Siempre has sido tú © [BT#2] ✓

▪︎Capítulo 14▪︎

MIA MCQUEEN

— ¿Rachel?

Ella se saca las gafas, mierda, ella tuvo que haber estado llorado como mínimo todo el día para que sus ojos estén tan hinchados y rojos, la punta de su nariz rojiza brilla un poco.

—Hola ¿Puedo pasar, por favor? —pregunta.

—Sí, claro —respondo dudosa.

Me hago a un lado y ella entra yendo directamente al salón donde yo la seguí, no la esperaba, ni siquiera me imaginé que viniera hacia aquí, ni siquiera sabía dónde vivo, claramente le tuvo que haber preguntado a Travis, o quizás Aarón.

—Voy a ser directa —dice sentándose en el sofá y poniendo su bolso a un lado — ¿Aarón está aquí?

Negué.

—No.

— ¿Paso la noche aquí?

Me afirmé del sofá suspirando.

Hay niña te haces daño sola.

—Sí.

Sus ojos llenos de lágrimas dieron con los míos.

— ¿Cómo pudieron...? —su voz se corta.

—No, él solo durmió aquí, no pasó nada —aclaré.

Ella llora y yo no sé qué hacer. Nunca he servido mucho para consolar a la gente.

—Pero —solloza.

—Rachel, ponme atención, él durmió y baño aquí en la mañana, luego llamamos a los chicos, él entretuvo un rato con Joshua y luego se fue hacia la empresa.

Se seca las lágrimas.

—Yo no quiero que me deje, mi osito se está distanciando de mí.

¿Acaso no tiene amigas? No quiero sonar insensible, pero me jode que me venga hablar a mí de él cuando debería decirle las cosas a la cara, además que le diga osito hace que se me suba bilis y no le quiero vomitar encima.

—Rachel, porque mejor no vas a la empresa y hablas con él —propuse.

—No, no puedo —solloza —Es que él nunca llegó hoy a la empresa.

Lo que dice me deja pasmada y con la mente en blanco, la cual se llena de preguntas malas ¿Qué sucede si fue a follar, él estuvo caliente todo el tiempo en la noche? Quizás necesitaba descargar las ganas. Mierda, joder, de putas ¿Dónde mierdas estás imbécil?

—Mía — miré a Rachel — ¿Sabes adonde pudo ir?

Negué.

—Él durmió aquí, en la mañana se bañó y hablamos con Ian y Bárbara, luego el jugo con Joshua un rato y se fue —volví a decir para que le quedara claro

Ella asintió desviando la mirada a la ventana.

—Tengo miedo que tenga a otra, anoche, supe que él fue a la prisión, pero no después lo llame y no me respondía, también le envié mensajes —dice con tristeza.

—Tal vez esté ocupado, William estaba mal y ahora este haciendo trámites.

— ¿Te contó sobre su papá? —cuestiona sorprendida, pero sin perder su tristeza.

—Sí ¿Qué tiene de malo? —inquirí.

No le veía nada de malo a que él me contara eso, ahora somos conocidos, casi amigos y él anoche, necesitaba desahogarse con alguien y acudió a mí.

—Es que él no le cuenta a nadie de su papá.

—Mmm, tú sabes que con Aarón nos conocemos de antes, es algo obvio que yo ya sabía.