Survive (Daryl Dixon)

XXXIV

Un mes después.

Narra Bárbara:

Había pasado alrededor de un mes desde aquel día en el que Glenn me contó que se casaría con Maggie y desde que Daryl y yo pintamos la pared de mi celda.
Desde entonces, las cosas han ido excelente en la prisión y todos colaboramos para crear un mejor hogar.

Tengo una buena relación con la gente de Woodbury y una aún mejor con los que ya estábamos en la prisión. Sobretodo con Daryl. En las últimas semanas nos hemos hecho bastante unidos y me agrada pasar tiempo con el cazador.

Ahora mismo, me encuentro con Carol en el comedor al aire libre, fuera del pabellón. Hablábamos un poco de todo hasta que vemos a Daryl caminar hacia nosotras, con un plato en su mano.

- Buenos días, Daryl. - le saluda el doctor Caleb.

- ¿Qué tal, Dr. S?

Carol y yo nos miramos y reímos un poco cuando escuchamos como todos comienzan a saludar a Dixon.

- Para que conste, nosotras te quisimos primero. - dice Carol y niego con la cabeza sonriendo.

- Cállate. - le responde él.

En ese momento, Patrick, un adolescente un par de años mayor que Carl, se acerca impresionado al ver al hombre a mi lado.

- ¿Sr. Dixon? - pregunta, captando la atención del nombrado. - Quería agradecerle por el venado que trajo ayer. Sería un honor estrecharle la mano.

Daryl me mira y le hago un gesto con mi cabeza para que acepte la mano del chico. Él asiente pero antes lame tres de sus dedos, para recién estrechar la mano de Patrick, quien con gusto la recibe.

- Venía a buscarte. - me dice Dixon sujetando mi brazo y apartándome un poco. - Saldremos enseguida.

- Claro, vamos. - le digo tomando mi látigo y mi arma del asiento cerca de mí.

Ambos comenzamos a caminar hacia donde están los autos, en donde Glenn ya se encuentra, y al llegar guardamos en el baúl las cosas necesarias.
Uno de los chicos de Woodbury aparece y nos ayuda, hasta que Beth se acerca a él y se abrazan. Si, ambos comenzaron una relación.

- Es como una maldita novela romántica. - me dice Daryl observando a los chicos, yo ruedo los ojos y empujo su hombro.

Sasha y Tyreese nos saludan, acercándose, ya que también irán con nosotros. El recién llegado, Bob, aparece junto a nosotros e insiste en acompañarnos.
Cuando tenemos todo listo, subo a uno de los autos en el asiento del piloto, Glenn sube al otro, y Dixon en su motocicleta, los demás se dividen entre los autos y nos dirigimos hacia la entrada, por donde vemos a Michonne ingresar.

- Miren quien volvió. - menciona Dixon.

Michonne nos saluda y nos comenta que no encontró rastro alguno del Gobernador.
En las últimas semanas, los tres hemos estado tratando de averiguar algo sobre él, como en dónde se encuentra o si sigue vivo siquiera.
La mujer decide acompañarnos y se sube a mi auto, en el asiento del acompañante.
Durante el camino, ambas conversabamos acerca del paradero de Philip. No puede estar tan lejos, y si está oculto es porque algo planea.

Una vez llegamos, bajamos de los vehículos para acercarnos a la gran edificación comercial.
Nos separamos en dos grupos, y el nuestro se encargó de asegurar que la entrada era segura.
Daryo golpeó un poco la vitrina de vidrio, y se sentó en el borde a esperar.

- Creo que ya sé. - dice el novio de Beth.

Michonne y yo nos miramos confundidas.

- ¿Qué sabes? - le pregunto.