El Hijo De La Luna ||Vkook Libro #1||

✧12: ¿Rescate?

— ¡Han secuestrado al hijo del Dios del Sol!

Los murmureos de las Deidades invitadas no se hicieron esperar al ver que por la gran puerta del salón principal Kim Taehee, el Supremo Dios del Sol había cruzado por ella, agitado y con los colores rojos en su cara en señales de ira.

El Emperador Celestial mantuvo su semblante serio que tanto lo caracterizaba, observando como la Deidad recién llegada caminaba a paso rápido hacía él, arrodillándose en medio del salón suplicando su ayuda.

Por primera vez en cientos de años, Kim Taehee dejaba de lado su orgullo para suplicar la ayuda del Clan Celestial para así poder salvar a su único hijo. Ese niño revoltoso que ha estado cuidando desde las sombras, llevándolo de vuelta a casa cuando se emborrachaba por beber más de la cuenta. Sin duda, Chaerin y él habían traído al mundo al retoño más valioso de todos los Reinos.

Jeon Jungkook se levantó en asombro, colocándose frente a su padre arrodillándose igual mente, con el corazón en la boca por tan impactante noticia. La multitud de Deidades de alto rango no paraban de murmurar cosas a sus espaldas.

— ¿Dios del Sol tiene un hijo?

— ¿No estaba comprometido con la Diosa de las Nubes?

— Escuché que el Dios de la Noche es hijo de Afrodita.

— ¿Por qué ocultar que tiene un hijo?

— ¡Silencio! —Gruñó Jeon Junghyuk, el emperador celestial— Todos son Deidades de alto rango. Compórtense como tal en mi Palacio Celestial.

— Jeon, te lo suplico, ayúdame a encontrar a mi hijo —Kim Taehee pegó la frente al suelo en una clara señal de reverencia— Es lo único que Chaerin nos ha dejado en el mundo celestial.

— Padre, por favor —Jungkook imitó la reverencia de la Deidad.

Jeon Junghyuk soltó un suspiro cansino tomando a ambos inmortales del brazo para que se levantasen.

— Señor Celestial, debemos investigar este caso —Intervino el Dios del Fuego, Min Yoongi, a su derecha como parte del consejo celestial. — La desaparición de un próximo Monarca no es algo que debamos tomar a la ligera.

— El Supremo Dios Min tiene razón. —Concordó Jiyong — Permita la investigación. El Dios de la Noche es joven aún, no podemos arriesgarnos a perderlo.

— Padre, pido permiso para comenzar una investigación —El Dios del Viento se inclinó en una reverencia— El Alto Inmortal Kim es un gran compañero de trabajo de mi madre, no me gustaría que la Gran Diosa Lunar se preocupara si no ve salir la noche. —Pidió y con los ojos suplico a su madre que le ayudara.

— Señor Celestial, permita que nuestro hijo investigue —Suplicó Jeon Suihee, preocupada.— Chaerin y yo hemos sido amigas incluso antes de que los rayos fueran testigos de nuestro poder inmortal.

El Emperador Celestial asintió ante el pedido de su esposa, anunciando la investigación que se llevaría a cabo. Kim Taehee agradeció de mil maneras por permitir la búsqueda de su hijo e incluso prometió que retribuiría la amabilidad del Clan Celestial.

— No tienes que agradecer nada, Dios del Sol —Dijo Jeon Junghyuk con frialdad— Chaerin nunca querría ver que su retoño desapareció sin aviso alguno.

— Lo encontraré a como de lugar, Gran Dios.

— Bien, ya que hemos obtenido el permiso, Deidad del Sol acompáñeme a la sala de interrogación —Taehee asintió ante las palabras del Dios del Fuego, retirándose ambos del banquete de cumpleaños.