitir que se veía bien, tenía que guardar su papel de hermanastra.
—Pues... te he visto mejor —se limitó a contestar encogiéndose de hombros, mientras el chico se reía.
—Se que me veo irresistible, ¿a qué hora llega Dorcas?
El cambio de tema tan repentino le causó gracia a la rubia, por lo que rió.
—No debe de tardar, ¡y más te vale que no estés aquí! Me va a maquillar.
—Seguramente ella se verá hermosa —imaginó Thomas suspirando como enamorado.
De pronto se escucho como tocaron la puerta, por lo que Thomas bajó corriendo sin esperar a la rubia, qué rodó los ojos ante la acción de él. Al seguir su acción, se encontró a sus tres mejores amigas en la sala platicando con su casi hermanastro.
