one shots descendientes

53. Mevie

Alone

Las lágrimas salian a mas no poder de los ojos de la peli-azul, Hans lo había vuelto a hacer y esta vez se habia pasado de la raya, tenía quince años e iba a ser madre, ¡En la isla de los perdidos!. Donde nadie la iba a ayudar, o eso creía.
No podia pedirle ayudar a Carlos, el apenas llegaba a los estantes de la cocina, tenía trece años y no podía arruinarle la adolescencia, Harry, Uma y Gil ya casi no le hablaban, Jay y ella no eran amigos y no estaba en sus planes buscar ayuda de la descendencia de Maléfica.
—¿Estas bien?— Preguntó hablando de roma, la peli-morada. —¿Te diste cuenta que no encontraras un castillo?.
—No, no es eso.
—¿Se te rompio el espejo? ¿El labial?— Preguntó en un tono burlón.
—No, y no voy a contarte. Vas a reirte de mi y le diras a mi madre.
Mal la miró por unos segundos, sabía bien lo que era tenerle terror a tu madre.
—¿Que te hizo Hans esta vez?— Preguntó Harry sobresaltando a ambas.
—H-Harry, creí que ya no te juntabas conmigo.
—No, pero se lo mucho que Hans te lastima y necesito saber que paso esta vez.
—Lo mismo de siempre, solo que ahora hay un minúsculo detalle
Mal seguía ahí, habia entendido parte de la conversación, y no habia emitido palabra alguna a pesar de que le preocupaba Evie.
—¿Que tan minusculo?.
—Me dejo embarazada.
Los ojos verdes de Mal se abrieron  como platos, entonces entendio todo y mas, su madre le explicó que a algunas niñas de la isla las violaban, pero la mayoría solía aparecer muerta y que debia estar con cuidado. Pero jamás penso que podía ser alguien de su "entorno".
Harry solamente la abrazo por unos segundos antes de irse, Evie miró a Mal.
—Evie si necesitas algo...
—No le digas a mi madre.
Mal asintió y salió de alli, hasta su casa, Maléfica la vio entrar nerviosa.
—¿Mal?. ¿Que sucedio?.
—Fui al callejón de la isla, Mamá.
Malefica no era tan mala como todos creían, no era nada a comparación de lo que eran Regina y Drizzela.
—¿Qué? ¿Por qué?.
—Evie estaba allí.
Maléfica la miró, Evie era una persona especial para ella, nadie lo sabia, pero cuando la pequeña tenía apenas cuatro años la salvó del hecho que ocurrió seis años despues.
—¿Que te dijo?— Preguntó con miedo.
—Hans la dejo embarazada.
Maléfica se alejo un poco de su hija para tener espacio, logro transformarse en dragón, Mal se subio sobre ella y ambas volaron hacia la mansión grimhilde.
Como de costumbre Regina no estaba, lo cual les ahorraba un trabajo, Mal subio las escaleras al lugar donde creía que Evie dormia, su instinto no la traicionó, la princesa estaba durmiendo.
Maléfica siguió a su hija y cargo a la adolescente hasta la torre del dragón.

[...]

—Hace seis meses no venias a robar, ¿Que pasó?.
—Eso no es importante.
—¿Para que nos llamaste Dragón morado?.
—Necesito su ayuda.
—¿Y por qué querría ayudarte?— Preguntó la descendiente de Ursula.
—Es Evie.
Los cinco chicos miraron a Mal, Evie seimpre los habia ayudado a escapar de sus problemas y a pesar de que eran villanos sabían que no hacer lo mismo por ella estaba muy mal.
—¿Que pasó con Evie?.
—¿Le paso algo al bebe?.
—¿BEBE?— Gritaron Carlos, Jay, Gil y Uma.
—Evie esta embarazada— Explicó Mal —Regina se entero y la esta buscando.  Tenemos que hacer algo.
—¿Donde esta?.
—Mi mamá la esta cuidando.
—¿Maléfica?— Preguntó Carlos dudoso.
—No, Hades— Respondió con ironía.
—¡Malas tardes sabandijas!— Gritó Regina sobresaltando a todos. —¿Quien de ustedes sera el que me diga donde esta esa rata azul que salio de mi vientre?.
Mal sintió odio hacia Regina, tal vez era porque Evie y ella se estaban voviendo demasiado cercanas.
—A ver, ¿Seras tu camaron? ¿O tu pirata de ojos celestes? ¿O tu come huevos?— Preguntó amenazando a cada uno con el dedo —¿O tu ladrón de lamparas? ¿O tu dragón morado?.
Carlos empezó a pensar una buena idea, y se le ocurrió rapidamente solo faltaba 1que Regina se lo creyera.
—Seras tu perrito.
Todos los miraron, dependían de el.
—Evie murió esta mañana. Ya sabe ayer fue lunes y los Lunes pasa el camión de la basura de Auradon. Usted conoce a Evie, y bueno ella camino hasta el camión, le conto su historia a el señor y se la llevaron.
Mal lo miró, demonios lo estaba haciendo tan bien que de solo pensarlo le dieron ganas de llorar.
—¿Y como saben que murio?.
—Bueno trajeron su corazón.
Regina lo tomó, y con ella un par de prendas azules. Salió de allí sin decir nada, y dandole una ultima vista al grupo.
—¡Carlos eso fue asombroso!.
—Gracias.
—¿De quien era el corazón? 
—No tengo idea.
—¡Chicos!— Gritó Malefica.
—¿Que pasó con Evie?— Preguntó Mal asustada.
—Necesita su ayuda.
La pandilla de VKS salió corriendo hasta la torre del dragón, Evie temblaba de miedo, y gritaba de dolor con pausas de cinco minutos.
—E— La llamó Mal acomodándose para que Evie pudiera acostarse sobre ella.
—¿Que le paso señora Malefica?— Pregunto Harry, mirando a Mal y Evie, todos lo notaron. Se miraban como todas las personas que sus padres intentaron asesinar se miraron.
—Nos preocupamos tanto por Regina que nos olvidamos de Hans.
Harry, Carlos y Jay salieron corriendo de allí, irian a darle su merecido aunque fuera lo último que hicieran.
Uma y Malefica también salieron de la habitación, Mal agradeció eso en sus adentros mientras acariciaba la espalda de Evie.
—Mal...
—¿Sí?.
—¿Por qué me proteges tanto?.
—Primero que todo porque se lo buena que eres con todos, y se lo horrible que es lo que esta pasandote. Y segundo porque me importas.
—Creí que no te importaban los demas.
—Sí, pero tu no eres como los demás.
—¿Mal?.
—¿Sí?
—¿Crees que sere una buena madre?.
—Creeme, seras la mejor mamá del mundo.
—¿Lo sere?.
—Sí.
Mal beso los labios de la peli-azul sin querer, sorprendida Evie le siguio el beso sin estar muy segura de lo que estaba pasando.
—¿Que fue eso?— Preguntó la princesa cuando se separaron.
—Un beso.
—Eso lo sé. Pero, ¿Por qué?.
—Mamá dice que es la forma de demostrar amor.
—¿Me amas?.
—Eso creo.
Meses después
—Es hermoso Evie.
—Gracias M— Menciono Evie cargando al pequeño.
—Denada princesa.

[...]

—¡Ahora cuentenos como naci yo!— Pidió Celeste (5).
—¡No! Como llegaron a rudon— Pidió Taylor (3).
—Mejor ahora no cuenten nada, es tarde— Comentó bostezando Oliver (10).
—Sí, estoy cansada. Mejor mañana.
—Adios mamás adios manito— Saludó Taylor besando el vientre de Evie.