-Dijiste que ibas a comprar dos libros- me reclama Ela.
-Y tú me dijiste que ibas a comprar uno.
-Claro que no- susurra.
-Tengo pruebas- digo, intentando sacar el celular para enseñarle los mensajes de hace unas horas.
-No te atrevas a usar esos mensajes en mi contra- dice mientras se ajusta los lentes negros.
Su cabello café está recogido en una cebolla y trae un gorro rojo. Lo necesario para que la gente no descubra que la gran Ella Parker está comprando libros a su lado.
Tres horas es lo que nos tardamos en la librería. Nos tomamos nuestro tiempo para recorrer cada pasillo y leer cada sinopsis de cada libro que nos llamaba la atención. Aún estoy sorprendida de que nadie notara quien estaba a mi lado. Supongo que cuando tienes semejante cantidad de historias para perderte en ellas, lo demás se vuelve secundario, hasta quien esta a tu alrededor. Hablo por experiencia.
Nos subimos a la camioneta negra que nos lleva a todas partes cuando ocupamos salir del set en algún día de trabajo. Vidrios negros, pero asientos blancos como la leche. Eso me tomó con la guardia baja la primera vez que vi el interior del vehículo. Este tipo de camioneta es segura, está diseñada para proteger a quienes vayan adentro, pero en cada semáforo la gente hace hasta lo imposible por adivinar que artista, político o deportista se encuentra en el interior.
Discreta no es.
-Señorita Parker, su celular no ha dejado de sonar desde que se bajó- nos informa James, el guarda espaldas de Ella.
- ¿Quién era, James?
-La señorita Evangeline- dice, sin despegar su vista de la calle-. Le informé que no iba a poder responder a su llamada en unas horas y que usted iba a contactarse con ella cuando pudiera. Espero no le moleste.
¿Evangeline?
Hago lo mejor que puedo para mantener mi emoción raya. Estoy trabajando con famosos que conocen otros famosos, obviamente Ela conoce a Evangeline, Jayden también lo hace; ellos dos protagonizaron la que fue catalogada la mejor película de amor/drama del año pasado. No me sorprendería si los demás la conocieran y tuvieran una amistad con ella también.
-Para nada. Muchas gracias, James- Ela saca los libros de la bolsa y comienza a hojearlos.
Yo haría lo mismo si la emoción no recorriera cada parte de mi cuerpo.
James nos da una mirada rápida por el retrovisor, sus ojos miel posándose en mí antes de mirar a Ela.
- ¿De regreso al set?
-Por favor- responde Ella.
No lo contengo más y pregunto.
-¿Evangeline Swan?- finjo mostrar desinterés, pero no soy actriz y fallo terriblemente.
-Ella misma- me mira-. ¿Eres fan?
-Me gusta su trabajo.
No sé como soy capaz de hablar en un tono de voz normal.
- ¿Quieres que le pida algo? ¿Una foto o que te envíe un video?- en su mirada no hay ni una pisca de broma.
-No- respondo-. Bueno, tal vez.
-En ese caso- me sonríe-, Puedes esperar y pedirle la foto tú misma. Va a venir el próximo mes, a mediados de Julio.
Un pequeño grito sale de mi garganta. Ela ríe por mi reacción. Falta más de un mes para la fecha que mencionó Ela y yo ya estoy muriendo de nervios. Los odio, pensé que no los iba a volver a sentir en todo el verano, pero parece que estaba equivocada.
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La chica de los libros (En edición)
RomansaIsabel Trejo ama leer y eso no es secreto, toda su familia y amigos lo saben. Su amor por la lectura es tanto que decidió crear un canal de YouTube para poder compartir las maravillosas historias que lee cada día. Al comenzar su canal en Booktube el...