Capítulo 9

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Kim Taehyung

— Oye, TaeTae ¿acaso nunca cocinas? — pregunta Jungkook mientras llevo la bolsa con la comida rápida que pedí por internet. Este fin de semana se hace interminable. — no me parece correcto que hagas venir al delivery con ésta lluvia. 

— Pues a mi me parece correcto tener hambre, no querer cocinar y pagar por una comida digna. — saco los platos y le doy tres sushis. 

Jungkook niega con la cabeza y empieza a comer al mismo tiempo que yo. 

— ¿Sabes? — habla con la boca media llena y luego traga la comida. Me observa con esperanza — te ves muy guapo cuando te ríes, así que por favor, sonríe más a menudo. 

— En mi defensa, pusiste una película de comedia ¿acaso querías que no me riera?

Jungkook niega con la cabeza y se ríe. 

— ¿Qué? — pregunto a la defensiva. 

— Te ves tierno cuando te enojas. 

— Ashhh, seriamente... — quiero lanzarle un sushi por la cabeza si me va a seguir diciendo esas cosas. —Oye tú, ¿hasta cuando te quedas aquí?

— Ya te lo dije, Hyung. ¡tú si que eres sordo, eh! Hasta que no te pongas feliz no me iré. 

— Hoy estuve... con el animo un poco mejor, digamos. Podrías irte yendo la verdad. 

¿Cuantas maneras tengo de echarlo de casa sin sonar tan descortés?

— Lo siento, no me iré de aquí. — Jungkook termina los sushis y se coloca un poco de carne en el plato. — Si mañana no hay lluvia me acompañaras a hacer mi cardio matutino.

— ¿Estás loco? — pregunto riendo. — ¿haces ejercicio los domingos por las mañanas?

— Hago ejercicio cad vez que puedo... o cuando tengo la oportunidad. 

— Definitivamente estás loco. No voy a acompañarte a ningún lado. 

— Te voy a levantar de la cama lo quieras o no, Taehyung. ¡tienes que ponerte de ánimos cuanto antes! o será peor para tu lindo corazoncito. ¿acaso no ves? mi novio acaba de terminar conmigo y yo estoy mucho mejor. 

Definitivamente Jungkook ha estado mejor desde que lloró el otro día. 

— ¿No sientes un vacío? — pregunto seriamente mientras dejo mi comida a un lado. 

— Sí... pero hago mi mejor esfuerzo por dejarlo de lado ¿sabes? algo así como tapar un agujero lo más pronto posible. No quiero estar herido porque no me siento bien y cuando no me siento bien... pues creo que es peor para mi salud mental. 

— O quizás no te sientes tan mal porque no lo amabas en verdad. — propongo cruzandome de brazos. 

Jungkook se me queda viendo y deja la carne a un lado. Me mira a los ojos con tanta intensidad que desearía ser capaz de apartar la mirada, pero algo me dice que no lo haga. 

Sus ojos brillan con algo de tristeza. 

— Yo... yo sí lo amaba. 

—¿Estás seguro? A veces el destino separa a las personas porque las cosas no funcionan... quizás tu no lo querías de esa manera y por eso no sufres tanto. — me quedo callado por un momento en el que reflexiono cómo seguir hablando para no sonar tan malo — Lo superaste demasiado rápido como para estar seguro de que lo amabas. Quizás en el momento te dolió, porque habrá sido un golpe bajo... pero creo que en realidad lo que te dejó mal fue la sorpresa del asunto — observo su expresión estupefacta y entonces digo: —¿di en el clavo, no es así?

Jungkook baja la cabeza y puedo notar que sus mejillas están rosadas. 

—Yo si lo quería. 

— Pero no lo amabas. ¿Ese tal YeonJun es tu primer novio, verdad?

— Así es.

— Pues prepárate, porque dicen que el segundo es el que más duele. 

—¿Te crees esas cosas? es mentira... en realidad el primero es el que más duele. 

— Bueno, pues cuando tengas un segundo novio y si te terminan llamame y cuentame a ver qué tal. A mi también me gustaría comprobar esa teoría. 

— Son chorradas, Tae. 

— No lo sabemos a ciencia cierta. —me alzo de hombros y me levanto tomando los platos. — ayúdame a lavar. 

— ¡Oh por dios, vas a lavar!

— Sí... digamos que no quiero otra cucaracha corriendo por ahí. 

— ¡Genial, Taehyung!

Still on You. Taekook ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora