19

110 7 1
                                    

Narra Katherine

El idiota de Raymond se había desmayado y con Isabelle sólo nos reímos para luego acercarnos y posiblemente ayudarlo ya que esta discusión no ha terminado.

Isabelle: Raymond, por favor no juegues con nosotras. Se ríe.
Katherine: no entiendo como Samantha eligió a un hombre tan estúpido como tú para ser su esposo, hay muchos mejores que tú Ayala. Rodeo los ojos.

Llegamos a su lado y de repente escuchamos risas que provenían de él, empezó a ponerse de pie mientras se sacudía el polvo y se reía al mismo tiempo.

Raymond: ¡ay chicas! ustedes no se cansan de molestar ¿verdad?. Se ríe.

Él nos miró con una sonrisa malévola y sus ojos se habían vuelto color rojo, nos miramos con Isabelle y nos alejamos un poco asustadas ya que no entendíamos que es lo que le pasó a este estúpido.

Raymond: ¿y esa cara? no me digan que las niñas tienen miedo. Se burla.
Katherine: te prohíbo que nos digas niñas...
Raymond: pero si es lo que son, unas niñas estúpidas que sólo se la pasan jodiendo a las personas inocentes de esta isla. Cruza los brazos.- pero ahora comprendo, una rubia peliteñida y una puta que sólo le desgracio la vida a mi amigo no podían estar de más en este mundo, hay muchas mujeres como ustedes ¿sabían?, ¡que sólo son estorbar y molestar!. Dice molesto.

Lo miramos sorprendidas pero en eso de repente levantó sus manos hacia nosotras y en cuestión de pocos segundos sentimos que algo fuerte nos tomó del cuello levantándonos un poco del suelo.

Katherine: ¿qué demonios?...
Isabelle: Raymond ¡sueltanos!. Forcejea.
Raymond: niñas maleducadas como ustedes necesitan una lección para que así dejen de joder a la gente. Dice serio.

Mientras intentábamos salir de ese agarre de nuestro cuello él hizo un movimiento con sus manos haciendo que fuéramos atraídas hacia él bruscamente, luego nos tomó del cuello con sus manos a modo que fuéramos ahorcadas.

Raymond: que esto les quede como lección que no deben que meterse conmigo porque sino terminarán ¡muertas!. Dice molesto.

Al final nos soltó y caímos al suelo asustadas por todo esto, este hombre es un verdadero loco es.., es como si estuviera poseído por alguien.

Raymond: ahora largo de mi casa ¡largo!. Grita.

Con Isabelle nos levantamos asustadas rápidamente y sin decir nada salimos corriendo de ahí para que así no nos siguiera torturando este idiota.

Narra Raymond

Estaba medio dormido cuando de repente abrí los ojos dándome cuenta que estaba de pie afuera de mi casa, no recuerdo que pasó o que hice en estos últimos momento, lo único que recuerdo es que estaba discutiendo con Isabelle y Katherine pero ahora ya no están pero eso ya no importa ahora, es mejor que dejaran de molestarme.

Suspire aliviado y luego me dirigí hacia mi casa para poder así descansar un rato y así mañana ir a Cartel tranquilo, tan sólo esperar  recibir la dirección en donde se encuentra Samantha.


Tú Decides...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora