Capítulo 24

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Me he hecho un Ask por si quieren preguntar, este es el nombre ask.fm/BrooklynMD

Es jueves William ya está en el café/bar en el pequeño pueblo dónde McQueen lo citó para contarle algo urgente e importante.

Aquella cafetería transmitía una sensación hogareña, cálida, daba gusto estar allí.

William se sentó en el taburete de madera, que antes se encontraba debajo de la barra.

Se abrió la puerta y dejó ver a un hombre castigado por los años, delgado y canoso;era McQueen.

-¡William!---lo llamó, con tono de voz alegre---.

-Sr. McQueen---forzó una sonrisa, el no quería estar allí---.

-Camarera, por favor un Gin-Tonic.

Esta lo miró y asintió.

-¿Y tú William, qué quieres?

-Yo no quiero nada---contestó---.

-¡Aprovecha hombre! Qué hoy invito yo---le dijo mientras le daba una ligera palmadita en la espalda---.

-Está bien. Camarera otra copa igual que la del señor---pidió William---.

Cuando les trajeron las bebidas, el Sr. McQueen se aventuró a hablar:

-William, mira la foto---le ordenó---

-Ya la ví. ¿Acaso hay algún problema?---preguntaba él un tanto confuso---.

-William mírala otra vez---mencionó completamente serio---.

-Lo siento McQueen, pero no sé que tiene esta imagen de especial.

La candidez de William estaba asqueando a aquel hombre canoso.

****

Por fin Jueves pensaba Nerea, hoy lo vería.

Le encantaba de él sus besos tiernos que le habrían trocitos de cielo; amaba su manera de mirarla, esa ternura, calidez y amor que desprendían sus ojos; la volvía completamente loca las caricias y susurros que le daba cerca del oído y en su cuello.

****

-¡Rafael!---le llamó---.¿A dónde me llevas?

-Ya lo verás---mencionó él dejándola con la intriga---.

-¡Claro, cómo no! Con esta venda en los ojos, seguro que lo veré.

-Jajajaja---se le escapó la risa a Rafael---.

-¡No es gracioso!---dijo ella con voz de niña consentida---.

-Sí lo es, solo que para ti no porque llevas la venda---explicó---.

Después de 30 minutos con la venda puesta, Rafael aparcó el coche.

Un escalofrío recorrió su nuca cuando le quitó las vendas de los ojos y.............

No pudo evitar echarse sobre él para abrazarlo y besarlo con todas las ganas del mundo y más.

Delante de Nerea, había una grandiosa puesta de sol que jugaba con los distintos tonos amarillentos y naranjas dispuestos como pinceladas en el lienzo del cielo que le daban unos matices inigualables.

Desde luego aquel atardecer se veía de lujo en el lugar en que ambos se encontraban.

Nerea se encontraba absorta por la escena inigualable del crepúsculo de la tarde que contemplaba, que ni siquiera se dio cuenta de que Rafael se puso de rodillas y le dijo:

-¡Nerea!

Al verlo de esa forma sus brillantes ojos quedaron ahogados por lágrimas.

-¡Nerea!---la volvió a llamar---.

-Sí---fue lo único que pudo pronunciar sin derramar sus contenidas lágrimas---.

-¿Quieres....................................

****

-¿William qué puedes ver en la foto?---le preguntó harto---.

-Pues veo a una pareja besándose en la tarde.

-Exacto y por casualidad no los conoceras ¿no?

Arrebatándole de las manos del Sr. McQueen la fotografía que este sostenía, se puso a escudriñarla*.

Se quedó perplejo y solo pudo vocalizar:

-Él---dijo con rabia e ira---.

Escudriñar: examinar.

Espero que os haya gustado este capítulo. Dios me encanta este capítulo es tan......

Bueno espero sus votos/comentarios y ¡¡por favor!! si os gustó este cap. hacedmelo saber de alguna forma.

Besos Sara:)

Como los trenes ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora