Un apuesto joven de cabello alborotado y mirada fría caminaba a paso firme hacia un pequeño local, mientras pensaba: Lo pintó de otro color, ¿a poco creyó que haciendo ello me confundiría?
Gokú continuó su camino hacia el local, al llegar a este miró el interior del mismo, al tiempo que alguien se acercó a él.
Pase, tome asiento, decía una coqueta joven de cabello rosa.
Llama a tu jefa, respondió Gokú con seriedad.
¿A mi jefa?, dijo la joven sonriendo.
¿Qué eres sorda?, te dije que llames a tu jefa, respondió con firmeza Gokú, haciendo que la joven se retirara del lugar a la velocidad de un rayo.
Qué carácter de nada le sirve ser tan bello si su carácter empaña su belleza, pensaba la joven mientras se dirigía a uno de los ambientes del lugar.
Al cabo de unos minutos un hombre de uniforme llegó frente a Gokú.
¿Usted me anda buscando?, escucho el apuesto joven.
¿Qué?, dijo Gokú, haciendo una pausa para acotar con firmeza: Yo no lo busco a usted sino a la jefa y dueña del lugar, Milk Ox.
¡Ah¡ ja ja ja, empezó a reír el hombre.
Yo no le veo lo gracioso para que se ría, dígale a Milk que Gokú Son, está aquí, dijo el apuesto joven con firmeza y molestia a la vez.
La señorita Ox, ya no es la dueña de este local, dijo el hombre con la mayor calma posible.
¿Qué?, ¿Cómo que no es la dueña?, respondió confundido Gokú.
No joven, hace unos días, para ser exactos tres, este local cambio de dueño, dijo el hombre.
¿Y Milk?, ¿Dónde está ella?, respondió furioso Gokú.
Eso no es de tu incumbencia, escucho el apuesto jovencito, girando su rostro y llenándose de más furia al ver tras él al joven de cabello morado.
Señor Hit, dijo el uniformado.
Continúe con su trabajo, yo atiendo al joven, respondió Hit, posando su mirada en el joven de cabello alborotado.
¿Dónde está Milk?, dijo Gokú con firmeza.
¿Piensas que te lo diré?, respondió Hit con la misma firmeza.
¿Por qué ese hombre dice que este local es tuyo?, dijo Gokú con molestia.
Porque es la verdad, yo se lo compre a Milk, con ese dinero ella decidió irse del pueblo, ¿a dónde?, no lo sé, respondió Hit.
No te creo, tú lo sabes, ¿Dónde está Milk?, dijo Gokú con firmeza.
No pienso decírtelo, respondió Hit con firmeza, haciendo una pausa para agregar: Sal de mi local.
Yo no me iré de aquí, hasta que me digas, ¿Dónde está Milk?, dijo Gokú con voz firme, mientras miraba fijamente al joven de cabello morado.
No lo sé, ya te lo dije, ella por tu culpa se fue nuevamente de un pueblo y no quiso decirme a donde iría, pues es más que seguro que me seguirás como ya lo hiciste para dar con ella, decía Hit con molestia.
¿De dónde sacas eso?, yo seguirte a ti, respondía Gokú con ironía.
No finjas, que se perfectamente que lo hiciste, por ello diste con Milk en este pueblo, por ello, ella tomó la decisión de irse nuevamente, dijo Hit con firmeza, haciendo una pausa para acotar: Déjala ya tranquila, no te ensañes contra ella por algo que fue fortuito.
ESTÁS LEYENDO
TODO TIENE UN PRECIO EN LA VIDA Y EL MIO ES: TÚ AMOR.
AléatoireEllos se amaban en secreto. Tras una tragedia los sentimientos de ambos tendrán que guardarse en lo más profundo de sus corazones transformándose este amor en: Rencor, odio, desprecio e incluso temor. Él hará un trato que ha ella le parecerá desprec...