ANGEL, GODS & MONSTERS 🔥 Ayato Kirishima/Nimura Furuta

30 🔥 Kichimura

Dos días después...

Haise abrió la puerta de aquella celda de máxima seguridad, despertando a Misao.

-Buenos días, señorita Angel - saludó él. - Aunque es por la tarde.

Misao bostezó y se incorporó en su cama.

-No sé que momento del día es, ni en qué día estamos - contestó Misao, medio dormida. - Duermo cuando tengo sueño.

-Hoy es 13 de diciembre - sonrió Haise.

-Vaya, solo llevo aquí un mes... - murmuró Misao.

"Espero que papá venga pronto", pensó la chica.

Misao se levantó y fue hasta la silla que había frente al cristal. Se sentó, se cruzó de brazos y miró a Haise, quien todavía estaba de pie.

-¿Qué tienes tras la espalda? - Preguntó con una sonrisa.

El chico sonrió y se sentó. Puso en la mesa un libro y una máscara y se los pasó a la chica, atravesando el cristal. Misao lo cogió y sonrió al ver aquella máscara.

-Me preguntaba sí... Bueno, ¿sabes de quién es esa máscara? - Preguntó Haise.

Misao miró la máscara que sostenía en sus manos con algo de melancolía.

-De un ghoul - murmuró ella. Haise miró a Misao. Ella levantó la mirada y le sonrió. - ¿Te ha decepcionado mi respuesta?

-No es eso - negó él. - Solo quería un poco más de información.

-¿Por qué te iba a decir lo que tú ya sabes? - Preguntó la chica.

-No sé de quién es - respondió Haise.

-Entonces yo tampoco - contestó Misao.

El chico la miró.

-Angel, no estoy aquí para jugar - dijo Haise.

-Ya lo sé - sonrió ella. - Si has venido hasta Cochlea solo para preguntarme por esto... Has estado buscando información por tu cuenta, ¿verdad?

El chico lo pensó unos segundos y asintió.

-Pero no encontré nada - contestó.

-Dame un bolígrafo - pidió Misao.

-N-No podemos pasar objetos punzantes o peligrosos a los ghouls - respondió él.

-Kaneki - gruñó la chica.

-Sí, voy - obedeció buscando un bolígrafo en su chaqueta de inspector. Sacó uno y se lo pasó a la chica.

Misao lo cogió y abrió el libro. Escribió una nota en una esquina, lo cerró y se lo pasó al chico, junto a la máscara y el bolígrafo. Haise los cogió y miró la nota que ella había escrito "HySy Studio".

-Creo que él podría darte alguna pista, sobre todo si hablamos de máscaras - dijo Misao.

-Gracias, Angel - sonrió el chico. Se levantó y la miró. - Creo que ya debería irme.

-Esta bien, adiós - se despidió con una sonrisa.

"Esta ghoul... ¿Qué pasará cuando llegue el día de su ejecución?", se preguntó él. "¿Intentaré salvarla?"

Dos días después

Misao estaba sentada en el suelo de su celda, haciendo por quincuagesimoséptima vez aquella pirámide de falsos naipes. Colocó los dos últimos en la punta y sonrió con satisfacción. De pronto, oyó un par de golpes en la puerta y como esta se abría.