GTA ROLEPLAY & STREAMER's

R A P T O R L V

Pedido para _dinox_ <3

POV's Narrador.

La castaña estaba jugando con su mejor amigo, Karchez. Esta le había confesado a su querido amigo que estaba enamorada de Raptor, pero, no sabía como decírselo.
Karchez trato de darle consejos, aunque no supiera mucho del tema, trataba de hacer que Raptor se diera cuenta de lo que sentía la chica, pero, este era imbécil, según había sentenciado el apodado como Karchez.

-¿Que le dijiste?- Pregunto con curiosidad la chica.

-Le dije que eres muy linda, que eres la chica de mis sueños, tratando de meter celos.- Contestó Karchez.

-Prácticamente, metiendo mierda. Genial, si es que siente algo por mí, lo negará para darte paso a ti cabrón.

-Oh... Cierto.

-Imbécil serás tú.- Le reclamó la chica.

-Pues... La verdad si, pa' que mentirte.- Rió.

-¿Y si le dedicas una canción?- Ofreció el castaño.

-No jodas, si me lo hicieran a mí me daría cringe.- Respondió sincera.

-Bueno, si te dedican una canción que era para otra persona, pues esta cabrón, pero, si la escribes tú para él, seguro le gusta.

-Me crees cantante o que chingados.

-Mujer, todo se puede!

-Que te den por detrás, joputa.

-Hombre, si me das tú, quizás me dejo.- Respondió con burla, haciendo reír a la chica.

-¡Pero bueno compañero! Que perversidades pasan por tu cabeza.

-¡Ya se! Invítale a salir.

-¿A donde?

-A un motel.-Respondió sarcástico.- Obviamente a comer estúpida.

-Anomames, si cierto. Si fueras Raptor, ¿A dónde te gustaría ir?

-Si te soy sincero, a tu cama bb. Pero, eso es cómo Karchez, si fuera Raptor me gustaría ir a un restaurante 10 mil estrellas cerca de la playa.

-¡Ya se!- Dijo animada.- Gracias por la ayuda Karchez alias el Raptor.

-Cabronaza.- Dijo antes de que la chica saliera del canal de discord y se metería donde estaban Axozer, Raptor y Momon.

-Putos todos.- Dijo al conectarse.

-¡Que hija de puta, me desconcentras!.- Dijo Momon.

-Hijo de puta tú, cabrón.

-Raptor, metete a Chat 4. Cerdo.- Dijo la chica para después desconectarse de Chat 1 y meterse al antes indicado, segundos después llego Raptor.

-¿Qué pasa? Mujer.- Preguntó con curiosidad.

-Tú, yo, en el restaurante frente de la playa, a las 16:00, sin falta, ve guapo, como siempre.- Dijo y salió del chat 4 y se metió al 2, junto con Karchez.

-¡LO HICE!- Gritó entusiasmada al micrófono, petando los oídos del contrario.

-¡ESO MAMONA!

Al día siguiente, como había acordado la castaña se encontraron en el restaurante que daba vistas hacia el mar, había elegido esa hora para algo en especial.
La chica iba vestida con un vestido blanco que le llegaba hasta tres dedos más arriba de la rodilla. El chico iba todo fachero, facherito.

Habían comido y ahora se encontraban en la playa, recostados sobre la arena, viendo como el sol se metía, haciendo del momento más especial para ambos.

-¿Porqué me invitaste a salir?

-Porque quería decirte algo.- Respondió sonriendo hacía el atardecer.

-Y eso es...

-Desde la primera vez que hablamos, despertaste en mí un sentimiento algo extraño, poco tiempo después descubrí lo que era.- Comentó.

-¿Cuál era?- El chico miro a la castaña, curioso.

-Era amor...- La chica volteó la cabeza hacía donde se encontraba su contrario, aún con la linda sonrisa que caracterizaba a la chica.
El chico no reaccionaba, estaba procesando toda la información en su mente, ¿Que tal si le dolía a Karchez? Era lo que pasaba por la cabeza de Raptor, le preocupaba perder la amistad de el castaño, pero, también el amor de la chica.

-También me he estado sintiendo de la misma forma, y creo que estoy enamorado de ti, pero, Karchez es más pegado a ti, el ha estado más veces que yo y creo que merece una oportunidad...

-¿Karchez? Hijo mío, el me estaba ayudando con las indirectas y para provocarte celos...- Rió la chica, sorprendiendo a su contrario.

-Joder... Entonces.- Se levanto y le ofreció la mano a la chica, esta acepto gustosa.

-¿Quieres ser mi novia?- Pregunto con una sonrisa, mientras tomaba la cintura de la chica, esta asintió varias veces y tomó las mejillas de su contrario, para después estampar sus labio contra los suyos, subió inconscientemente los talones para tener más comodidad, al tener una diferencia de altura bastante notable, se separaron por la falta de aire, pero, si fuera por ellos nunca se separarían.

-Si, ¡Si quiero!