Capítulo 42.

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Escuché que alguien llamaba a la puerta, me queje y me moví hacia atrás, escuché como algo caía al suelo y después un quejido.
Jeongin también se quejo y me empujó de la cama, caí justo sobre algo, más bien alguien ya que se quejo al sentir mi peso.

Abrí los ojos, me levanté un poco y vi el rostro de Jisung muy cerca de el mío, el seguía durmiendo a pesar de haber caído de la cama y de que yo caí sobre el.

—¡AAA! ¿En serio?— Minho se levantó fastidiado.

Cuando abrió la puerta entraron todos los demás chicos a excepción de uno, Woojin.

—¿Que hacen ahí?— Seungmin nos señaló.

—Creo que Jisung está muerto— dije aún adormilada sobre su cuerpo.

—¿¡QUE!?— Chan se asusto.

—Estoy bien...— habló en voz baja— Solo que un bulto de carne me cayó encima y no puedo respirar bien, ni moverme...

Sentí como alguien me levantaba con ambos brazos y me dejaba sobre el.

Levanté la cabeza, y era Minho.

—¿Cómo tienes tanta fuerza?

—No se.

—Vamos a desayunar— Seungmin me tomó del brazo para que me levantará.

—No quiero, tengo sueño.

—Vamos— Minho se lavanto y por ende me levanté yo.

—Jisung...— Jeongin le habló.

—Si ya voy— se levantó.

—Me daré una ducha primero, si quieren adelantarse ustedes...— en serio no tenía hambre.

—Ya me se esa artimaña tuya, vamos— Chan me tomó de el brazo y me llevó fuera de la habitación.

—Pero en serio, tengo sueño y no tengo hambre.

—Esta noche tenemos un concierto, debemos comer bien para no morir de cansancio— Seungmin paso su brazo por mis hombros.

(...)

Comí demasiado, ahora mismo la culpa por haberlo hecho me carcomía, seguramente me vería inflamada en un rato...

—Voy a la habitación— me levanté casi que corriendo.

Tomé el ascensor y cuando estuve en el piso entre inmediatamente a la habitación.
Me senté en la cama a meditar sobre lo que iba a hacer...

—Bien... Está será la última vez... Si, mañana controlare más lo que comeré...

Tenía que hacerlo rápido, Minho también tenía una llave de la habitación y si me encontraba haciendo algo así me daría demasiada vergüenza.

Corrí al baño y me detuve frente al inodoro.
—Bien será la última vez— cerré la puerta antes que nada.

Volví y sin pensarlo dos veces metí un dedo hasta mi garganta, comencé a vomitar todo lo que había comido.

—¿Kat?— Minho abrió la puerta y me vió.

Abrí demasiado los ojos pero no podía parar de vomitar, el sabor amargo en mi boca me provocaba vomitar repetidas veces.
Minho solo me observaba desde la puerta.

Cuando pude dejar de vomitar tire de la cadena y aún sin poder mirarlo a los ojos comencé a lavar mis dientes, no quería verlo, no podía.

Enjuague mi boca he intenté salir de el baño pero Minho obstaculizaba mi camino.

—Mirame...

—Minho, quiero ir a la cama...

Me tomó bruscamente por los hombros y por inercia me hizo mirarlo a los ojos.

—¿Desde cuándo haces está mierda?

Por esto mismo no quería verlo a los ojos, sus ojos solo me transmitían tristeza, lastima, enojo y algo de decepción.

—Desde que comencé con la dieta... Pero dejé de hacerlo hace más o menos como un mes o dos...

Minho dejo de ejercer fuerza en mi brazos y comenzó a bajar su cabeza, después ví como empezó a llorar.

—¡Oye! ¿Porque lloras?— el inmediatamente me abrazo.

—Eres tan pequeña... ¿Cómo pueden destruir a una niña?

—Minho estoy a unos meses de cumplir 17... No soy una niña.

El seguía llorando mientras me abrazaba.
—Nunca te había escuchado o visto llorar... ¿Estás bien?— comenzaba a preocuparme.

—Tu vida no debería ser así...— el me abrazó más fuerte.

—Yo elegí esto...— levanté la cabeza ya que deje de sentir su agarre fuerte, yo aún lo abrazaba por la cintura.

—¿Porque lo hiciste? Esto es una mierda... Perfectamente pudiste debutar como una artista aquí...

—No sería lo mismo... Toda esta mierda me hace saber que si alguien me reconoce alguna vez, no será en vano.

Me sonrió débilmente y volvió a soltar un par de lágrimas.

—No se lo digas a nadie ¿Si?— el puso una mano en mi cabeza y acarició mi cabello con su pulgar, asintió.

(...)

—Sientate— María me habló de mala gana y le hice caso.

Le tocó venir como nuestra maquilladora después de trabajar con Got7, desde la última vez no volvió a contactarme y cuando nos veíamos estaba a la defensiva o me ignoraba por completo... Normal.

En ningún momento habló solo se dedicó ha hacer su trabajo, no pude evitar observarla por el espejo. Perdóname María pero no puedo volver el tiempo atrás.

Termino conmigo y después siguió con Felix, la hora de salir al escenario era cada vez más cerca y comencé a ponerme muy nerviosa, tanto que mis manos no dejaban de temblar.

—¿Estás bien?— Changbin se acercó preocupado.

—Si... Mierda, no puedo dejar de temblar...

—Toma esto— uno de los Managers me extendió una pastilla.

—No debo tomar ningún medicamento antes de subir al escenario...

—Esta bien, puedes tomarlo— Jisung habló detrás de el— Yo lo hice.

Lo dude un poco y aún con mis manos temblorosas tomé la pequeña pastillas la metía en mi boca y el manager me dió una botella de agua.

Cuando la trague suspiré intentando calmarme.

—Te hará efecto antes de que subas al escenario te lo prometo— el manager puso una mano en la mía, solo me límite a asentir mientras le agradecía.

Cuando terminaron de maquillarnos a todos uno de los organizadores del concierto nos explico algunas cosas del escenario, ya las habíamos hecho en el ensayo pero solo las recalcó para que no olvidarmos nada y que no hubiera un accidente.

De un momento a otro comencé a sentirme mas relajada, ya no tenía taquicardia y sentía mis músculos demasiado relajados, supuse que era el efecto de la pastilla.

Fuimos detrás del escenario y entre los gritos de Stay Chan nos llamó.

—¡Chicos! ¡Hoy lo haremos bien! ¡No importa si hay equivocaciones el punto es disfrutar!— pusimos las manos en el centro, gritamos Stray Kids, pusimos nuestros auriculares y comenzamos a tomar nuestros lugares.

The Best Leader (Bang Chan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora