SOMOS NOCHE

23.

Había pasado un mes desde que "Soy yo" había visto la luz, el recibimiento que tuvo nos lleno de felicidad y cerro la boca de Ricardo, quien nos pidió disculpas a ambos y se retractó de lo que pensaba, Hugo demostró de lo que es capaz y me alegraba saber que era fiel a su estilo y sus creaciones.

Las reuniones y adelantos para su gira estaban cada vez más avanzadas y ya se habían comenzado a vender entradas en algunos países siendo un total éxito al primer día de ventas y eso era algo que nos impresionaba a todos, aun faltaban meses pero el llegar a una gira mundial y vender entradas en horas nos alegraba mucho y prometía a Hugo el futuro con el que siempre soñó.

Mi disco había sido lanzado hace unas semanas y aunque mi propuesta era distinta a la que solían tener mis compañeros de concurso mis seguidores la acogían mejor de lo que esperaba y estaban llevando mis canciones al top de varias radios. Ambos estábamos en un punto distinto de nuestras carreras pero cumpliendo nuestras propias metas.  Luego de estos meses de mucho trabajo nos tomábamos vacaciones y junto con ello venían las fiestas de fin de año donde nos ibamos a ir con nuestros compañeros de OT a una cabaña que habíamos arrendado para pasar navidad y año nuevo, era el momento donde podíamos estar todos juntos y hacer un parón en nuestras ajetreadas vidas.

Yo como fiel planificadora y precavida ya tenía mi maleta casi lista y Hugo seguía con su guitarra en el sofá sin saber que llevar, faltaban horas para irnos y no tenía ni una camiseta dentro de la maleta.

- cariño se nos hace tarde -dije gritando para que me escuchara.

- calma que llegamos bien - dijo apareciendo en la puerta de nuestra habitación mientras se acercaba a besarme.

- ni siquiera sabes que meter a la puta maleta -dije estresada y envidiando al mismo tiempo su temple de acero.

Tomo un montón de ropa que tenía doblada dentro de su armario sin siquiera fijarse en que llevaba y lo metió a la maleta

- listo! - dijo tomándome de la cintura y acercandome a él - debes relajarte - susurra en mi oído y luego besa mi cuello de una forma que me hace erizar la piel.

- Hugo tenemos que irnos dentro de unas horas - me quejo para evitar que siga.

- Con una tengo suficiente - dice mordiendo mi labio y no me resisto más.

Lo empujó a la cama y este se sienta en el borde, me acomodó sobre el con una pierna a cada lado de su cadera y me apega mas a él con su mano apretando mi trasero.

Sus manos inquietas se meten por debajo de mi camiseta y recorren mi pecho suavemente para luego lanzarla al suelo y yo hago lo mismo con la suya. Tomo su mentón y me abro espacio para devorar su cuello y recorro la guitarra que tiene tatuada con mi lengua, escucho un leve gemido y me hace volver a sus labios y encender aún más el fuego, en un movimiento rápido me hace recostar sobre la cama y el sobre mi apoyando su peso en sus antebrazos, enrollo mis piernas en su cadera para poder sentirlo y noto lo excitado que está, se roza fuerte contra mi y no puedo ahogar mi gemido ante su toque.

- necesito sentirte - susurra sobre mis labios y en segundos estamos desnudos y se hunde fuerte dentro de mi, me toma por sorpresa pero me gusta, se mueve de una manera más brusca de lo habitual y no me demoro en seguir su ritmo, me aferro a su cuello y tiro fuerte de su pelo mientras nuestras miradas no dejan de hacer contacto, nos estamos quemando en nuestro propio fuego y es una sensación que nunca antes había sentido con alguien más.

Estoy recostada sobre su pecho que tiene pequeñas gotitas de sudor mientras el esta con un cigarro.

- ¿y si nos quedamos? - pregunta acariciando mi cabello y yo lo miro mientras se encoge de hombros - no creo que quieras que todos te escuchen gemir como acabas de hacerlo - dice y ambos reímos.

