Jasper la miró con completa fascinación, era una criatura imperfecta, tan extraña como él, pudo ver desde lejos la vitalidad con la que sus mejillas se sonrojaron cuando lo descubrió observándola.
Jasper, había encontrado a su Tua Cantante.
Jasper...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
JASPER POV
Supongo que mi rostro dejó clara mi confusión y un poco quizá de temor a no saber de quienes estábamos hablando. Claro que había escuchado a Jasper hablar de Esme, que si bien entendí, era como una madre para todos y que era un amor de ser, pero no sabía nada de su pareja, el tal Carlisle, ¿sería igual de amable?.
— Alina, no tienes porque preocuparte. Son mis padres adoptivos quienes llegarán. — dijo lentamente y mirando mi reacción.
— ¿Ellos no saben que estás con una humana, o si? — dije apenada por preguntar aquello y verme tan tonta. porque al final de todo ¿qué éramos, él y yo?
— No. Se sorprenderán mucho, debes entender que mis antecedentes han dejado a mis padres muy decepcionados, quizá. — dijo con congoja.
— No creo que los hayas decepcionado, tú mismo has dicho que eres más nuevo que todos ellos en esto... — busqué consolarlo. — Y no quiero presionar las cosas, ni ponerlas tensas. Quizá sea mejor que me vaya. — Me levanté de la cama, aún con el corazón revuelto.
— Alina... — un parpadeo le tomó para ponerse frente a mí. Llevó su mano a mi mejilla y me acurruque contra su helado tacto. — Quédate, por favor. — sus palabras fueron suaves.
No me contuve ni un segundo más y me abracé a su cuerpo, pegué mi cabeza a su pecho, me sentí un poco traicionada por mi instinto al no escuchar nada, es como si hubiera un hueco allí. No había latido. Después de unos minutos, levanté la cabeza y busqué su rostro, él me miró fijamente, con esos ojos dorados perfectos y una sonrisa tan cálida que no cabía en mi mente pensar que fuera un ser desalmado. Él colocó sus manos alrededor de mi cara y me acercó a él para besarme. Sus labios fríos rozaron los míos, provocando en mi cuerpo un escalofrío. Ambos reímos, ahí justo ahí supe que estaba enamorada de Jasper.
Unos momentos más tarde, pude escuchar un auto aparcado frente a la enorme y hermosa casa, ambos nos dedicamos una mirada y supimos que él momento había llegado. Realmente estaba nerviosa y si todo salía de control, pensaba en esconderme como toda una gallina humana que era, tras de Jasper. Bajamos a la sala y cuando bajaba el último escalón, allí estaban dos nuevas figuras frente a mí. Me quedé petrificada, Jasper se dió cuenta y apretó despacio mi mano, que llevaba sujeta.
— ¡Esme, Carlisle! — soltó con total alegría.
— Hijo... — la mujer giró sobre sus talones y se dejó ir sobre él. Jasper me soltó y sentí pánico escénico. Se abrazaron por unos segundos. — Querido, me alegra tanto verte de nuevo.
— Hijo, que bueno que estás aquí. — el hombre rubio hermoso, le dió un fuerte apretón de mano y le abrazó.
Entonces hubo un breve silencio, Rosalie y el hulk me miraron, la tensión creció y sentí como me temblaban las piernas. Aposté a que seguro escuchaban mis dientes castañean.
