Guerra Mortal ►Carl Grimes [2]

― O9. Ántrax.

『CAPITULO O9』

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↻ Á n t r a x
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|| Eva Ross ||

― Eva... ― un susurro me despierta, aún tengo los ojos cerrados, pero sé que se trata de Carl, una sonrisa se dibuja en mi rostro, llevamos cuatro meses después de la muerte de Avery, después del atentado contra Woodbury, Rick decidió traer a vivir con nosotros a las personas que quedaron sin hogar, Carl ha estado tranquilizándome por las pesadillas que comienzan a ser más constantes.

Hoy no las tuve porque Carl me ha despertado en la madrugada, cuando salgo de la celda, noto por las ventanas que el sol aun no comienza a salir.

― ¿A dónde vamos? ―le pregunto mientras él me sigue tomando de la muñeca.

― A la torre de guardia ― me dice cuando ya salimos del pabellón, el cielo sigue oscuro, el frío se intensifica un poco. Sé que comenzaremos el otoño en unos meses.

Cuando llegamos, Carl abre la puerta, pero un Glenn cubriéndose con un pantalón nos recibe, está despeinado, y rojo, parece agitado ― ¿qué? ― pregunta muy mal humorado.

― ¿Qué haces aquí? ― detrás del cuerpo de Glenn, puedo ver que Maggie también se está vistiendo, Glenn no contesta, solo hace una especie de gruñido, pone su mano en la cara de Carl y lo empuja fuera del marco de la puerta ― ¡oye! ― Glenn nos cerró la puerta en la cara, yo tengo el puño en mi boca tratando de no lanzar una carcajada ―vamos a otra ― me dice y me guía para una un poco más alejada de la entrada, yo me río en todo el camino hacia la torre y aún después de haber entrado ― están locos.

― Están enamorados ― le menciono aun tratando de no reírme.

― Mira... espero que te guste ― lo único que veo es la entrada del bosque, es bello, pero para mi gusto necesita menos toques de caminantes, caminan sin rumbo, la noche los hace parecer aún más aterrorizantes.

― Creo que preferiría no ver a los caminantes en lo absoluto.

― No ― él ríe, lo miro y sus ojos están cerrados, su risa parece un sonido tranquilo, aquí dentro ya no tengo miedo, aquí, a un lado de Carl, todo parece tener un mejor aspecto ― eso... ― él pone su mano en mi barbilla, guía mis ojos hacia más allá del bosque, al cielo, comienza a tomar tonos naranjados, incluso rosa y blanco.

― Es hermoso ― mi vista se deleita viendo el amanecer, estoy recargada en la barandilla de la torre, Carl a mi lado me transmite calidez, sé que también ve el sol salir, pero por unos instantes, puedo sentir su mano cerca de la mía, ninguno habla, es tan tranquilo estar aquí.

― Creo que necesitabas algo para olvidar lo de tu hermana por unos momentos... sé que Travis sigue muy afectado.

― No quiere hablar con nadie creo que se había hecho a la idea de que ya solo seríamos nosotros tres, que ya no perdería a ninguna de nosotras. Pero, ¿y tú?