✵22: Traición.

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— ¿Qué crees que estás haciendo?

— Hago lo que hace más de un milenio debió suceder.

Los demonios eran lujuriosos y pecaminosos, pero, en ese momento fue lo que menos le importó a Soobin al encontrarse acorralado en la cama de piedra por nada más y nada menos que Yeonjun, su último y cuarto hermano.

¿Cuarto hermano? ¡Blasfemia! solo compartían al mismo padre.

— ¿Por qué te resistes? ¿A caso no ves que ese inmortal nunca te dará su atención?

— ¡Cállate!

— ¡Abre los ojos, tercer hermano! —Y esa, era la primera vez que Yeonjun lo llamaba de esa forma, esa manera tan peculiar que solía ocupar para dirigirse a los hermanos de la familia real del Reino Demonio, esa manera en la que debía dirigirse a él desde hace milenios,  pero que, simplemente nunca quiso hacer para no aceptar su cruda realidad. Soobin, abrió los ojos como platos al haber sido llamado "hermano" frunciendo inmediatamente el ceño. Puede que hubiera un poco de razón en lo que el menor le estaba diciendo pero conociendo su personalidad, era más que obvio que era un terco de primera.

Y como si de un muñeco se tratase, el demonio mayor lo tomó de las muñecas asumiendo el control del asunto, posando el pequeño cuerpo de su medio-hermano bajo el suyo sin llegar a aplastarlo, sin embargo, éste mantenía cierta distancia entre sus rostros. Viajando desde sus ojos hasta esos carnosos y gruesos labios, negando lentamente el deseo de poder besarlos.

Un deseo que lo comía por dentro.

El más pequeño sintió sus mejillas se encendidas, producto de la vergüenza por lo que estaban haciendo a tan altas horas de la noche, mientras, los ojos del mayor no paraban de devorarlo como un depredador, él, se sentía tan expuesto por primera vez en su vida.

— ¿Por qué haces esto? —La pregunta de su tercer hermano mayor lo desconcertaba, ¿acaso él no sabía que lo habían arrojado a tierras celestiales por culpa del primer hermano?

— Todo esto lo hago por ti.

— Tienes razón, Taehyung y yo nunca podremos estar juntos. El Clan Celestial y el Clan Demonio no pueden mezclarse.

*

Supongo que somos desafortunados.

Podría decirse. —lo escuchó reírse antes de tomar el licor de la jarra de cristal. Una maravillosa melodía que acataba su oído, simplemente magnifica.

Una vez más, Soobin estaba seguro de lo que sentía.

¿Puedo preguntarle a Su alteza el Dios de la Noche que tal está el Señor Jeon?

Soobin pudo apreciar el ligero brillo que se encendió en aquellos ojos grisáceos, una hermosa sonrisa adornaba el rostro del moreno. Taehyung no parecía querer disimular todo el amor que le tenía al inmortal más importante del Reino Celestial. Por un momento, recordó a esa Diosa de cabellos rojos que estaba pintada en el estudio de su padre, eran tan parecidos, ¿podría ser qué....?

No, no podía ser cierto.

El Demonio negó varias veces con la cabeza tratando de despejarse, sintiéndose destrozado por dentro al saber que no tendría ni siquiera una pizca de esperanza de estar con el pelinegro que era cliente habitual en sus sueños. Ese inmortal, encargado de traer la oscura y bendecida noche con sus infinitas estrellas, podría incluso mencionar que era muy parecido a su alma gemela, pero no se encontraba en el lugar para decirlo, simplemente se dio por vencido.

El Hijo De La Luna ||Vkook Libro #1||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora