Ala rasi: cualquier cosa por ti || Peter Parker

21. Casi

Desperté en mi habitación dentro del complejo, miré a todos lados y solo vi la televisión encendida. "Tony Stark desaparecido."
—No. No, no, no, no.— susurré y me levanté con un terrible dolor de cabeza. Pero corrí hasta el primer piso, escuché ruido proveniente de la sala de conferencias y cuando me dirigí allá me encontré con el resto del equipo. No sabía que sentir al respecto, estaba muy confundida.
—Se ven asquerosos.— hablé con el ceño fruncido al ver a Steve y Natasha con un cambio de look. —Es bueno verlos de nuevo.— al final sonreí un poco y todos rieron conmigo.

Estábamos discutiendo sobre que debíamos hacer para proteger a todos y a las gemas al mismo tiempo. Visión insistía en quitarse la gema, lo que lo llevaría a quitarse la vida también.
—No se canjean vidas, Visión.— habló Steve. Después, Bruce nos explico que existía una posibilidad de sacar la gema sin matar a Visión, pero no teníamos las instalaciones necesarias.
—Conozco un lugar.— exclamé pensando en Wakanda de inmediato.

Subimos a bordo de la nave camino a Wakanda. Mientras íbamos en el jet, todos nos preparábamos para pelear, sabíamos que nos encontrarían ahí así que debíamos estar preparados. Al llegar, T'challa nos recibió personalmente y puso todos sus recursos a nuestra disposición. Llevaron a Visión y a Wanda con Shuri para comenzar la extracción mientras que los demás nos dirigimos al campo de batalla.
—Lamentó haber venido aquí.— me dirigí a T'challa cuando íbamos un poco más adelante del resto.
—¿De que hablas? Me alegra que nos hayan tomado en cuenta, hacía falta un poco de diversión por aquí.— exclamó tratando de aligerar un poco el ambiente.
—T'challa, esto no es diversión. Muchos morirán, un lado ganará y aún no sabemos cuál.— exclamé seria, la verdad es que no saber nada de Tony o Peter me tenia con los nervios de punta y no estaba de humor para chistes.
—Pues que suerte que hoy es un buen día para vencer.— afirmó el rey con una sonrisa y se adelantó a coordinar su ejército.

La lucha no tardó en comenzar y a pesar de que éramos demasiados de este lado, nuestros oponentes nos duplicaban, tal vez triplicaban, el número.
Corría con mis espadas electrocutando un alíen tras otro y de vez en cuando dos al mismo tiempo, lo poco que podía ver a los demás estaban igual de apretados que yo. Al ver a Steve en problemas corrí a ayudarlo y nos cubrimos la espalda un rato hasta que nos tuvimos que separar pero mientras yo avanzaba, algo cayó sobre mi haciéndome soltar mis dos armas. El alíen me dio la vuelta y cuando estaba por atacar, sentí una fuerte corriente eléctrica por todo mi cuerpo, volteé a ver mis manos y vi los pequeños rayos correr entre mis dedos, mis espadas hacían lo mismo. De pronto, un fuerte rayo cayó del cielo acabando con muchos de los oponentes, al ver hacia donde había caído el rayo, lo vi después de tanto tiempo. Thor estaba ahí, de vuelta y traía compañía un tanto curiosa. Crucé miradas con el dios, sonreímos y asentimos al mismo tiempo, pues el hecho de que nuestros poderes eran un tanto parecidos, nos hacíamos más fuertes mutuamente.

—Necesito a alguien con Visión.— escuché a Steve por el comunicador y avisé que yo iría con él. Cuando lo encontré, tuve que quitarle a una criatura de encima la cual trataba de hacerse de la gema. Después de un poco de lucha, logré vencerlo y llevé a Visión más adentro en el bosque para poder ocultarlo un poco mejor. Steve llegó de inmediato y al mismo tiempo, más alienígenas.
—Todos los vengadores a mi posición, necesitamos refuerzos.— habló y comenzamos a deshacernos de cuantos alíens pudimos. Casi de inmediato llegaron los demás a ayudarnos y cuando al fin acabamos, nos dimos cuenta que Wanda estaba destruyendo la gema. No lo habíamos logrado. Sin dejarnos tiempo para despedirnos de Visión, una nube negra apareció frente a nosotros revelando un enorme hombre morado.
—Es él, es Thanos.— exclamó Banner, claramente asustado. Y todos avanzamos a atacarlo, uno tras otro nos quitaba de su camino como si fuéramos de papel. No hacía ni un mínimo esfuerzo intranquilo nosotros. Sin embargo, cuando al fin llegó mi turno, estiré la mano como si esta fuese a detenerlo. Cuando no sentí nada, abrí los ojos y sorpresivamente me di cuenta que si lo había hecho, impactada noté que mi mano sacaba una luz azul que se conectaba con una gema de su guante.
—¿Pero qué..?— exclamé sin palabras, miré mi mano detenidamente y la hice hacia atrás como reflejo, pero me di cuenta que la luz jalaba a la gema. Sorprendido, Thanos me miró sin poder creerlo y comenzó a hacer su mano hacia atrás intentando evitar que consiguiera la piedra, pero usé mi otra mano y con toda la fuerza que tenía comencé a atraer la gema hacia mi. Está poco a poco se desprendió del guante, yo estaba tan enfocada en ella que no me di cuenta cuando Thanos se acercó ni escuché las advertencias de los demás hasta que fuera muy tarde.
—Casi.— vi su enorme rostro frente a mi y después un golpe seco en el abdomen me hizo perder toda la concentración y me mando al suelo del otro extremo de donde estábamos. El golpe había sacado todo el aire de mis pulmones y me había dejado aturdida por completo, todo giraba a mi alrededor y no lograba identificar sonidos o formas, solo vi destellos de luces de colores antes de que todo se volviera negro.