Jungkook
Al día siguiente fui a comprar varias cosas para empezar a fabricar el regalo para Taehyung.
Compré una bola de nieve que se abre y se cierra, está vacía y yo la tengo que rellenar con el diseño que se me ha ocurrido.
Al llegar a casa de Taehyung, aprovechando que él no está, dejo caer todo lo que traje sobre la mesa.
Voy a hacerle una bola de nieve (sin nieve) de dos ositos abrazaditos. Me parece algo muy tierno y que va justo con Taehyung. Yo siento que es como abrazar a un osito.
Pongo música en mi celular y luego manos a la obra.
. . .
Finalmente no me demoré demasiado haciendo el regalo, me parece que quedó muy bonito. Luego de haberlo terminado lo guarde envuelto en papel de diario y lo dejé en una bolsa de regalo violeta con un moño rosado súper gigante.
Hoy por la mañana fui a una casa de fotos y ya tengo en papel las que nos tomamos juntos. No son muchas pero sí son suficientes por ahora.
Compré un álbum de fotos y lo forre con esas primeras fotos nuestras.
Taehyung podrá usarlo para lo que quiera. Pero ese regalo se lo daré cuando volvamos a casa. De momento escondí ambos regalos en mi mochilita.
Ahora que lo pienso debería traer lo poco que deje en el orfanato... Olvide mis cuadernos de dibujo en blanco y algunos lápices...
Bueno, supongo que podré comprar otros.
Debería dejarme esos por si algún día vuelvo. De momento quiero estar aquí mientras Taehyung me lo permita.
Y hablando del rey de Roma...
Taehyung entra por la puerta cargado con su maletín y un traje negro que le queda pintado al cuerpo. Su camisa blanca está desabrochada a la mitad de su estómago, lo cual le da un aire muy sexy.
— Traje comida de sobra para todo un mes. — comenta dejando las cosas sobre la mesa. — estuve considerando buena idea dejar de comer comida rápida... Subí otros tres kilos más, si sigo así voy a salir rodando de esta casa.
No puedo evitar contener una carcajada al imaginarlo como la tía gorda de Harry Potter en la tercera película.
— Me parece bien que quieras comer saludable.
Me levanto de la mesa para recibirlo con cientos de besitos en las mejillas. Taehyung me agarra de la cadera y me besa los labios, luego saca las cosas de la bolsa y lo ayudo a acomodar todo en la heladera.
— Hoy podríamos comer salmón con arroz... O verduras. — propone mientras yo lo abrazo por detrás. Taehyung y yo caminamos como dos pingüinos abrazaditos por toda la casa y el perro nos mira mal.
— Si quieres yo prepararé una salsa para el salmón... ¿Salsa blanca? Pero no la haré picante, sino liviana. ¿Puedes creer que en mi orfanato le ponían pimienta hasta rebosar? Estaban locos.
— Que espanto. — dice riendo. — traje unos sandwiches ¿Quieres? No comí nada en todo el día.
— Nah, paso. Esperaré a la cena. Tu también deberías esperar. Dejatelo para mañana. Cocinemos ahora. ¡Ven!
Tiro de su mano y saco las verduras que trajo. Agarro un cuchillo y las empiezo a picar.
— Espera. — susurra cerca de mi oído mientras su cuerpo se pega al mío por detrás. Sus manos pasan sobre las mías y él es ahora quien maneja el cuchillo. — ¿No crees que es mejor hacerlo así?
Cuando Taehyung susurra se me disparan todas las hormonas. No puedo darle una respuesta porque su voz tan profunda y varonil me tienen mal.
Taehyung deja un beso en mi oído y creo que mi concentración para cortar verduras se ha ido al infierno.
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Still on You. Taekook ✔
Novela JuvenilEsta es la historia de un CEO joven en una empresa heredada por sus padres quienes fallecieron en un accidente de tren. Uno de los trabajadores de la empresa le trae un asistente de sorpresa para alegrarlo un poco y que Taehyung pudiera recuperar la...