- Puedo callarme - respondo siguiendo su juego.

- Te quiero tanto mi Anaju

- y yo a ti Huguito

Se acerca a mi y me besa de una manera delicada y tierna, totalmente opuesta a como estábamos minutos antes.

Hugo se sube al auto y vamos camino a la cabaña mientras le escribo un mensaje a Nía avisandole que ya vamos en camino, me responde que no tarda en llegar lo que me hace suponer que seremos de los últimos.

El camino son unas tres horas aproximadamente y lo hacemos más ameno cantando las canciones que salen aleatoriamente en la radio pero me siento más cansada de lo normal y sin darme cuenta me duermo.

- despierta cariño...ya llegamos - dice el rubio acariciando mi mejilla.

- perdón...me dormí y te dejé solo.

- no te preocupes.

Miro hacia el exterior y ya está oscureciendo, frente a nosotros hay una cabaña de madera que más que cabaña viene siendo una casa de dos pisos, cuando bajamos del auto veo a Javy y Nía corriendo hacia nosotros y nos unimos los tres en un abrazo.

- las extrañaba -dice Javy besando mi frente y luego Nía besa mi mejilla.

- Estas muy guapo - digo pasando mi mano por el cabello de Javy.

- Hey y yo que- se queja Hugo y ambos se van a saludarlo, más atrás llega Flavio con quien nos unimos en un abrazo apretado, aunque Flavio es más reservado seguía siendo uno de mis más cercanos del grupo.

- ¿estás bien? pregunta tomando mi mano y yo asiento - estas un poco pálida.

- debe ser el viaje...estoy bien cariño - beso su mejilla y saludo a los que le siguen a la espalda.

Eva corre a los brazos de Hugo al verlo pero se que es su personalidad amistosa y tampoco dudo del rubio, Flavio me ayuda con mi maleta y al entrar me quedo embobada, la casa es más amplia de lo que se ve por fuera.

-Espera a ver la piscina - dice Flavio mientras me lleva enlazando su brazo al mío para llevarme al exterior.

Al final del patio hay una piscina bastante grande con luces por todo el límite que le da un toque bastante elegante, el verde del pasto le da el toque de naturaleza y varias reposeras blancas al costado derecho.

- Me encanta pero dudo que nos metamos, hace frío.

- Seguro que en año nuevo terminamos todos dentro -dice Rafa pasando su brazo por encima de mis hombros y besando mi mejilla.

- ¿ o ahora? -dice Bruno tomándome en brazos y llevándome en su hombro hacia la piscina, pataleo y le ruego que no me lance y me baja a los segundos - solo jugaba pequeña- me abraza fuerte y me acuerdo de lo juguetón que era a veces conmigo y lo quiero así.

- ¿ Y dónde está nuestra habitación? -pregunta Hugo con su marcado acento.

- Segundo piso al final del pasillo - dice Nía y Hugo asiente mientras toma mi maleta y sube con ambas, una en cada mano.

- ¿Donde está el baño? - le pregunto apurada a Nía porque siento náuseas.

- Subiendo a mitad del pasillo -asiento sin decir nada y corro subiendo las escaleras, me arrodilló para vomitar y cuando la desagradable sensación se va mojó mi cara - ¿ Que pasa? - pregunta Nía mientras acaricia mi cabello.

- Debe haber sido el viaje, a veces cuando son trayectos muy largos me mareo.

- Esperemos que mejore pronto.

Ambas salimos del baño y nos vamos a mi habitación para poder hablar de todo lo ocurrido estos últimos meses mientras Hugo y yo guardamos nuestra ropa, Nía se emociona al escuchar los detalles de la gira ya que Hugo le cuenta extasiado todo lo que está preparando.

Hola!! Capítulo un poquito menos emocionante pero espero que les guste y me lo hagan saber comentando!
Gracias a las que aún siguen firme leyendo y a quienes votan también, siempre es agradable ver que apoyan .
Un abrazo
-N