"SILLA DE RUEDAS" [KOOKMIN]

023

En esta ocasión me encuentraba en el parque con Kookie, él estaba a lado mío caminando mientas hablaba con alguien por mensaje.

—¿Con quien hablas?

Pregunté y el respondió sin quitar la vista del célular.

—Es una chica que conocí cuando salí de compras, ella fue la que me llevó a la academia.

No comenté nada ya que se me hacia algo extraño pero mejor dejé de pensar en eso y me concentré en los ricos churros que habíamos visto la última vez que vinimos.

—Kookie deja eso~ no has despegado la cara del celular desde que salimos de mi casa.

Le reproché de una manera tierna ya que sabía que le gustaba que lo fuera.

—Lo siento bebe, solo terminé de enviar esto..

Terminó de escribir el mensaje, lo envió y lo guardó en su chaqueta.

—Listo soy todo tuyo.

Yo sonreí complacido.

—Muy bien, esperame aquí mientras yo voy a comprar los churros y un poco de chocalete caliente.

Se quitó su chaqueta de cuero y me la puso en mis hombros yo me negué ya que hacía algo de frío y no quería que se enfermara.

—Tranquilo tengo algo de ropa extra debajo y tu solo un delgado suerter.

—No tengo frio.

—Bueno esa naricita roja tuya me dice lo contrario.

Explicó dando un pequeño toque a mi naricita yo hice bizcos en un tonto intento de verla.

–Ahorita regreso.

Lo vi alejarse y sonreí tontamente ya que me había enamorado del estúpido chico que cayó sobre mi en calzoncillos el primero día de clases y ¡¿como no hacerlo!? Si era tan guapo y a pesar de ser algo torpe es muy lindo conmigo, no pueden culparme.

Yo seguí en mi hermosa burbuja de sueños hasta que sentí vibrar la bolsa derecha de la chaqueta de Kookie. Como me quedaba muy grande y las mangas no estaban a mi favor, muy concentrado intenté encontrarlo y sin darme cuenta saqué un poco me lenguita como si eso me ayudara.

—¡Aquí esta!

Rápidamente se prendió dejando ver unos mensajes de una chica llamada Suni.

Suni:
Te gustaría salir conmigo esta noche?

Apareció en la pantalla y para ser sincero me molesté un poco. ¿Quién era para invitar a mi Kookie a salir en la noche?

Yo seguí viendo su celular un poco inquieto y enojado, las ganas de desbloquearlo fueron muy tentadoras pero era su privacidad y no podía interrumpir en ella.

—¿Por qué esa carita?, pareces un gatito muy enfadado.

Preguntó de repente Jungkook dando un salto del susto, alcé mi mirada y vi que traía una bandeja con la comida.

—¿Por qué tienes mi celular?

El tono de su voz cambió a uno tosco y me asustó

—Yo lo siento, te llegó un mensaje y quería ver quién es.. Pero te juro que no lo desbloqueé, ¡yo no hago eso!

Rápidamente le tendí el celular y el puso las cosas en la mesa donde me había dejado y lo tomó

El aún con su rostro algo enojado leyó el mensaje y respondió.