14.

631 36 4
                                    

El resto de los días habíamos pasado el tiempo juntos todo lo que podíamos, Hugo tenía reuniones con la discográfica para su próxima gira y ese tiempo a solas yo lo aprovechaba para componer.

El deseo que teníamos el uno por el otro lo tratábamos de apaciguar y era como si le echáramos más leña al fuego, nunca era suficiente de sus caricias, besos y gemidos en mi oído y el tiempo juntos se estaba terminando, mañana yo volvería a Barcelona y él a Córdoba.

Me preparé un café mientras el rubio estaba en la ducha, dentro de un rato saldríamos a cenar y queríamos aprovechar nuestra última noche juntos, nos habíamos pasado la mayor parte del tiempo dentro del apartamento que fuera de él, tratábamos de evitar exponernos para mantener lo que fuera que tuviéramos en algo privado.

Estos días me había sentido tan bien, Hugo tenía la virtud de poder alegrar el día a cualquiera, podía estar en el piso -1 pero él siempre me levantaría al 10. Agradecía por tenerlo en mi vida y aunque muchos dijeran que no me convenía por ser un niño inmaduro e influenciable a mí me parecía lo contrario...sí, no vamos a negar que a veces se deja llevar pero eso no lo hacía menos como para que yo no pudiera darle una oportunidad. Tenía los pies en la tierra más pegados que yo cuando se trataba de estrés y una dosis de realidad nunca estaba de más.

- ¿En qué piensas? – dice pasándose las manos por su pelo mojado.

- En lo mucho que voy a extrañar esto – respondo regalándole una sonrisa.

- Te dije que te vinieras conmigo a Córdoba – se acerca y coloca una silla frente a mi mientras acaricia mi pierna.

- Tengo compromisos en Barcelona y dentro de unas semanas estaré de vuelta en Madrid – tenía que mostrar avances en la discográfica y con ese tema ya estaba un poco aliviada, tenía 3 canciones terminadas y una cuarta por comenzar.

- Te iré a ver a Barcelona, tanto que te aburrirás de mí.

- Eso nunca va a pasar...¿pero y tú?

- ¿Yo que? – pregunta frunciendo su ceño sin entender a qué me refiero.

- Es una posibilidad que te aburras de mí y si estamos lejos es muy prob... - me calla con un beso y no me deja seguir hablando.

- Es muy probable que quiera tenerte a mi lado a todas horas – dice terminando la frase por mi y me mira por unos segundos.

- ¿Qué pasa? – pregunto sin entender su mirada confundida y sé que está pensando en algo pero tratándose de Hugo puede ser cualquier cosa.

- Pensaba hacer esto después de la cena y un poco más especial pero no me aguanto sin poder darle nombre a esto – lo miro sin saber de qué habla – Ana Julieta ¿quieres ser mi novia? – pregunta acariciando mi mejilla y al escuchar sus palabras se me revuelve el estómago de nervios y emoción.

- Me encantaría – digo en un susurro y noto como él bota el aire que estaba conteniendo. Me toma de la cintura y me sienta sobre sus piernas para besarnos, era un beso tierno, sincero y calmado.

- Tengo que llamar a mi madre para contarle, después de ayudarme con esto del departamento va a estar feliz – dice Hugo con una gran sonrisa y a mí me hace gracia lo emocionado que esta.

-    ¿ Ana te ayudo con esto? –pregunto girando mi dedo índice en el aire haciendo referencia el departamento y el asiente marcando el celular.

- ¡Madre que tengo que contarte algo! – dice casi gritando – ¡Anaju y yo somos novios! Espera que te pongo en altavoz –dice con su acento cordobés y apretando algo en la pantalla y colocando el celular sobre la mesa.

SOMOS NOCHEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora