Claire

82 9 0
                                    

Henry me dio las llaves de su carro el se llevaría con el que vino Tom, y mañana recuperariamos el nuestro.
Decidí manejar yo, necesitaba hacerlo.

He olvidado cuando fue la última vez que maneje mi motocicleta, extraño la adrenalina que se sentía en ella.

—Claire, preciosa, ¿estas bien? Te veo muy pensativa—oírlo pronunciar mi nombre es un lujo para mi, me encanta cuando me llama por el.

—estoy bien cariño, solo que pienso en que ofreci vivir a Henry con nosotros sin consultarte lo—el se ríe.

—querida, es tu casa tu mandas allí, así que no te sientas culpable por ser una buena novia y una buena amiga, crees que no me he fijado que tanto Volkov y Henry te han tomado mucho aprecio— y era cierto.

Ambos se habían Unido más a mi, se podría decir  Que yo fui esa que los "salvó" del abismo.

—hablando de Volkov, ¿recuerdas la pijamada? —el asiente— me reveló que esta enamorado de un chico me muero por conocerle y no se talvez por "casualidad" Les ayude, ¿te imaginas un Comisario feliz?

—niña, niña tu nunca cambias de ser la Cupido, por eso te amo jajajaja, —yo le miro con cara de me vas a ayudar. —no, no TU eres la que eres Cupido no me metas en eso.

—pero amor, ya estas dentro. —el solo se lleva la mano  su cara tapando su bello rostro.

Estacionó el coche de Henry en la entrada del edificio y lo cierto.
Tom y yo subimos jugando, más bien yo, le doy golpecitos en los brazos y hago como que le voy a tirar.

El no hace nada hasta que llegamos ala entrada y yo abro.

—hasta aquí llegaste Claire— y antes de poder hacer algo me carga como un costal de papas y cierra la puerta.

Yo trato de forcejear, poquito, me encanta cuando se pone en ese plan.

El me deja caer en la cama.

—señorita Arriaga, con que le gusta golpear a su novio y tratar de tirarlo, ahora tendrá su castigo— el se posa arriba de mi para darme un beso apasionado.

Nos quedamos un rato así, los dos juntos y besando nos.
Lo único que necesitábamos era este momento, los dos juntos después de tanto tiempo, entregandonos el uno al otro, con todo el amor que tenemos.

(...)

Como todas las mañanas me despierta ese delicioso olor a café que tanto me gusta, me levanto de la cama colocándome una camisa de Tom.

— ¿ya te he dicho lo bien que luces con mi ropa? — lo dice de un modo picaron yo me acerco a el y le doy un beso en la mejilla.

—y yo ¿ya te dije lo mucho que te amo? — no tarda ni dos segundos cuando me carga al aire.

—te amo, te amo Claire, estoy esperando el día que podamos casarnos y seas mía para siempre, verte de blanco y venir hacia el altar— "ser mía para siempre"

Pero si ya soy suya, y el día que me propuso matrimonio eso quedó más que claro.

—bien, me voy a bañar en lo que tu tomas tu cafe, lo de ayer fue... Increíble, te amo— y besa mi cabeza.

Lo veo ir se ala habitación por algo de ropa y volver para meterse al baño.

Yo hago lo que me pidió y me bebo mi café con galletas.
Unas que tanto me gustan y el siempre las pide por mi.

Y como dijo el, lo de a noche fue increíble, hace mucho tiempo no estábamos juntos de verdad.

Pero de la nada suena mi teléfono, corro ala habitación, por el, lo tomó y veo quien es.

Por casualidad (Volkacio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora