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v e i n t i s é i s

—Yoongi se enamoró más rápido pero Hyosun se enamoró más fuerte. —Jessica dejó escapar un suspiro enamorado al vernos.

Sin separarme de los labios de mi novio le saqué el dedo corazón a Jessica.

—Míralos, son tan monos. —dijo Yeseul como una madre orgullosa. —¿Te acuerdas cuándo negaban que no tenían nada? Menudos mentirosos...

—Parece que fue hace años. —habló Geongmin ilusionada.

Me separé de Yoongi dejando escapar un suspiro de molestia. Apoyé la cabeza en la pared, contra la que Yoongi me tenía encerrada con su cuerpo.

—¿Os podéis ir a la mierda? —pedí mirándolas a las tres. Yoongi no perdía el tiempo y estaba dejando besos en mi mejilla y cuello mientras me abrazaba.

—Chica, no es nuestra culpa si estáis en medio del pasillo del instituto comiéndoos la boca. —dijo Jess. —Tenemos ojos y miramos el espectáculo que dais.

Yoongi dejó escapar una risa, que noté en mi cuello y me hizo cosquillas.

—Tienen razón, es nuestra culpa. —me dijo mirándome a los ojos. Las piernas me temblaron por su intensidad. —Pero no vamos a parar.

Agarró mi barbilla y giró mi cara para besarme de nuevo, bajo la mirada de las chicas. Introdujo su lengua en mi boca, haciendo que dejara de pensar en nuestro público y me centrara solo en el beso y en él.

—Parece que estáis con el celo. —la voz de Yeseul fue acompañada con una arcada fingida, que me hizo sonreír en medio del beso. Yoongi llevó sus manos a mi culo, yo llevé mis brazos a su cuello y lo abracé, atrayéndolo más a mí. —¿Cuánto hace que no folláis, por dios?

Pero no se trataba sólo de follar. Nunca fue así con él. Se trataba de más, de estar siempre a su lado para él y que él siempre estuviera al mío para mí. Se trataba de algo más que lo carnal o el sexo. Muchísimo más que eso.

Era amor.

—Desde ayer.

La voz de Hoseok se hizo presente en la conversación, lo que significaba que había llegado. Probablemente Nam también estuviera allí.

—¿Cómo sabes tú eso? —le preguntó Jessica.

—Porque Hyo subió ayer por la noche una foto a los storis y tenía una sonrisa muy brillante. Y los calzoncillos de Yoongi se veían en el filo de la cama.

Yoongi apretó más mi culo, diciéndome de esa forma que no me separase del beso ni dijera nada.

—No me había fijado. —comentó Jessica.

—Hola, chicos. ¿Qué tal?

La voz grave de Taehyung saludó enérgicamente. A Jimin y Jungkook también los escuché saludar.

—Que asco. —comentó Jungkook. Imaginaba que nos estarían señalando.

Y segundos después se escuchaban ruidos de besos que no provenían de nosotros. Abrí un ojo y por el rabillo vi que eran Geongmin y Jungkook.

—Será hipócrita. —bromeó Namjoon.

Me separé de Yoongi, cansada de escuchar a gente.

—Vamos a otro sitio. —pedí. Puse la mejor mirada de cachorro que tenía, haciendo que se derritiera. Que estuviera tan cerca de mí, mirándome a los ojos con esa carita tan tierna y bonita me hacía darme cuenta de lo afortunada que era al tenerlo en mi vida.

Yoongi asintió con una de sus tiernas sonrisas.

—De eso nada, guapa. —Taehyung agarró mi muñeca, separándome un poco de Yoongi. Ambos hicimos un puchero por la separación. —Tenemos clase ahora.