one shots descendientes

55. Mevie

𝐖𝐞 𝐜𝐚𝐧'𝐭 𝐦𝐞𝐞𝐭 𝐢𝐧 𝐭𝐡𝐞 𝐬𝐩𝐚𝐜𝐞 𝐛𝐞𝐭𝐰𝐞𝐞𝐧

[Situada diez años después de d2]

Evie observaba a la isla con algo de nostalgia, su mejor amiga, si es que aún podía decirle así, vivía allí desde hace diez años, se vieron al principio unos meses, pero luego dejaron de verse. Una de las razones fue que Evie fue abusada y dejada en embarazo por Chad, y para que no le saquen al bebé tuvo que estar en un matrimonio durante dos años con Ben luego de eso se separaron  aunque siguen viviendo en el castillo Evie y sus cuatro, casi siete hijos.
—¿Y si vas?
—¿Y si voy y la paso mal?
—¿Y si lo intentas?.
—Hey B... ¿Evie?
Evie palidecio al pararse y encontrarse a Mal, Ben las miro a ambas las orbes de Mal tenían un color verde brillante, como si fueran a salirse de sus cuencas.
—Saben que, dejare que hablen.
Ben huyó de Mal, ambas se miraron, Evie temblaba de miedo, y por dentro el miedo la estaba lastimando, sabian que Mal podía volver pero creyeron que para ese entonces serían lo suficientemente viejos y no deberían darle explicaciones.
—¿Te casaste con Ben?.
—Sí.
—Wow, ya veo cual era el espacio entre medio de ambas.
—No fue como piensas.
—¡Mamá!— Exclamó un niño de diez años, con su hermana tras el, el pequeño era un calvo de Ben. —Papi Ben no está y prometió llevarnos a la isla hoy.
—Te dije mil veces que solo puedes decir papi Ben cuando estás con el.
—Bien, Vamos Isabella, mama no va a ayudarnos.
Evie revoleó los ojos, clavando estos en Mal apenas los niños se fueron.
—Chad.
—¿Qué?
—Es el padre.
—Ah. Felicitaciones
—Gracias.
—¿Y los demás si son hijos de Ben?.
—No. Son hijos de Alí, solo estamos juntos por sexo y para que pueda agrandar la familia.
—¿Acaso Ben no te satisface lo suficiente o tienes que sacar el novio a otra persona?.
—Ben yo nos casamos y s los diez años nos divorciamos, si no lo hacían iban a separarme de Jude.
—¿Saben de mi?
—Sí.
—¿Me tienes miedo?
Evie no respondió y eso bastó para Mal, quien agarró sus cosas y huyo de allí.
—Wow, ¿Que paso entre ustedes?— Preguntó Carlos al entrar con el pequeño James dormido en brazos.
—No nos encontramos en el espacio entre medio.— Respondió cargando al niño, y acostandolo en su cama.
—¿Y como lo llevas?.
—Hace diez años que no nos hablamos, el hecho de que este aquí no va a cambiar las cosas— Mintió mientras su voz se quebraba al decirlo.
—Chiquita..— Susurró Carlos abrazandola y recargandola en el.
—¿Recuerdas que la llamamos cuando Jude nació?.
—Si sobre eso... el hada madrina no la llamo.
—¿QUE?— Gritó Evie, llamando la atención de la expareja real que se encontraba hablando en la sala de al lado.
—Si mal venía se iban a enterar que lo del casamiento fue falso.
—¡Carlos! ¿Por qué no me dijiste?.
—No podiamos hacerlo, el hada madrina amenazó a todos— Explicó Harry, con Isabella en su espalda, dormida.
Carlos cargo a la pequeña y la llevo a acostar.
—Lo importante es esto; ¿quieres arreglar las cosas con Mal o no?
—Sí, pero tengo miedo.
—Evie... ¿Podemos hablar?— Preguntó Mal —A solas. —Agregó mirando al grupo, Evie asintió y los demás las dejaron solas.
—Creí que si te habían llamado.
—En realidad lo hicieron, pero fue después de que nació. Adam dijo que lo mejor seria que no viniera, y aunque quería hacerlo sabia que era lo mejor para ambos.
—¿Y por qué decidiste volver?.
—La isla está muy sola sin ustedes y adem...
—¡Mamá nos olvidaste en la isla!— Exclamó una niña de siete años, con su hermano gateando junto a ella.
—Dime que no lo trajiste así todo el camino.
—No idiota, yo los traje.— Dijo y agregó —Hola Evie.
—Hola Anthony. ¿Como has estado?.
—Bien, veo que formaste tu familia. Por cierto supe lo de Chad, Dizzy lo dijo la última vez que vino antes de...
—El accidente, lo lamento mucho.
—Igual yo, ustedes dos eran muy cercanas y supongo que fue de gran ayuda cuando Mal y tu dejaron de verse.
—Lo fue, ambas eran mi soporte y perder a una y a los dos meses perder a la otra fue muy doloroso. Volviendo a lo de Chad, al principio fue dificil pero luego lo metieron preso y... estoy bien con eso.
Mal los miraba, esperaba que Evie dijera algo más sabia que ella y Anthony habían sido muy cercanos, tal vez demasiado.
—Ya sabes, a los Mills siempre nos lastiman— Rió con algo de dolor, Anthony asintió mirando a la oji-verde.
—Bueno, ¿saben que pequeños demonios?
—¿Qué?— Preguntó Efie, tomando algo disimuladamente del escritorio de la peli-azul.
—Deja eso te vi— Gruñó Anthony, la niña suspiró mientras el pelirrojo cargaba a Benja.
—¿Nos vamos?.
—Si, tengo que hablar con alguien vengan conmigo.
Evie los vio irse y el pelirrojo cerró la puerta.
—¿Es el padre?.
—Algo así, en realidad fue para sasear el deseo y bueno pasaron cosas.
—Felicitaciones.
—Gracias, e igualmente.
—Gracias.
—Entonces tienes a Jude, Isabella, James y...
—Lila, esta con Audrey en su casa y los gemelos... que estoy esperando.
Mal asintió.
—Lamento lo de Dizzy.
Evie sonrió a medias, la sonrisa se esfumó rápidamente y la primera lagrina rodó por su mejilla.
—Te necesite mucho— Sollozó, Mal la miró. —Fueron dos años muy duros, me prohibieron salir porque tenían que si lo hacía me iría a la isla, estuvieron dos años para meter a Chad preso y ni siquiera pude despedirme de Dizzy. ¡Esta muerta! No es que vaya a revivirla o algo— Sollozó, Mal la abrazó.
Evie se sentía segura, porque Mal era su lugar seguro, y ahora Evie estaba a salvo.
—¿Quieres que te acompañe?
—¿A donde?.
—Al cementerio— Pregunto secando las lagrimas de Evie.
—¿Harias eso?.
Mal asintió, y ambas abrieron la puerta de la habitación encontrando a los vks.
Evie rió apenas.
—Esta en el cementerio de Auradon, ¿Sabes cómo llegar?— Preguntó Gil.
—Sí, fui a acompañar a Ben ahí una vez.
—Cuidaremos a los niños.
Mal y Evie abandonaron el castillo, ambas subieron al auto y cerraron la puerta, Evie miro por la ventana y dejo que una lagrima cayera, porque debía llorar lo que no había llorado en diez años, Mal tomo su mano y las entrelazo.
—¿Estas lista?
—No, pero es el momento.
La oji-miel bajo del auto, y junto a ella Mal, ambas buscaron la tumba de Dizzy, y ambas se sentaron junto a esta al encontrarla.
—Gracias por todo, Mal.
—Te amo E.