- ¿Por qué estás tan mojada?- pregunta con cierta irritación una vez que ambos estamos en el carro-. Deja de mojar todo.
- ¡Yo no controlo el clima, genio!- respondo-. No sé si lo notaste, pero empezó a llover mientras estábamos en la calle. No es mi culpa que esté empapada.
-Te dije que el cielo se estaba nublando- gira la cabeza tan rápido que las gotas que recorren su cabello quedan en mi cara. Ahogo un grito de sorpresa mientras limpio el agua de mi cara.
-El cielo se nubla todo el tiempo y no llueve- me defiendo.
- Aquí si el cielo se nubla es porque va a llover. Pudimos evitar todo esto- nos señala con su mano-. Si me hubieras hecho caso y nos hubiéramos ido en vez de estar esperando en la fila por una nieve.
- ¿Tengo que recordarte que fuiste tú quien quiso ir a ese lugar por la nieve?- me cruzo de brazos-. No es mi culpa que esté en medio de Central Park.
-Si me hubieras escuchado no tendríamos que haber corrido debajo de la lluvia por minutos y llenarnos de lodo- reprocha.
Suspiro recargando mi cabeza en la ventana. Jayden tiene razón. Si nos hubiéramos ido cuando dijo no estaríamos en esta situación.
-Perdón- digo con sinceridad-. Tienes razón y lo siento. En Monterrey si se nubla es muy raro que llueva- explico-. Supuse que pasaba lo mismo aquí, perdón.
Mis palabras parecen tomarlo desprevenido porque sus ojos me miran con sorpresa-. ¿Te estás disculpando?
-Sé que fue mi error- lo miro a los ojos-. lo correcto es disculparme. No es para tanto. No te lo esperabas, ¿eh?- pregunto cuando su respuesta no viene.
-Sinceramente, no- ríe, pasando sus manos por su cabello.
-Soy buena sorprendiendo a la gente. Es una de mis cualidades.
-Una de las pocas- me molesta.
-Púdrete.
- ¿Qué hacemos ahora?
- ¿Puedes llevarme a mi hotel?- me abrazo a mí misma-. Supongo que ya no debemos de pasar el día juntos. Todas las actividades que planeó Ethan son al aire libre.
Me quedo esperando una respuesta que no llega. O no me escucho o me ignoro, conociendo a Jayden, la segunda opción es la correcta. Me volteo a mirarlo para repetir que me lleve al hotel , pero me topo con que está buscando algo en el asiento trasero.
- ¿Qué haces?- pregunto, confundida por lo que está tratando de hacer.
El no dice absolutamente nada, solo me entrega la chaqueta que utilicé para cubrirnos de los paparazi-. Tu ropa- es la única explicación que ofrece.
Analizo sus palabras y de repente soy consciente de cómo la blusa se pega a cada parte de torso. Sin dudarlo, tomo la chaqueta de sus manos para ponérmela y poder cubrirme-. Gracias.
-No hay problema- mira para otro lado.
-¿Podrías llevarme al hotel?- intento de nuevo-. Se nota que no va a dejar de llover en un rato, al menos que quieras quedarte aquí hasta que todo pare, creo que lo mejor es terminar el paseo.
-Me parece bien.
Me levanto un poco del asiento para poder sacar mi celular y la llave del hotel de mi bolsillo trasero del short cuando me doy cuenta de mi pequeño problema.
¿Cómo pude ser tan tonta?
-Mierda.
-Eso si lo entendí- dice Jayden pasándose las manos por su cabello.
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La chica de los libros (En edición)
RomanceIsabel Trejo ama leer y eso no es secreto, toda su familia y amigos lo saben. Su amor por la lectura es tanto que decidió crear un canal de YouTube para poder compartir las maravillosas historias que lee cada día. Al comenzar su canal en Booktube el...