Capitulo 7

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- No eres un monstruo Skaylar... Eres un vampiro.

- En verdad crees que soy idiota - me acaba de decir que soy un maldito vampiro, existen mejores mentiras - ¡No estoy jugando Zac!

- ¡Mírame Skaylar! - sus colmillos sobresalían de su dentadura.

No pude evitar gritar y sentirme horrorizada, solo son colmillos pero su expresión, es la misma del tipo que me atacó.

- Tú eres lo mismo - no puede estar pasando esto, no puedo ser esta cosa - Eres vampiro porque Matthew te mordió - me dice ya escondiendo sus colmillos.

Matthew, ese era el nombre del desgraciado, pero no recuerdo que él me haya... Mi labio, el logró romperme un poco el labio cuando me estaba besando.

- Pero... No yo... No puedo - ni siquiera logro formar una oración correcta.

- Pero yo terminé la transformación.

- ¿Qué hiciste qué?¿Cómo que tú la terminaste? - espero que me de una buena explicación.

- Cuando Math te mordió te hiciste neófita, una especie de polluelo para los vampiros - por eso me comportaba tan extraño - Pero para convertirte en una de verdad, tenias que morir.

- Pero eso es absurdo, no he muerto ¿se puede revertir? - comienzo a desesperame por obtener respuestas.

- Se pudo arreglar en la primera etapa - ¿Se pudo?¿Por qué habla en pasado? - Pero yo te maté Skay.

- No, tú no me mataste ¿Cómo podría no recordar algo así? - en serio se está tomando en serio la actuación.

- Cuando te pedí que cerraras los ojos, te apuñale... Skay lo siento, pero esa era la mejor opción y...

Me abalanzo sobre él y comienzo a golpearlo con toda la fuerza que puedo dar, estoy tan airada ¡¿Cómo pudo hacer eso?!

- ¡Tú me hiciste esto! - grito y sigo lanzándole golpes - ¡Me hiciste un monstruo!

Él me empuja haciéndome caer pero rápido vuelvo sobre él, aunque esta vez me frena y trata de calmarme.

- Tranquila, cuando te alimentes te sentirás mejor - afirma mis dos brazos dejandome sin poder golpearlo.

- ¡¿Cuando me alimente?! ¡Ahora soy una especie de animal! ¡Soy repugnante!

Soy un monstruo, me alimento de sangre ahora eso es asqueroso, pero lo más asqueroso es que siento la necesidad de hacerlo, siento sed mucha sed, es desesperante, soy horrorosa...

- me hiciste una bestia - ya no trato de golpearlo, solo quiero llorar.

- No Skay, las bestias están en el bosque aullando, tú y yo somos señores de la noche - lo dice como si fuera lo más fabuloso del mundo.

- ¿Aullando, hay lobos aquí? - el dolor y la vergüenza invaden mi voz y la hacen quebrarse.

- Hombres lobo Skay - seca mis lágrimas con su mano - en resumen, todas las historias son ciertas niña, cada una de ellas.

Algo se escucha no muy lejos y ambos nos exaltamos, si hay más vampiros por ahí yo no sabré que hacer.

- Debemos irnos - sujeta mi mano y me hace correr a la par suya.

Extrañamente estoy corriendo mucho más rápido, se siente adrenalina por mi cuerpo, siento que soy capaz de todo, es como tomarse dos tazas de café y un energizante. Pero parece no ser suficiente dado que los ruidos suena cada vez más cerca de nosotros, Zac me aferra más a él y corre aún más rápido hasta llegar a una cerca de madera blanca. La saltamos y Zac frena en seco.

- ¿Qué haces? Podrían alcanzarnos - trato de jalarlo para seguir corriendo.

- No, este es territorio nuestro - se ve más calmado pero al mismo tiempo que alerta - estamos cerca de la casa de Jeanin.

Los sonidos si se están alejando, esto de los territorios tendré que estudiarlo. Caminamos un par de metros más y logro divisar la casa. Aunque me relaja saber que nadie nos persigue, no puedo estar tranquila, soy un vampiro ¿Cómo debería tomarme eso? Si ese Math no me hubiera... Zac lo conoce ¿Por qué lo conoce? Pero él, lo asesinó...

- ¿Conocias al que me mordió?¿Al que mataste?- estamos ya entrando en la casa.

- Sí, el era mi amigo - su rostro se vuelve triste, creo que eran buenos amigos. - pero decidió hacer esto, convertir humanos y formar su familia con ellos y no lo asesiné, solo nos di tiempo.

- ¿De qué hablas? Vi como estabas a punto de arrancarle la cabeza.

- Nos curamos Skay - lo dice como si fuera una obviedad - solo lo debilité un rato, ya debe estar bien...

- Vaya... ¿Qué es eso de formar su familia? - trato de preguntar para entender pero no quiero incomodarlo.

- Si, cuando conviertes a un humano, él se hace parte de tu familia, está a tu total disposición, igual que en las manadas de los hombres lobo, se crea un tipo de lazo entre el que vampiro y el que mordió...

- Entiendo... - de un momento a otro pienso en papá. - ¿Dónde está papá? Debe estar preocupado, llevo días sin aparecer.

- Sólo te ausentaste unas horas Skay - me dice encogiendose de hombros.

- ¿Cómo? Estaba segura de que pasaron días, quizás más de una semana.

- El tiempo es relativo para todos en su transformación - me explica - yo sentí que fueron meses, sin poder sentir nada, sin poder moverme, pero solo fueron cuatro horas.

- Debió ser horrible para ti - Por más que desagrade, igual siento compasión por él. - ¿Quién te convirtió?

- Mi madre - baja un poco la vista - Y la mataron por eso...

Decidí dejar de hablar, al parecer él tomó la misma decisión. Nos quedamos así callados un par de minutos en la puerta de la casa, tiempo que aprovecho para tratar una vez más de procesar todo lo que me acaba de pasar... Me quisieron violar, me convirtieron en vampiro, me mataron, vi como mataban a alguien que ahora resulta que toma algún jarabito muy bueno que hace que se sanen de heridas mortales, mi cita me dejó plantada y el sabia que yo era un... Espera ¿Cómo es que Aiden sabia? Ni yo lo sabia, él dijo algo de ocultar mi aroma...

- ¿Aiden también es un vampiro? - digo rompiendo el  silencio.

- ¿El enfermero? - su tono es algo burlón - Ya quisiera ser uno de los nuestros.

- Pero, no comprendo, en el parque él me dijo... - le conté a detalle todo lo que sucedió.

- Si pues ¿Por qué crees que se fue al notar que estaba anocheciendo? - sigue sonando burlón y yo no doy respuesta - Es un hombre lobo tonta.

- Vaya... Creo que mi cabeza va a explotar.

Errores PerfectosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora