Tú Decides...

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*6 meses después*

Narra Raymond

Estaba en la sala de reuniones con los chicos y algunos abogados ya que teníamos que preparar todo para algunas presentaciones que tendré en el Coliseo de Puerto Rico en unos cuantos meses más adelante. Yo realmente no estaba interesado en la reunión y ni siquiera estaba poniendo atención a lo que los demás decían y sólo estaba sumido en mis pensamientos.

Han pasado ya 6 meses desde aquel pequeño accidente que tuve por haber salvado a Samantha de ese horrible rayo que cayó del suelo pero desde entonces no he sabido nada de ella, es como si la tierra se la tragado literalmente ya que voy a mi antigua casa no está ahí, voy a la casa de mis suegros y tampoco así que no sé donde demonios se fue a esconder esa mujer. Aunque eso no es lo más importante para mi en estos momentos sino más a mi angelito, a Wendy, desde aquella vez que soñé por última vez con ella ya nunca más a aparecido y realmente la necesito, la necesito más que a nada en este mundo.

Estaba jugando con un bolígrafo mientras escuchaba los gritos y objeciones de los chicos hacia los abogados pero verdaderamente no me interesaba nada de lo que decían así que me levanté de mi lugar y salí en silencio de la sala para luego irme  a mi oficina. Al llegar cerré la puerta y me acerqué a la ventana para poder ver un poco la ciudad.

Las palabras de la tal diosa Afrodita no salen de mi cabeza desde hace tiempo pero aún así no logro entender nada de libros y todo eso que me dijo aquella vez.

*Flashback*

Afrodita: si quieres volver a verla tienes que reunir los 3 libros sagrados y luego en la fuente de los dioses debes decir lo que algún día le prometiste a esa chica. Dice seria.

*Fin Flashback*

Si quiero recuperar a Wendy tengo que conseguir esos libros pero ya fui a varias bibliotecas, a centros comerciales y nada que los encuentro pero no me daré por vencido, todo sea por recuperar a mi angelito.

Sentí que abrieron la puerta y luego entraron Anitta, Natti Natasha junto con un hombre.

Anitta: Daddy, este hombre estaba buscandote. Me mira coqueta.
Natti Natasha: dice ser un criminólogo. Dice seria.
Xx: buenas tardes señor Ayala. Me mira.- lamento un poco la demora pero estas mujeres me retenieron en la recepción. Mira a las chicas.
Raymond: no se preocupe y gracias por venir. Le doy la mano.- chicas por favor pueden retirarse esto es un asunto personal. Digo serio.
Natti Natasha: pero Daddy, ¿y la canción?. Se queja.
Raymond: luego hablamos de eso, pero por favor retirense. Digo molesto.

Ellas rodearon los ojos y salieron molestas de mi oficina dando un portazo, realmente ya no soporto a esas mujeres pero ya que, trabajo es trabajo.

Raymond: lamento los inconvenientes, pero usted sabe como son las personas a veces. Me río bajo.- pero tome asiento.
Xx: gracias señor Ayala. Se sienta.- hoy vengo a entregarle el dije que solicitó con las cenizas de la señorita Feliciano. Me entrega una caja.- y bueno también para informarle que al momento de extraer el ataúd no se encontró ningún libro, siendo así posiblemente que otra persona haya tomado el libro o simplemente que el libro esté en otro lugar. Me mira serio.
Raymond: ¿habla enserio? ¿no hay ningún libro?. Digo preocupado.
Xx: no señor Ayala, le sugiero que busque en otros lugares, como la casa de la señorita o posiblemente hable con sus familiares tal vez puedan brindarle una información. Dice serio.
Raymond: entiendo. Suspiro triste.
Xx: bueno, eso sería todo. Se levanta.- si necesita nuevamente de mis servicios no dude llamar a mi empresa.
Raymond: claro, muchas gracias por todo. Sonrío.

El criminólogo tomó su maletín y salió de mi oficina, mientras yo me quedé ahí mirando la caja en donde estaba el dije que pedí hace ya algunos meses, si se lo preguntan yo solicité la incineración del cuerpo de Wendy ya que quería llevarla conmigo a todos lados y nada mejor que en un dije.

Suspire y luego me senté en frente de mi escritorio entonces luego de unos segundos decidí abrir la caja.