three: i said no

2.9K 142 2
                                    

- Pasa. —Contestó Hailey escuchando cómo alguien tocaba la puerta

- ¿Porque tienes esto? —Preguntó Eduardo con algo en su mano

- Oye, ¿Que haces merodeando en mis cosas? —Preguntó arrebatando lo que Eduardo tenía

- ¿Porque lo tienes? —Preguntó nuevamente

- Es para un amigo, es todo. —Contesto bajando la mirada

- Ander, ¿cierto? —Preguntó sentándose en la cama de Hailey

- ¿Como lo sabes? —Preguntó levantándose de su escritorio, para sentarse junto a Eduardo

- El es mi amigo también, Hailey. Además, se le callo uno frente a mi en el baño. —Contestó bajando la mirada

- ¿Que te pasa? Desde que llegamos estás muy callado. —Preguntó

- E estado recordando, ver a Esteban hoy y tan cerca me hizo recordar el año pasado. —Contestó mientras miraba una foto de Valeria que estaba en el escritorio de Hailey

- Aun sigo teniendo pesadillas de solo recordarlo a él, o de recordar el negocio. —Dijo mirando hacia la nada

- ¿No sabes nada del negocio? —Preguntó dirigiendo su mirada a Hailey

- ¿No sabes? —Preguntó algo extrañada— Papá volvió a abrirlo, hace unas semanas.

- No te creo, ¿Cómo? ¿Cómo lo sabes? —Preguntó comenzando a temblar

- Lo escuche hablando con varios socios, poniéndose de acuerdo para cambiar la ubicación del negocio. También entre a su oficina, y encontré fotos de las chicas que lograron tomar antes de que escaparan. —Contestó mientras sus ojos comenzaban a llenarse de lágrimas— Y también, lo escuche hablando de buscar nuevos empleados y empleadas. Y no vas a creer lo que dijo.

- ¿Que dijo? —Preguntó con una voz temblorosa

- Dijo nuestros nombres, y que íbamos a recibir lo que merecíamos por dañar el negocio el año pasado. —Dijo comenzando a llorar muy histérica— Eduardo, vamos a volver a ese infierno.

- No, no, no puede ser. —Dijo comenzando a llorar

- Tengo mucho miedo, Eduardo. No quiero volver a ese sitio. —Dijo abrazando fuertemente a Eduardo— No quiero que vuelvan a poner sus manos sobre mi. No quiero que me golpeen. No quiero terminar como Valeria.

- Hailey, escúchame. —Dijo tomando a Hailey de las mejillas— No vas a terminar como Valeria. Ni tú ni yo vamos a morir por culpa de esos animales. No voy a permitir que te vuelvan a poner una mano encima. Aunque yo sea el que reciba el golpe en la espalda, no dejaré que termines como ella. Ni como ninguna de las chicas de ese sitio.

- Estamos en desventaja. Gustavo y Esteban son muy fuertes contra nosotros. No tenemos a mamá para que nos defienda, aún sigue en rehabilitación. Estamos solos en esto, estamos indefensos contra ellos dos.—Contestó entre lágrimas

- Te puedes quedar con Carlos. —Dijo mientras abrazaba a Hailey

- ¿Carlos? —Preguntó sarcásticamente, mientras rompía el abrazo con Eduardo y se levantaba— El apoya lo que hace papá, ¿Porque crees que papá me lo presento? Porque es el único chico que a estado de acuerdo y le interesa lo que hace papá. ¿Te tengo que recordar los comentarios que hizo de Valeria?

- Olvídalo. —Contesto

- Estamos jodidos, es la realidad. —Dijo comenzando a llorar de nuevo— A la primera que van a tomar soy yo. Yo fui la que prendí el fuego en la oficina.

- Nadie te va a hacer daño, hazme caso Hailey. No voy a dejar que eso pase. Te voy a proteger en todo momento, nunca te voy a dejar sola. Ya perdí a Valeria, no quiero perderte a ti tampoco. —Contestó tomando de los hombros a Hailey— Si quieres, puedo dormir aquí contigo. Por si acaso al sucio de Esteban entra a tu cuarto.

- Gracias, Eduardo. —Dijo entre lágrimas— No se que haría sin ti en estos momentos.

- Te quiero mucho, hermanita. Nunca lo olvides. —Dijo abrazando firmemente a Hailey

Eduardo se fue del cuarto de Hailey, dejando a esta sentada frente a un espejo en su cuarto. La chica comenzó a quitarse su ropa lentamente frente al espejo. Dejando ver poco a poco más piel. Dejando ver muchas cicatrices, cada una tenía una historia por la que estaba ahí. Hailey se quedó mirando su cuerpo desnudo frente a ella. Lo miraba con asco. Lo que veía en el reflejo le causaba un disgusto gigante. Pasaba sus manos por su cintura, por sus caderas, sus partes íntimas y comenzó a romperse lentamente hasta caer en llanto. Tenía tanto dolor y rabia que las lágrimas salían como si nada, como si quisiesen salir desde hace mucho tiempo.

- ¡Hailey! Soy yo, Carlos. —Dijo una voz tocando la puerta fuertemente— Voy a entrar.

- Dame un segundo. —Contestó Hailey limpiando sus lágrimas rápidamente y corriendo a tomar una sabana

- Hailey, quer- —Dijo para quedarse mudo viendo a Hailey frente a él, cerró la puerta con seguro y comenzó a acercarse a ella— ¿A que viene esto?

- A nada. —Contestó echándose hacia atrás— Solo me estaba cambiando.

- No mientas, hiciste esto para mi. —Dijo tomando a Hailey de la cintura, comenzando a besar el cuello de la misma

- Carlos, no quiero hacerlo. No hoy, por favor. —Contestó intentando empujar a Carlos

- Claro que si, se que quieres. —Dijo quitándose su camisa— Solo déjate llevar.

- Te dije que no, no tengo ganas. —Contestó saliendo de los brazos de Carlos— No a sido un buen día.

- Pues déjame subirte el animo, no te vas a arrepentir. —Dijo tomando a Hailey del brazo

- Dije que no, respétalo. —Contestó reaccionado con miedo a que Carlos la tomara tan fuerte del brazo

- Hailey, llevamos meses sin tenerlo. ¿No crees que ya es momento de volver a hacerlo? —Preguntó

- Carlos, no lo hagas difícil. Solo, déjame sola. —Contestó

- No. Ya no puedo más, llevamos demasiado tiempo sin. Hoy tiene que pasar. —Dijo trayendo a Hailey hacia el, volviendo a dejar besos por todo su pecho

- Detente, por favor. — Contestó intentando salirse de sus brazos

- Solo haz silencio. —Dijo Carlos tapando los labios de Hailey

(...)

- Yo no quería. —Dijo Hailey mientras lloraba

- No hubieses estado desnuda cuando yo entré a tu cuarto. —Le contestó Carlos poniéndose de nuevo su camisa

- No sabía que ibas a venir. —Le contestó

- No deberías haber estado desnuda. —Le dijo acercándose a Hailey— Aunque me alegra que haya sido así. Nos vemos mañana. —Añadió, dejando un beso en la frente de Hailey para eventualmente salir del cuarto de esta

Hailey se levanto lentamente del suelo, tomó la ropa que estaba tirada en su suelo y se la puso. Para luego tirarse en la cama y obligarse a dormir.

MURDER | ÉLITEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora