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𝟓...

-- Che, es que, no.... Sos tan lindo, sos mi taquito ¿Sabés? Te tengo un cariño que no te imaginás, me sorprende tu manera tan adorable de ser, tan original, capo, hay millones de personas en el mundo ¿Por qué te enamoraste de mi?

--¿No lo entiendes? Argie, el amor solo se da, no tengo razones, solo, siento tanto amor por ti, fue extraño como nos conocimos, sí, pero, ¿Qué importa eso? Wey, Te amo como no te imaginas.

A Argentina se le puso la piel de gallina, es cierto que estaba con USA, pero hace mucho no escuchaba un "Te amo", a veces USA era un poco cariñoso, tenía sentido ya que no se habían visto por mucho, y tampoco vivían en la misma casa, así que seguía sin verlo poco, pero  a la vez no quería verse toxico solo siguiendo a USA a todos lados.

Se le resbaló una lagrima al mayor, era tan adorable lo que había escuchado, abrazó con fuerzas al menor quien se quedó sin palabras al sentir eso. Argentina no quería serle infiel a USA, pero tampoco quería ver triste a Mex. Era tan linda la escena, un simple abrazo, un tan mínimo recuerdo, entre aquella noche tan callada, quizá solo ellos estaban despiertos a esa hora, jamás se lo preguntaron ¿Por qué solían verse tan tarde? ¿Qué tenía de especial la noche? Quizá la fresca brisa, quizá el silencio calmante, quizá sea el sonido de los grillos cantando melodías, no lo se, no lo saben, nadie lo sabe, solo hay que disfrutarla.

Esa noche Mex se quedó a dormir en casa de Argentina, no quería estar solo esa noche, no fue para tanto, no durmieron en la misma cama por respeto al otro; En realidad, pelearon en cuanto a quien dormiría en la cama de Argentina. Diciéndole al otro porque él merecía dormir allí. Arge dándole el lugar a México y México diciendo que Arge merecía más dormir en cama.

Al final Argentina aceptó dormir en la cama y México se conformó en dormir en el suelo con una cobija, era muy tarde como para ver una película, ni siquiera se bañaron, especialmente por no incomodar al otro, México soñó en Argentina, a pesar de lo que había pasado, quería ser positivo y ese enamoramiento no iba a acabarse tan pronto, no importa lo que pasase.

A la mañana siguiente México se despertó con frio, miró a los lados deseando un abrazo del mayor, no se encontraba allí, tampoco quería ir a revisar, era su casa, podía hacer y levantarse a donde quisiera cuando quisiera. México despejó su mente y volvió a enrollarse en la cobija, como un adorable tamal, quizá se quedó dormido otro par de minutos, hasta que escucho una voz

-- Buenos días taquito, tenés que levantarte, ir con Chile, ¿Qué se yo? Dale, boludo, tengo que limpiar, además esta empezando el invierno, ¿No querés levantarte y, no se, calentar el cuerpo? vení, no hice desayuno, tremenda fiaca. Dale, que vas a morir de hambre.. -- México solo río, el acento de Argentina era tan adorable, todo de Argentina era adorable, o eso pensaba el Mexicano.

Después de un rato logró levantarse, tenía la piel de gallina del frio, México estaba acostumbrado a su clima tropical casi todo el año,  así que odiaba los días de frio.

Ambos de habían despertado tarde, ya que se habían dormido tarde y ambos amaban dormir por horas, pero no se podían quedar en cama todo el día, el tiempo avanza sin sentido.

Ambos limpiaron la casa, no era muy grande así que no tardaron mucho entre ambos.

-- Así limpiaríamos todos los días bien juntitos sí fuéramos algo, no?~ -- México dijo en voz baja, estaba de mas el tema, pero fue una frase adorable. Argentina alcanzó a escucharlo pero no dijo nada al respecto, solo sintió un corto calor en sus mejillas y un aceleramiento en su corazón

Salieron de la casa sin cuidado, les daba igual lo que dijeran los demás, México empezaba a aprender esa manera tan independiente de ser de Argentina.

Dieron vueltas por el vecindario sin tomar en cuenta nada, solo hablando de cosas absurdas, ambos con una sonrisa, se sentían tan felices y comprendidos. 

-- We, tengo frio y no he bajado mi ropa de invierno, y no quiero dejarte solo... -- Quizá dramatizó un poco, pero con sus ojos de cachorro se ganó la lastima del Argentino, quien lo tomó del brazo y lo regresó a su casa, a su habitación.

México no comprendía que intentaba hacer, no quería malpensar nada, eran amigos, no esperaba nada de "eso"...

-- Claro que tenés frio! solo traés una polera! no quiero que te enfermes taquito..-- México comenzó a sonrojarse, era lindo pensar que se preocupaba en él, pero, ¿Qué planeaba hacer?

Argentina se quitó su buzo.

México se empezaba a sonrojar más y más, se volteó hacia otro lado, ciertamente su quería ver el pecho del mayor, pero mantenía ese respeto mutuo el cual  era parte de la amistad.

Mex solo escuchaba el sonido de la tela por el cuerpo de Arge, no quería voltear, no podía voltear, solo le quedaba imaginárselo. El sonido de la tela estaba siendo demasiado largo lo cual empezó a extrañarlo, al menos daba por obvio que no  intentaba calentarlo de "esa" manera, pero estaba siendo extraño el momento, México se quedó sin opciones que pensar.

-- Listo, toma... -- Argentina le extendió el buzo que traía puesto, México respiró con tranquilidad, volteó la mirada hacia arriba, Argentina solo se había cambiado de ropa y le había dado uno de sus sueters, Para que no pasara frio en lo que lavaba y arreglaba su ropa de invierno.

Los ojos de México destellaron al ver que tenía en sus manos la prenda preferida de Argentina, Un buzo color menta clara, con capucha y lo mejor de todo, el olor de Argentina. México se la puso con asombro, sentía tan suave la tela... Aunque, le quedaba bastante grande...

(1001 Palabras)

Hola UwU, ¿Qué tal su día querido lector? 

El mio bien, terminé mis tareas temprano y tuve tiempo de escribir esto .w.

Ta lindo ,no?

Bue, no se que decir, ando feliz  de haber podido actualizar y darle un lado feliz a la historia

Ah, claro! ...

Mil gracias a..

✨ Gudy_S ✨

Qué esta empezando a apoyar esta historia con votos y comentarios, gracias por todo, he estado leyendo tus comentarios. Me alegra que te esté gustando <3