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Especial de Halloween
Shipps: Kaynea Truewos
Ivo
Hoy Joa estaba muy feliz, en la noche vendría Mateo para pedir ir dulces en las casas. Estaba eligiendo su disfraz.
––¿Cuál es más lindo?-. Dijo pensando, tenía un disfraces en cada mano. ––¿El de zombie o el de vampiro?-.
––Con cualquiera te vas a ver hermoso mi amor-. Deje un besito en su frente. ––Te dejo que elijas en lo que yo preparo la comida, ¿Si?-. Asintió y salí de la habitación.
Preparé la comida y le hablé a Joa, todo el tiempo estuvo hablando sobre su disfraz.
––¿Entonces te decidiste por el vampiro?-. Le dí otra cucharada de arroz.
––Si, es que los zombies me dan miedito-. Le apreté su mejilla, era muy tierno mi bebé. ––Ya quiero que llegue Teo-. Dijo aplaudiendo con sus manitos con emoción.
––Me llamó Valentín y me dijo que llegan a las 8-. Le expliqué, el miró el reloj pero no le entendía.
––No se cuánto falta pero es mucho-. Hizo un pucherito.
––Para que el tiempo se pase más rápido podemos ir a preparar todo para tu disfraz-.
––¿Me vas a poner pinturitas también?-. Un brillito en sus ojos estaba presente.
––Claro que si amor, vas a parecer un vampiro muy aterrador-. Le dije y lo lleve a la habitación después de terminar de comer.
––Pero yo no quiero asustar, no es bonito eso-. De nuevo uno de sus adorables pucheritos apareció en su carita bella, ayy mi bebé.
––¿No quieres asustar a los demás, bebé?-.
––Nop, el otro año alguien me asusto con su disfraz de hombre lobo y no sentí bonito, no quiero que los demás sientan feo-. Explicó.
––Ayy mi vida, ¿Sabías que eras muy lindo?-. Le dejé besitos por toda su cara.
––Siempre me lo dices-. Rió.
––Es porque si lo eres-. Le dejé un último besito en su mejilla y el se sonrojó.
