Mateo se sentía feliz saltando en la cama, Manuel estaba trabajando y no podía cuidarlo en ese momento, así que lo dejó en su habitación con algunos juguetes, los cuales ignoró por completo.
Cada vez saltaba más alto, quería tocar el techo con su mano, en una de tantas veces que saltó, su pie no tocó el colchón y se fue hacia un lado de la cama haciendo que todo su cuerpo cayera al piso.
Su labio inferior comenzó a temblar delatando que estaba a punto de llorar, en cuestión de segundos las lágrimas ya estaban bajando por su mejilla, Manuel escuchó el llanto y se aproximó a ir con su bebé.
Lo encontró en el suelo limpiando sus lágrimas al mismo tiempo que lloraba fuertemente. Sintió su corazón estrujarse cuando vió a su pequeño llorando.
--¿Qué pasó Teo?-. Fue lo primero que le preguntó antes de que se sentara en la cama y a Mateo en su regazo. Limpiaba suavemente las lágrimas de éste.
--Y-yo e-estaba saltando y me caí de la cama-. Habló con la respiración agitada y soltaba de vez en cuando hipidos.
Manuel sabía que no le había pasado nada grave, pero Mateo era muy sensible cuando estaba en su little space.
--¿Dónde te duele bebé?-. Le preguntó en tono suave.
--Aquí-. Señaló su brazo.
--Sana sana colita de rana, si no sana hoy sanará mañana-. Cantó para Mateo sobando su brazo y el menor soltaba risitas--¿Ya te sientes mejor?-.
Mateo asintió y aún le quedaban algunas lágrimas que Manuel limpio con la manga de su buzo.
--¿Quieres que te prepare un biberón?-. Asintió--Bueno quédate aquí ahora vuelvo-. Mateo negó y se abrazó más a él.
--Quiero ir contigo nanu-. Era tan tierno. Manu solo se lo llevó con el a la cocina para hacer lo dicho, una vez termino se fueron nuevamente a arriba.
Se recostó en la cama y acomodó a Mateo en su regazo mientras esté bebía el contenido de su botella. Manuel encendió la televisión para ponerle dibujitos a Mateo.
Cuando terminó de beber noto que ya estaba dormido, lo arropó con una frazada, y le dió un beso después de colocar un chupete entre sus lindos labios, sonrío al ver cómo comenzaba a succionar siendo ese el único sonido presente en la habitación.
El aún debía trabajar, así que lo dejo ahí para continuar, después de un largo día terminó y se fue a acostar con Mateo a su lado, lo abrazo y al momento de eso, el más pequeño se escondió entre su pecho sacándole una sonrisa a Manuel.
Fin.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
No sé porque siempre termino el capítulo cuando durmen :v, considero que es el momento indicado para terminar.
Bueno, espero que les haya gustado, si quieren un one-shot pueden dejarlo en los comentarios o mandarme mensaje al privado para que sea anónimo.
Si te gustó no olvides votar y comentar, amo leer sus comentarios :)
